1. "Detrás de cada línea de llegada, hay una de partida. Detrás de cada logro, hay otro desafío.
Mientras estés vivo, siéntete vivo. Si extrañas lo que hacías, vuelve a hacerlo.”
Sor Elisa Muñoz Jara, directora .Señor Milton Brevis Ibáñez, subdirector. Señora Hela Palacios
Venegas, inspectora general. Señor Oscar Seguel Cancino, jefe unidad técnica pedagógica.
Señorita Adriana Gutiérrez Cartes, encargada de pastoral. Queridos profesores, familiares,
queridas compañeras, tengan ustedes muy buenas noches.
Hoy, después de trece años, nuestro colegio nos abre las puertas por última vez para vestir
como alumnas, y decir adiós. Pero es un adiós que no significa un “hasta nunca”, sino que va
lleno de un eterno “hasta luego” que refleja esperanza, deseos, sueños y porque no también
miedos. Miedo a lo que vendrá, que si son 7 u 8 materias nuevas, que si hacemos amigos o no,
que si aprobamos o no los ramos, y muchas cosas mas son las que en este minuto nos llenan
de temor. Sin embargo, existe algo aún mas grande, una ilusión que lo compensa todo; crecer.
Dar paso a una nueva etapa, que con certeza les digo, estará cargada de nuevos aprendizajes,
llena de nuevas personas que serán nuestros guías, sin dejar de lado las enseñanzas de
quienes hoy quedan en el pasado.
Esta noche, compañeras, amigas, confidentes, culmina lo que hace 13 años comenzó. Esta
noche quedarán sellados con un largo abrazo y unas cuantas lagrimas, tantos días de juegos,
de risas y penas, de alegrías y miedos. Esta noche se define si se acaba nuestra amistad, o
si se hace mas fuerte. Al salir de aquí, lo haremos con la frente en alto, con la certeza de que
logramos finalizar con éxito ésta etapa, con la convicción de que nuestro colegio nos entregó
todas las armas necesarias, para salir y enfrentar con seguridad todas las dificultades en el
campo de batalla.
Hay que agradecer, en primer lugar a nuestros padres, que siempre quisieron lo mejor para
nosotras, preocupados siempre por nuestro rendimiento y nuestra formación personal. Gracias,
por haber tomado tan acertada decisión, de habernos formado académicamente en éste
colegio. Gracias a los que hoy, en este minuto, recuerdan nuestro primer día de clases en
kínder, y al igual que nosotras, tratan de explicarse cómo fue que el tiempo pasó tan rápido.
Gracias a los que hoy ven con orgullo, como sus hijas emprenden el rumbo hacia sus metas y
sueños.
Y como olvidarlos a ellos, nuestros profesores, quienes día a día guiaron nuestros caminos,
siendo muchas veces una mano amiga, y entregándonos un consejo a tiempo. Gracias porque
siempre nos dijeron que éramos capaces, que podíamos lograrlo, siempre cercanos a la
conversación, comprensivos frente a nuestras dificultades, pero exigentes a la hora de evaluar.
Creo que el agradecimiento y el reconocimiento a su labor, es unánime. Es ahora cuando
entendemos que se necesita algo más que una pizarra y un plumón para hacer una clase. Se
necesita dedicación, vocación, y mucha paciencia.
Gracias a los directivos, y a todo el personal del colegio La Purisima Concepción, desde la
persona que nos recibía en la puerta todas las mañanas, las inspectoras, siempre presentes en
cada recreo, rogando por un poco de tranquilidad, y hasta los mas altos cargos de nuestra
institución. Gracias por colaborar en nuestro crecimiento individual, como personas, y
estudiantes.
2. Aquí nos enseñaron a proponernos metas y a lograrlas. Nos enseñaron que en el trabajo en
equipo, todos suman. Que si nos caemos nos levantamos, y seguimos luchando. Que una
derrota no significa un fracaso, cuando damos nuestro máximo esfuerzo.
Aquí aprendimos que el estudio, si vale la pena, que las matemáticas son exactas, que la
historia, pesa más de lo que piensan, que los idiomas abren puertas y ventanas.
Descubrimos que la alegría de tu curso, es tú alegría, que el dolor de una amiga, es tu propio
sufrimiento, que si hay que reír, lo hacemos, y si hay que llorar, lloramos.
Es este el lugar, donde hace 13 años, tomadas de las manos varias de ustedes emprendieron
un camino, en el cual poco a poco algunas quedaron atrás, otras se fueron, y unas cuantas
llegamos.. Sin embargo, hoy soltamos nuestras manos, agradecidas por todos los momentos
vividos, los conocimientos adquiridos, y los valores entregados.
En pocos minutos más, saldremos al encuentro con nuestro futuro, caminando de la mano junto
al Amigo que Nunca Falla, Jesús. El mismo que nos acompañó durante estos largos años y que
nos seguirá acompañando donde quiera que estemos.
No puedo despedirme, sin desearles el mayor de los éxitos a cada una de ustedes. Siéntanse
orgullosas, de todo lo que han logrado, y lo que están por lograr. No olviden que la juventud no
es una etapa de la vida, sino un estado del espíritu.
Y por ultimo, gracias a quienes hicieron que estar aquí, haya sido un mejor lugar donde esperar
la vida. Esperamos que nos recuerden, como una generación alegre, agradecida, y esperamos
también, haber dejado nuestra huella en la institución que albergó a esta gran familia de IVºs
Medios, durante largos años. Compañeras, nunca pierdan la memoria de lo que han vivido,
porque en lo que somos hoy, está presente lo que fuimos.
Muchas Gracias.
Nicole Acuña Gallegos – IVº A.