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Los desastres naturales

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  1. 1. http://www.portalplanetasedna.com.ar/desastres_naturales.htm Los DESASTRES NATURALES El viento, las olas y toda la dinámica natural nos muestran la compleja interrelación que existe entre la litosfera, hidrosfera, atmósfera y biosfera. Gran parte de esa dinámica es casi imperceptible, como la erosión o la sedimentación, producidas por el viento, los ríos, los glaciares, etcétera. En cambio, en otros casos, el comportamiento de los elementos naturales es violento, como los movimientos sísmicos y las erupciones volcánicas, que ponen en riesgo las sociedades, sus bienes o sus actividades. Un movimiento sísmico, un huracán o cualquier otro fenómeno extremo de la naturaleza se convierten en desastre o catástrofe cuando ocasiona pérdidas humanas o económicas. Es decir, se denomina desastre natural sólo cuando el problema social o económico es detonado por un fenómeno de la naturaleza. loe Golden dice “un peligro latente se convierte en desastre si ocurre donde vive gente”. Las consecuencias de los desastres naturales no deben mirarse únicamente desde el punto de vista de las vidas que se pierden, sino también desde el punto de vista económico, pues constituyen un obstáculo para el desarrollo económico y social de la región, especialmente en los países en desarrollo. En ellos, un desastre puede ocasionar una reducción del producto nacional bruto por varios años, por ejemplo, una inundación arrastra la capa fértil del suelo y tarda años en recuperar- se. Se ha calculado que las pérdidas del producto nacional bruto debidas a los desastres pueden ser, en proporción, 20 veces mayores en los países en desarrollo que en las naciones más adelantadas. La FAO ha calculado que la sequía registrada en los años 70 en El Sahel (África) redujo a la mitad el producto nacional bruto (PBN) de los países del área: Burkina Faso, Chad, Malí, Mauritania, Níger y Senegal. Los desastres pueden tener consecuencias tardías, es decir que sólo se pueden evaluar a lo largo de varios años. Una sequía o una inundación puede afectar la economía de la región o de un país de manera tal que repercuta en la calidad de vida o la salud de su población por varios años. Según la Oficina del Coordinador de las Naciones Unidas para el Socorro en Casos de Desastre (UNDRO), las inundaciones registradas en 1972 en Filipinas, retrasaron los esfuerzos de desarrollo del país entre tres y cinco años.
  2. 2. http://www.portalplanetasedna.com.ar/desastres_naturales.htm Una causa importante de la lentitud en la recuperación y reconstrucción de los países en desarrollo después de un desastre, es porque no cuentan con tantos bienes asegurados como los países desarrollados. El huracán Andrew, que azotó a Estados Unidos en 1992, ocasionó 30.000 millones de dólares de pérdidas, pero el 75% corrieron a cargo de compañías aseguradoras. En cambio, las inundaciones y deslizamientos de tierras que asolaron China en 1996, provocaron un perjuicio económico de 24.000 millones de dólares, pero sus seguros no alcanzaron al 2% de las pérdidas. Además, pasado el fenómeno, las víctimas no sólo necesitan ayuda material sino también apoyo psicológico: hay estudios que demuestran el aumento de los estados depresivos, de consumo de alcohol y hasta el incremento de la tasa de suicidios. Un punto a tener en cuenta es que los desastres o catástrofes originados por fenómenos naturales son cada vez mayores y acarrean pérdidas millonarias; aunque los científicos que observan, registran y analizan la dinámica natural afirman que la frecuencia de los casos extremos no ha aumentado considerablemente. Esto se debe en gran parte al aumento de la población mundial y de la pobreza, pues el dónde y el cómo construye el hombre sus viviendas puede agravar los riesgos tanto físicos (lesiones y muertes) como sociales y económicos, que son de lenta recuperación. En la actualidad, al menos un cuarto de la humanidad vive en zonas vulnerables a los desastres, sobre todo en los países en desarrollo. En ellos, la gente asienta sus viviendas en lugares propensos a sufrir estas catástrofes, por ejemplo en las laderas de las montañas, donde los aludes pueden arrastrar pueblos enteros, como sucedió en El Nevado del Ruiz (Colombia), o en los cauces de ríos, que cuando aumentan su caudal, desbordan y producen graves inundaciones. Otro elemento a tener en cuenta es que muchas de las acciones de los seres humanos como la deforestación y la contaminación agravan los efectos de los fenómenos naturales. Las selvas taladas de las laderas de las montañas favorecen las avalanchas o aludes, cuyos sedimentos rellenan los cauces de los ríos, haciendo que desborden con mayor frecuencia. CLASES DE DESASTRES NATURALES Se han clasificado más de 20 riesgos capaces de producir desastres. Abarcan desde terremotos hasta nieblas y brumas, pero los más importantes son:
  3. 3. http://www.portalplanetasedna.com.ar/desastres_naturales.htm Hidrológicos: oleajes tempestuosos, tsunamis Meteorológicos: inundaciones, huracanes, ciclones, tifones, tornados, sequías, heladas, granizadas, olas de frío o de calor, nevadas o temporales de invierno. Geofísicos: movimientos sísmicos y vulcanismo, avalanchas, derrumbes, aluviones, aludes. Biológicos: marea roja (aparición en la superficie de las aguas de mejillones, almejas, etc. que son portadores de toxinas y alteran la cadena trófica). LAS FUERZAS DEL INTERIOR DE LA TIERRA Desde la antigüedad, el hombre ha considerado que los movimientos sísmicos y el vulcanismo se encuentran entre los fenómenos naturales más temibles para su vida y sus bienes. Esto se debe a la rapidez de su aparición y a la violencia de las sacudidas que, en segundos, transforman una ciudad en un cúmulo de ruinas. Se originan por el desplazamiento de las placas de la corteza terrestre, que en sus movimientos de reacomodamiento liberan energía. Esta se transmite por medio de ondas que llegan a la superficie provocando la actividad sísmica u originando manifestaciones volcánicas. Por ello estos proceso se presentan en las zonas de contacto entre las placas. A fin de perfeccionar la protección antisísmica en el mundo se deben instalar más estaciones sismológicas. También resulta útil la preparación de un mapa de zonas de mayor frecuencia de sismos para poder aplicar las ordenanzas de construcción antisísmica o, por lo menos, métodos simples que permitan reforzar las viviendas existentes. Para ello se necesita la ayuda internacional, sobre todo en los países en desarrollo. Los movimientos sísmicos Los observatorios registran más de 100.000 temblores cada año, es decir, un promedio de uno cada cinço minutos, pero no se da el alerta porque la gran mayoría no causa daños a la población. Se consideran riesgosos sólo los movimientos bruscos de mayor intensidad que se producen en la corteza terrestre. Si su epicentro se localiza en los continentes, se los denomina terremotos. Si la sacudida es en
  4. 4. http://www.portalplanetasedna.com.ar/desastres_naturales.htm los fondos marinos se origina un maremoto, que es una agitación muy violenta de las aguas del mar. El aumento de la población y la tendencia a la concentración urbana en áreas vulnerables a estos fenómenos incrementan los riesgos, especialmente en el cinturón de fuego del Pacífico. Se denomina así al cinturón de volcanes y movimientos sísmicos que rodean a la placa pacífica. En éste, y en menor medida en la cuenca mediterránea , se libera el 80% de energía sísmica total La intensidad de los sismos se mide con el sismógrafo y se utiliza la escala de Richter (1 a 9). Indica por medio de ondas la cantidad de energía liberada desde el hipocentro, o sea el foco real del movimiento. Existe otra escala denominada Mercalli modificada, que va de O a 12 y evalúa la intensidad del sismo de acuerdo con los daños causados. Los terremotos destructivos son aquellos que registran una intensidad de grado 8 a 10, pero el daño provocado depende en gran parte del desarrollo económico de la región, de acuerdo con la calidad de los materiales de construcción utilizados. Los tsunamis Los tsunamis se originan, generalmente, por el desplazamiento de placas de la corteza terrestre en el fondo marino. También se pueden presentar por la caída de meteoritos. Se los ha registrado en todos los océanos, aunque la mayoría de ellos se presentan en el Pacífico. El tsunami de 1896 en la costa japonesa de Sanriko, levantó olas enormes que arrasaron el litoral a lo largo de más de 1.000 kilómetros, y ocasionaron la muerte a más de 27.000 personas. El fenómeno es registrado por los sistemas de detección y alerta con bastante anticipación, lo que permite transmitir la información a la población. Estados Unidos tiene colocado un sistema de alerta permanente contra los tsunamis en Honolulu (islas Hawai) y controla toda la cuenca del Pacífico. La potencia destructora de los tsunamis se debe a la velocidad con que se desplazan (alrededor de 800 km/h), y a la altura que puede alcanzar la ola cuando impacta contra las costas (de 20 a 30 metros), por lo que son muy peligrosas para las poblaciones que allí residen. Al avanzar sobre el continente socavan edificios, puentes, arrastran autos o embarcaciones, etcétera. Entre los países más afectados por los tsunamis se encuentra Japón debido a la alta densidad de población que habita en las zonas costeras bajas. Por este motivo se
  5. 5. http://www.portalplanetasedna.com.ar/desastres_naturales.htm construyeron rompeolas a la entrada de las bahías y puertos, además de realizar plantaciones de pinos. Todas estas medidas son simples paliativos, porque la fuerza que hay detrás de estas olas es muy difícil y costosa de contrarrestar con medidas de ingeniería. Vulcanismo Más de un 10% de la población mundial puede sufrir una catástrofe por vulcanismo. Se calcula que en la superficie terrestre hay alrededor de 1.500 volcanes potencialmente activos, de los cuales alrededor de 500 entraron en actividad en el curso ¿el siglo XX y cerca de 70 continúan en actividad, aunque son muy escasos los que entran en erupción. La erupción del volcán, o sea, el derrame de lava incandescente (entre 9000 C y 12000 C), arrasa con todo lo que encuentra a su paso y provoca graves incendios. Cuando la lava se enfría, se solidifica y forma las rocas ígneas. La superficie terrestre queda petrificada y tarda muchos años en volver a formarse sobre ella la capa de suelo donde el hombre pueda practicar la actividad agrícola-ganadera o forestal. Por ejemplo, se calcula que tardó aproximadamente 50 años la recuperación de la flora y la fauna en la isla Krakatoa, en Indonesia, cuando el volcán homónimo entró en 1883 en erupción y su lava la cubrió por completo. También se pueden presentar fenómenos anteriores o posteriores a la salida de lava, como la liberación de gases tóxicos, la diseminación de cenizas volcánicas, ríos de agua caliente y aluviones de barro que se presentan por el derretimiento de las nieves del cono volcánico. Por dichas razones se evita el asentamiento de población en estas áreas. Ejemplo de ello fue el volcán El Nevado del Ruiz, en Colombia. Cuando entró en erupción, la noche del 13 de noviembre de 1985, derritió la capa de nieve que tenía en su cráter por lo que el agua y posteriormente la lava ocuparon los cauces de los ríos y avanzaron a una velocidad de alrededor de 30 km/h sobre las ciudades de Armero y Chinchina. Causó alrededor de 25.000 muertos, más de 5.000 heridos y la destrucción de aproximadamente 6.000 viviendas. Otro caso preocupante es el del volcán Popocatépetl, en México, que comenzó su actividad en el año 1994 y amenaza a más de veinte millones de personas que viven en 100 km a la redonda.
  6. 6. http://www.portalplanetasedna.com.ar/desastres_naturales.htm En el encuentro de la Unión Geofísica Americana, en 1998 en Estados Unidos, un equipo de vulcanólogos de Hawaii presentó un sistema de alerta denominado Hot Spot (Punto caliente) porque localiza las anomalías térmicas por medio de colectores infrarrojos. Este sistema se basa en la observación permanente de doce puntos volcánicos ubicados en el océano Pacífico, en las islas Hawaii, en las islas Galápagos, en la isla de Monserrat, en el norte de Chile y en México. La información es tomada por dos satélites geoestacionarios de estudio del medio ambiente (GOES), que pertenecen a la Agencia Norteamericana de Observación Oceánica y Atmosférica (NOAA). Los registros llegan a los científicos de los observatorios terrestres, vía Internet, en minutos, lo que permite transmitir la alarma a la población con algunas horas de anticipación. DESASTRES POR CAUSAS METEOROLÓGICAS En algunas circunstancias el comportamiento de la troposfera alcanza condiciones extremas. Esto genera verdaderas catástrofes, ya que el exceso de precipitaciones, en un cierto lapso origina inundaciones. La falta de lluvias de manera irregular da lugar a sequías, que muchas veces coinciden con olas de calor. Las olas de frío causan las nevadas extraordinarias, las heladas tardías y también producen pérdidas económicas, especialmente en la agricultura. Otro desastre por causas meteorológicas lo constituyen las granizadas. Las nevadas perjudican la economía pues bloquean los caminos, principalmente en las zonas montañosas a alturas considerables, como los Alpes, los Andes argentino- chilenos. Producen gran mortandad de animales en los países menos desarrollados (donde no se practica la cría a galpón), pues no sólo mueren de frío sino también de hambre al quedar las pasturas cubiertas por la nieve. Las inundaciones Las inundaciones son las catástrofes naturales más frecuentes, originadas generalmente por lluvias torrenciales o por deshielos. Provocan varias consecuencias: perturban la economía de la región, sobre todo si es agrícola porque, al retirarse, el agua arrastra la capa fértil del suelo. Además, contaminan los suelos y las napas freáticas por lo que se presentan riesgos de epidemias.
  7. 7. http://www.portalplanetasedna.com.ar/desastres_naturales.htm Cuando las lluvias son torrenciales y caen en áreas con pendientes pronunciadas, generan aluviones de barro que arrasan lo que encuentran a su paso. Es lo que ocurre en el litoral brasileño, donde los aluviones que descienden de los morros suelen arrasar las villas de emergencia (favelas). Una de las inundaciones más recordadas por los daños que causó fue la de la ciudad de Florencia (Italia), en 1996. Debido a lluvias torrenciales el río Amo, que la atraviesa, aumentó su caudal y su velocidad.(alrededor de 130 km/h), salió de su cauce e inundó gran parte de Florencia. En esta inundación no sólo hubo que lamentar las personas que quedaron sin techo y otros daños económicos, sino también las pérdidas que sufrió la cultura, pues las aguas y el barro entraron a los museos y dañaron más de un millón de cuadros y otros objetos de arte. En nuestro país, la inundación de mayo de 1998 fue considerada la mayor catástrofe de este tipo del siglo XX. Afectó a un tercio de las provincias argentinas situadas a orillas de los ríos Paraná y Paraguay. Las ciudades de Resistencia (Chaco) y Goya (Corrientes) fueron las más afectadas. La inundación de 1999 afectó una de las zonas agrícolas más productivas del país, comprendida por el noroeste de Buenos Aires, nordeste de La Pampa, sur de Córdoba y Las sequías No se debe confundir aridez con sequía. La aridez es una condición permanente y las sociedades que viven en los desiertos se han adaptado a ella, realizando las obras necesarias para suplir la falta de agua. En cambio, la sequía es un fenómeno circunstancial o esporádico que provoca un desastre. Las sequías se expanden con mayor alcance y suelen durar más tiempo que los otros fenómenos naturales, por lo que el daño a largo plazo es mayor. Los efectos se extienden a todos los aspectos de la vida, entre ellos: • falta de agua potable, por la disminución del caudal de ríos y arroyos y el agotamiento de las napas freáticas; • hacinamiento en las ciudades, debido al éxodo rural a causa de la muerte del ganado por sed y hambre por falta de pasturas. Además, el viento provoca la voladura de los suelos arrastrando su capa fértil;
  8. 8. http://www.portalplanetasedna.com.ar/desastres_naturales.htm • crisis económica, el ganado adelgaza por falta de pasturas y baja su precio en el mercado. Además, su debilidad lo hace más vulnerable a las epidemias. También se elevan los precios de los alimentos al perderse las cosechas; • aumenta la frecuencia de incendios, al elevarse la temperatura y la aridez. Una de las sequías más importante se registró en El Sahel (África) entre 1969 y 1973. Afectó al sur del desierto del Sahara y produjo un aumento de su superficie (en Mauritania, Senegal, Malí, Burquina Faso y Chad). Además, murieron más de 200.000 personas de hambre y la mayor parte de los campesinos tuvieron que emigrar por las pérdidas de las cosechas y la muerte del ganado. Los tornados y los huracanes Hay dos tipos de vientos fuertes: el tomado y el huracán. Este último tiene distintos nombres según la región: se lo llama ciclón tropical en el Caribe, tifón en el Índico y mar de Japón, baguío en Filipinas y willy-willy en Australia. Los tornados son tormentas que pueden alcanzan una velocidad de hasta 500 km/hora. Se desplazan sobre los continentes entre los 200 y 500 de latitud en ambos hemisferios, formando una veloz corriente ascendente de aproximadamente 250 m de diámetro. Si se producen sobre las aguas marinas, se llaman trombas y representan un serio peligro para la navegación. Entre los más recientes se destaca la serie de 59 tornados, que, uno tras otro, devastaron inmensas áreas de la planicie central de Estados Unidos, en mayo de 1999, quedando miles de personas sin viviendas. El tornado más fuerte alcanzó un diámetro de un kilómetro, y una velocidad superior a los 200 km/hora. Los huracanes son violentas perturbaciones que se producen en la troposfera. Se originan por una baja presión atmosférica (de hasta 900 hPa) y giran en forma de espiral alrededor de su centro (ojo del huracán). Son acompañados de fortísimos vientos de hasta 300 km/h, impresionantes trombas de agua (hasta 2.000 litros por m2 en un día), embravecimiento del mar y tormentas eléctricas. Los huracanes se desplazan hacia el oeste, girando luego hacia el norte o hacia el sur cuando penetra en los continentes. Se originan sobre los océanos, entre los 50° y 20° de latitud, cuando la temperatura de las aguas oceánicas es de 270°C o aún
  9. 9. http://www.portalplanetasedna.com.ar/desastres_naturales.htm mayor. Los vientos que alcanzan velocidades de 200 km/hora rotan en círculos de 500 a 1.800 km. de diámetro, durante varios días o incluso semanas. Los efectos destructivos adquieren su mayor expresión cuando producen inmensos oleajes que se abaten sobre las costas. Si bien los vientos se debilitan al llegar a los continentes, las lluvias que originan pueden causar graves inundaciones. Un huracán muy devastador fue el Mitch, en 1998. A su paso por Centroamérica dejó alrededor de 30.000 muertos y desaparecidos, y cuantiosas pérdidas económicas, ya que destruyó viviendas, puentes, caminos y gran parte de las plantaciones de café y plátanos. Al efecto devastador provocado por los grandes tornados o huracanes se lo suele llamar a nivel internacional catástrofe humanitaria y la respuesta de la comunidad internacional es inmediata. Se movilizan las ONU de ayuda en catástrofes y los gobiernos de los países vecinos y de los desarrollados. Los desastres se presentan con más asiduidad en los países periféricos. De todos modos, los países desarrollados se encuentran siempre involucrados, porque son los responsables de otorgar créditos a los gobiernos damnificados, para que puedan reconstruir la infraestructura mínima para la población y reactivar su aparato productivo. LOS FENÓMENOS DE EL NIÑO Y LA NIÑA El Niño y La Niña son los nombres de dos fenómenos atmosféricos-oceánicos que se presentan cíclicamente en períodos variables de 2 a 7 años. Tienen mayor incidencia en el océano Pacífico y sus alrededores, a la latitud del ecuador. Las consecuencias que generan afectan tanto el ámbito regional como el global, pues transforman el estado del clima de casi toda la Tierra. Por ejemplo, durante el episodio de El Niño 1997-98 la temperatura en Mongolia alcanzó los 42°C y las precipitaciones en el centro de Europa ocasionaron una de las mayores inundaciones del siglo. Las consecuencias afectan severamente la vida social, económica y política de los países. En las áreas normalmente húmedas se originan prolongadas sequías, en las zonas áridas se producen torrenciales lluvias y olas de frío o de calor en distintos lugares del mundo. Esto provoca graves pérdidas en las actividades económicas,
  10. 10. http://www.portalplanetasedna.com.ar/desastres_naturales.htm sobre todo en las actividades primarias, por lo que afectan mucho más a los países en desarrollo donde éstas constituyen la base de su economía. Por ejemplo: • las sequías, aumentan la mortandad del ganado y los incendios forestales que contaminan el ambiente y provocan pérdida de la biodiversidad; • las lluvias torrenciales provocan graves inundaciones y aluviones de barro y rocas; • el aumento de la temperatura de las aguas aleja de algunos bancos pesqueros especies ictícolas muy importantes por su valor comercial por lo que se perjudica la actividad pesquera; • otra actividad afectada es el turismo, fuente de ingreso para estos países. ¿Cómo es la circulación atmosférica-oceánica en tiempos normales? Los vientos alisios soplan de Este a Oeste y arrastran las aguas cálidas superficiales del océano Pacífico hacia su sector occidental. Por este motivo, en las costas asiáticas y australianas, el mar se encuentra alrededor de 50 cm. más alto y con 70 C a 90 C más de temperatura que en las costas americanas. Esto hace que: • frente a las costas del Sudeste Asiático, durante el verano, haya mayor evaporación de las aguas. Los vientos monzónicos transportan la humedad provocando las lluvias sobre el continente, y permiten la práctica de la agricultura intensiva, que proporciona el alimento de millones de personas; • frente a las costas americanas, donde circulan las corrientes frías de California y de Humboldt, se dificulta la evaporación. Esto hace que el clima en las costas sea árido y que las aguas cálidas superficiales sean de poco espesor. Este proceso permite el ascenso de las aguas profundas con los nutrientes que alimentan a la abundante fauna marina, generando una de las áreas pesqueras más productivas del mundo.
  11. 11. http://www.portalplanetasedna.com.ar/desastres_naturales.htm ¿Qué sucede cuando se presenta El Niño? En los años en que se presenta El Niño se origina una alteración en la presión atmosférica sobre el océano Pacífico, que disminuye cerca de Tahití y aumenta al norte de Australia. Los vientos alisios se debilitan o incluso desaparecen y por lo tanto se originan, tanto en la atmósfera como en los océanos, grandes anomalías. Los vientos alisios no tienen fuerza para arrastrar las aguas cálidas superficiales hacia las costas asiáticas, entonces regresan a las costas americanas formando la contracorriente El Niño. Esto provoca efectos atmosféricos y oceánicos contrarios a los tiempos normales. Es decir, en las costas asiáticas aparecen las sequías, los incendios en los bosques, etcétera. En las costas americanas se desatan grandes temporales tropicales, que acarrean aluviones e inundaciones. ¿Qué pasa cuando aparece La Niña? Se produce un mecanismo inverso al que originó a El Niño: la presión atmosférica sube en Tahití y baja en Australia, se restablece la dirección de la circulación normal pero con más fuerza. Los vientos alisios soplan con más intensidad que la normal y arrastran hacia el Pacífico occidental mayor volumen de agua, provocando que aflore más cantidad de agua fría en el Pacífico oriental. Esto provoca precipitaciones superiores a las normales en Asia, Australia e inclusive en Africa del Sur. Mientras tanto, desciende la temperatura sobre las costas americanas y aumenta la aridez y la frecuencia de los huracanes en la planicie central de Estados Unidos. LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS La tecnología desempeña un importante papel en la detección y prevención de los desastres. La década de 1990 ha sido declarada en la XII Asamblea General de las Naciones Unidas, como Década Internacional para la reducción de las Desastres Naturales (DIRDN). Con la ayuda de las nuevas tecnologías, entre ellas la espacial (satélites de teledetección), la de las comunicaciones (telemática) y la de los censores, gran cantidad de científicos (meteorólogos, vulcanólogos, etcétera) están dedicados a estudiar el origen y desarrollo de estos fenómenos. El objetivo es tomar las medidas necesarias con el fin de moderar los efectos de los desastres naturales y educar a la población para afrontarlos y contrarrestarlos en la medida de lo posible.
  12. 12. http://www.portalplanetasedna.com.ar/desastres_naturales.htm Las imágenes satelitales permiten contar con la cartografía de las zonas de riesgo como, por ejemplo, de las áreas fácilmente inundables. Por medio de satélites, como el GPG —que es controlado por la estación espacial National Aeronautics and Space Administration (NASA)—, se pueden medir los desplazamientos de las placas tectónicas, aunque sean milimétricos, lo que permite advertir sobre una futura actividad sísmica o volcánica. Los satélites de percepción remota, que utilizan técnicas fotográficas con rayos infrarrojos, pueden emplearse para detectar modificaciones en la densidad de la vegetación en zonas proclives a las sequías. También hay satélites meteorológicos que permiten la predicción y seguimiento de las tormentas tropicales. Asimismo, la NASA ha desarrollado un escáner térmico multiespectral de infrarrojos (TIMS) que opera desde un avión y permite detectar los cambios en la temperatura del magma de los volcanes. Esta información resulta sumamente útil para predecir sus erupciones o seguir la evolución de las nubes eruptivas. Estados Unidos es uno de los países más adelantados con respecto a la detección de los movimientos sísmicos. Cuenta con un sistema de sismógrafos digitales computadorizados instalados en distintos puntos del sur del Estado de California, que brinda información muy precisa sobre temblores percibidos en cualquier parte del planeta. Este país presta especial atención a este fenómeno en el sudoeste de su territorio debido a la presencia de la falla de San Andrés, que recorre California de norte a sur a lo largo de 1.000 kilómetros. Esta falla marca el límite principal entre las placas del océano Pacífico y la de América del Norte. La placa del Pacífico se desplaza hacia el noroeste a razón de cinco centímetros por año, por lo que en esta zona de contacto se producen, con relativa frecuencia, pequeños sismos. Sin embargo, algunas veces, la presión se acumula durante años hasta que un gran terremoto la libera. Ejemplo de ello fue el que sacudió la ciudad de San Francisco en 1906. En la actualidad, los sismólogos pronostican en esta zona un gran terremoto los próximos veinte años, al que denominan Big One, que podría ocasionar la separación de la zona costera del territorio continental. Varias ciudades, como San Francisco o Los Ángeles, podrían desaparecer bajo los escombros.
  13. 13. http://www.portalplanetasedna.com.ar/desastres_naturales.htm Las Naciones Unidas patrocinan redes de computadoras destinadas a la prevención de desastres: Unienet y el Banco de Datos sobre Desastres son dos de los más importantes. Unienet es una red de computadoras que permite a todas las personas del mundo que se ocupan de desastres mantenerse en contacto. Así pueden disponer instante de antecedentes e información operativa relacionada con ellos. Unienet funciona en forma conjunta con los organismos de las Naciones Unidas y otraorganizaciones intergubernamentales y no gubernamentales. El Banco de Datos sobre Desastres contiene más de 5.000 descripciones de desastres desde 1900 hasta la actualidad. Allí figuran la asiduidad con que se presentan, las zonas más afectadas por ellos, etcétera, a fin de crear los mecanismos para su prevención. LOS DESAFÍOS PARA EL SIGLO XXI Con frecuencia, los desastres naturales echan a perder los esfuerzos y las inversiones de muchos años. Por ello, Los desafíos para este siglo son: • reducir la pérdida de vidas humanas y de bienes económicos mediante La información y la educación de la comunidad mundial acerca de cómo prepararse contra Los desastres; • emprender un esfuerzo mundial concertado para La formulación de programas y estrategias con el fin de reducir el nivel de vulnerabilidad de Las sociedades ante este tipo de desastres, teniendo en cuenta las diferencias culturales y económicas entre las naciones; • compartir La tecnología entre los países y capacitar a los profesionales de los países en desarrollo para que puedan utilizarla; • considerar los gastos en la prevención de los desastres como parte del proceso de desarrollo de un país, y tratar especialmente de que los gobiernos de los países más pobres Lo incluyan en sus presupuestos.
  14. 14. http://www.portalplanetasedna.com.ar/desastres_naturales.htm LA LUCHA ECOLÓGICA La lucha ecológica es la lucha por nuestra supervivencia como especie. La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza y los Recursos Naturales fue uno de los primeros movimientos internacionales que se formó con este fin. Surgió en Francia, en 1948, con el auspicio de la UNESCO. En el último cuarto de siglo, la cooperación internacional sobre medio ambiente se ha convertido en un tema primordial tanto para las Naciones Unidas, como para los organismos gubernamentales y no gubernamentales. Se han firmado declaraciones, convenios y tratados sobre problemáticas ambientales con resultados dispares, y se han creado organismos internacionales. Las ONO han desarrollado una importante labor. Entre ellas, se destaca la organización ambientalista más grande del mundo, Greenpeace (Paz y Verdor) fundada en 1971, en Canadá. Se extendió a los cinco continentes y hoy cuenta con más de cuatro millones de socios en el planeta. Tienen presencia en todos los lugares donde se agrede a la naturaleza. Por ejemplo, con sus lanchas neumáticas, muchas veces en arriesgadas acciones, sus miembros se interponen entre las ballenas y los lanza-arpones de los barcos balleneros. También encabezan protestas contra el arrojo de desechos tóxicos a las aguas o a la atmósfera. Además, apoyan la formación de organizaciones locales para este fin. Algunos movimientos ecologistas se transformaron con los años en partidos políticos. Es el caso del Partido Verde, en la República Federal Alemana, que desde 1980 participa en las elecciones y tiene representantes en el parlamento federal. Desde entonces, ellos son la cabeza visible del ecologismo práctico y de la acción concreta. El 5 de junio de 1990 se estableció el Día deja Tierra. Durante aquella jornada, cientos de organizaciones ecopacifistas de todo el-globo se pusieron de acuerdo para lanzar un grito desesperado: detener la destrucción del planeta. En junio de 1992, se celebró la Conferencia de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente y el Desarrollo, conocida como Eco ‘92 o la Cumbre de Río (se celebró en Río de Janeiro, Brasil). Fue la reunión más importante de todos los tiempos pues concurrieron representantes de 178 países, de los cuales la mayor parte eran jefes de Estado, y asistieron integrantes de 2.500 ONO.
  15. 15. http://www.portalplanetasedna.com.ar/desastres_naturales.htm En la reunión los delegados aprobaron tres documentos: • la Declaración de Río sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo, que es un resumen de principios ecológicos; • el Programa o Agenda 21, que es un plan integral para dirigir Las acciones nacionales e internacionales ha • la Declaración de Bosques, que consta de quince principios para la gestión sostenible de los bosques y regula el comercio de la madera, aunque no establece límites para frenar la deforestación. Además, se firmaron dos tratados internacionales: el Convenio sobre la Diversidad Biológica y el Convenio sobre el Cambio Climático Con posterioridad a la Cumbre de Río hubo otras reuniones para seguir avanzando en estos temas, como la Cumbre sobre el Cambio Climático, en 1997, en Kioto (Japón). A pesar de todo lo que se hizo hasta hoy, este proceso de cambio de actitud frente a la naturaleza recién comienza. Falta recorrer un largo camino, no sólo para que las sociedades tomen conciencia y modifiquen su forma de relacionarse con la naturaleza, sino también porque llevará mucho tiempo recuperarla. El destacado biólogo francés Jacques Cousteau afirmaba que “somos pasajeros sin nacionalidad de una nave llamada Tierra, cuyo futuro está en peligro”. Vivir en un medio ambiente sano es un derecho humano. La Declaración de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Humano, reunida en Estocolmo en junio de 1972 expresa la convicción común de que “el hombre tiene el derecho fundamental a la libertad, la igualdad y el disfrute de condiciones de vida adecuadas en un medio de calidad tal que le permita llevar una vida digna y gozar de bienestar, y tiene la solemne obligación de proteger y mejorar el medio para las generaciones presentes y futuras”.
  16. 16. http://www.portalplanetasedna.com.ar/desastres_naturales.htm LA CULTURA DE LA PREVENCIÓN Ya que es imposible evitar los fenómenos extremos de la naturaleza, las sociedades deben prepararse para limitar sus efectos. Es necesario crear una cultura de prevención, para la cual es de suma importancia la tarea de los medios de comunicación y de los docentes como multiplicadores de la información. De esta manera, el 90% de las defunciones provocadas por los movimientos sísmicos podrían evitarse. Sin embargo, alrededor de la mitad de los países más vulnerables a los desastres no cuenta con una planificación adecuada para enfrentarlos. Ni la planificación, ni su aplicación o su resultado es igual en todos los espacios geográficos del mundo, pues dependen de factores políticos, culturales y, sobre todo, del nivel de desarrollo socio-económico del país. No produce el mismo tipo de daño un sismo, huracán o tornado en Estados Unidos que en Bangladesh o la India. Con respecto a las pérdidas económicas, son de mayor volumen en Estados Unidos pues las autopistas, viviendas, etcétera, tienen mayor valor. Pero el número de víctimas fatales es mayor en los países en desarrollo por su escasa infraestructura para proteger a la población y sus bienes. La prevención de los riesgos es fundamental y, aunque parezca elevado el costo de su planificación, es sin embargo ínfimo con respecto a los gastos posteriores a un desastre. Por ello, aunque la prevención debería insumir los mayores esfuerzos físicos y monetarios, no es así en casi todos los países del mundo, ya que el presupuesto más elevado está destinado a la reconstrucción. En la década de 1950, en 11 tifones e inundaciones importantes fallecieron alrededor de 13.000 personas y más de un millón de hogares resultaron destruidos o anegados. En cambio, cuando en junio de 1964, Nigata, en Japón, sufrió el mayor terremoto ocurrido en 40 años, aunque fueron afectadas más de 150.000 personas y la mitad de la ciudad quedó inundada, sólo 11 personas resultaron muertas y unas 120 heridas. Esto se debió a que la respuesta de la comunidad ante el desastre fue eficaz, porque Japón había implementado planes de información pública sobre las acciones a seguir ante la presencia de un desastre natural. La planificación debe tener en cuenta todas las actividades de prevención y mitigación de un desastre, e incluir a todos los actores sociales: economistas, sociólogos, políticos, geólogos, meteorólogos, asociaciones gubernamentales y no gubernamentales, etcétera. Los principales aspectos a tener en cuenta son:
  17. 17. http://www.portalplanetasedna.com.ar/desastres_naturales.htm • investigación del fenómeno para evaluar su intensidad y frecuencia con el fin de confeccionar y difundir el mapa con las zonas de riesgos. Esto sirve para que todos los que habitan dicho espacio conozcan los peligros a los que están expuestos y cómo deben actuar en caso de catástrofes; • aplicación del conocimiento científico y la tecnología para la prevención de los desastres y su mitigación. Esto debe incluir la transferencia de experiencias y un mayor acceso a los datos relevantes (por ejemplo, el seguimiento satelital que se hace de la falla de San Andrés, en California); • toma de medidas preventivas, como normas de seguridad para el asentamiento de la población, con edificaciones de baja altura que resistan ciclones y huracanes o movimientos sísmicos de magnitud. Las nuevas construcciones en las zonas sísmicas se realizan con técnicas sismorresistentes, sus cimientos están apoyados en materiales aislantes de las vibraciones del suelo; • previsión de los riesgos secundarios que se pueden presentar; por ejemplo, inundaciones causadas por la fractura de un embalse como consecuencia de un sismo; • los medios de comunicación son muy importantes tanto para el alerta (sirenas, luces, etcétera.) como para la difusión (radio, televisión, Internet) de la información para organizar a la comunidad en el momento o reorganizarla después del desastre. Los sistemas de alarma instalados en los países caribeños han reducido el número de víctimas durante la estación de los huracanes.

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