SlideShare una empresa de Scribd logo
1 de 13
● Este Salmo es un himno de alabanza al Señor, que estableció su
trono en Sión para revelarse a Israel como Rey justo y poderoso (vs.
1-4).
● La benevolencia y la justicia con que el Señor gobierna a su Pueblo
se manifiesta, de manera arquetípica, en las figuras de Moisés, Aarón
y Samuel: ellos son, a un mismo tiempo, los mediadores de la
Revelación divina y un ejemplo constante para los fieles (vs. 6-8).
● La triple aclamación al Dios “santo” (vs. 3, 5, 9) recuerda el canto
de los Serafines de Is. 6. 3, y es un indicio del carácter marcadamente
litúrgico del Salmo.
● Si bien este poema pertenece al grupo de “Himnos a la realeza del
Señor” (Sal. 47; 93; 96 - 98), por su forma y su contenido difiere
notablemente de los demás.
▬ «El Señor reina». Esta aclamación, inicio del Salmo 98 revela un tema fundamental y su
género literario característico. Se trata de un canto del pueblo de Dios al Señor, que
gobierna el mundo y la historia como soberano trascendente y supremo.
▬ De hecho, al comenzar el día, el fiel sabe que no está abandonado a la merced de la
casualidad ciega y oscura, ni abocado a la incertidumbre de su libertad, ni dependiente de
las decisiones de otro, ni dominado por las vicisitudes de la historia. Sabe que, por encima
de toda realidad terrena, está el Creador y Salvador en su grandeza, santidad y misericordia.
▬ El salmo tiene el sabor de una alabanza contemplativa que se eleva hacia el Señor,
sentado en su gloria celeste ante los pueblos y la tierra (Cf. versículo 1). Y, sin embargo,
Dios se hace presente en un espacio y en medio de una comunidad, es decir, en Jerusalén
(Cf. v. 2), mostrando que es «Dios-con-nosotros».
▬ Se podría decir que el Salmo 98 se realiza hoy en la Iglesia, sede de la presencia del
Dios santo y trascendente. El Señor no se ha retirado en el espacio inaccesible de su
misterio, indiferente a nuestra historia y a nuestras expectativas. «Viene a juzgar la tierra.
Juzgará el orbe con justicia y a los pueblos con equidad» (Salmo 97, 9).
▬ Dios se ha hecho presente entre nosotros sobretodo en su Hijo, hecho uno de nosotros
para infundir en nosotros su vida y santidad. Por este motivo, ahora no nos acercamos a
Dios con terror, sino con confianza.
El Señor reina, tiemblen las naciones;
sentado sobre querubines, vacile la tierra.
El Señor es grande en Sión,
encumbrado sobre todos los pueblos.
Reconozcan tu nombre, grande y terrible:
él es santo.
Reinas con poder y amas la justicia,
tú has establecido la rectitud;
tú administras la justicia y el derecho,
tú actúas en Jacob.
Ensalzad al Señor, Dios nuestro,
postraos ante el estrado de sus pies:
él es santo.
Moisés y a Aarón con sus sacerdotes,
Samuel con los que invocan su nombre,
invocaban al Señor, y él respondía.
Dios les hablaba desde la columna de nube;
oyeron sus mandatos y la ley que les dió.
Señor, Dios nuestro, tú les respondías,
tú eras para ellos un Dios de perdón,
y un Dios vengador de sus maldades.
Ensalzad al Señor, Dios nuestro,
postraos ante su monte santo:
santo es el Señor, nuestro Dios.
¡SANTO, SANTO, SANTO!
Comienzo la oración de rodillas. Me inclino hasta el suelo, cierro los ojos y adoro en
silencio la majestad de tu presencia infinita. Tú eres la santidad, Señor, y mis labios
están manchados con polvo de mentiras y aliento de orgullo. Quiero expresar con mi
gesto y mi silencio el sentido de adoración total que me llena cuando aparezco ante tu
santa presencia. Acepta el homenaje sincero de todo mi ser, Señor.
"El es santo».
Trato a diario contigo con amistad y familiaridad, y aprecio esos momentos y atesoro esa
intimidad. Pero nunca me olvido de que mi sitio está aquí abajo, en el barro de la tierra,
mientras que el tuyo está en los cielos. Conozco la distancia, y por eso precisamente
aprecio mucho más el que te me acerques y me trates como a un amigo. Me aprovecho
en pleno de tu oferta de amistad, y mi vida entera está llena de esos diálogos familiares
contigo, en plena libertad y confianza, que son testigos diarios de tu bondad y
generosidad.
Pero hoy quiero volver a mi puesto de ser creado, de ser finito y limitado ante tu
presencia infinita, y ofrecerte mi adoración silenciosa en la reverencia de mi cuerpo.
"Ensalzad al Señor, Dios nuestro, postraos ante el estrado de sus pies. El es santo».
Dios santo, cuyo Hijo se entregó a sí mismo, para que
también nosotros fuéramos santos ante ti, ayúdanos a
proclamar con nuestras obras tu grandeza y a vivir de tu
perdón, no manchando la santidad que nos has otorgado.
Te lo pedimos por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

Más contenido relacionado

La actualidad más candente (20)

Epifanía del Señor
Epifanía del SeñorEpifanía del Señor
Epifanía del Señor
 
Pange lingua
Pange linguaPange lingua
Pange lingua
 
Epifanía del Señor
Epifanía del SeñorEpifanía del Señor
Epifanía del Señor
 
Salmo 096
Salmo 096Salmo 096
Salmo 096
 
Pange lingua
Pange linguaPange lingua
Pange lingua
 
Salmo 086
Salmo 086Salmo 086
Salmo 086
 
Salmo 135
Salmo 135Salmo 135
Salmo 135
 
Salmo 28
Salmo 28Salmo 28
Salmo 28
 
Salmo 028
Salmo 028Salmo 028
Salmo 028
 
Salmo 121
Salmo 121Salmo 121
Salmo 121
 
Notas de Elena | Lección 12 | Jesús en Jerusalen | Escuela Sabática
Notas de Elena | Lección 12 | Jesús en Jerusalen | Escuela SabáticaNotas de Elena | Lección 12 | Jesús en Jerusalen | Escuela Sabática
Notas de Elena | Lección 12 | Jesús en Jerusalen | Escuela Sabática
 
2ºadviento blog
2ºadviento blog2ºadviento blog
2ºadviento blog
 
2ºadviento imprimir
2ºadviento imprimir2ºadviento imprimir
2ºadviento imprimir
 
Cuando el Cielo Toca la Tierra
Cuando el Cielo Toca la TierraCuando el Cielo Toca la Tierra
Cuando el Cielo Toca la Tierra
 
Salmo 086
Salmo 086Salmo 086
Salmo 086
 
Salmo 121
Salmo 121Salmo 121
Salmo 121
 
Salmo 092
Salmo 092Salmo 092
Salmo 092
 
Ascensión de Cristo - Estudio sobre la Ascensión de Cristo
Ascensión de Cristo - Estudio sobre la Ascensión de CristoAscensión de Cristo - Estudio sobre la Ascensión de Cristo
Ascensión de Cristo - Estudio sobre la Ascensión de Cristo
 
Salmo 147. Con ningún pueblo hizo cosa semejante
Salmo 147. Con ningún pueblo hizo cosa semejanteSalmo 147. Con ningún pueblo hizo cosa semejante
Salmo 147. Con ningún pueblo hizo cosa semejante
 
01 06-alabanzas-a-dios
01 06-alabanzas-a-dios01 06-alabanzas-a-dios
01 06-alabanzas-a-dios
 

Similar a Salmo 098 (20)

Salmo 101
Salmo 101Salmo 101
Salmo 101
 
Salmo 101
Salmo 101Salmo 101
Salmo 101
 
Salmo 101
Salmo 101Salmo 101
Salmo 101
 
Salmo101 091222030529-phpapp01
Salmo101 091222030529-phpapp01Salmo101 091222030529-phpapp01
Salmo101 091222030529-phpapp01
 
Salmo 096
Salmo 096Salmo 096
Salmo 096
 
Salmo 064
Salmo 064Salmo 064
Salmo 064
 
Salmo 064
Salmo 064Salmo 064
Salmo 064
 
Salmo 64
Salmo 64Salmo 64
Salmo 64
 
8 la experiencia del encuentro con jes s
8 la experiencia del encuentro con jes s8 la experiencia del encuentro con jes s
8 la experiencia del encuentro con jes s
 
Salmo 028
Salmo 028Salmo 028
Salmo 028
 
Salmo 096
Salmo 096Salmo 096
Salmo 096
 
2011 03-06 powerpointsef
2011 03-06 powerpointsef2011 03-06 powerpointsef
2011 03-06 powerpointsef
 
Salmo 064
Salmo 064Salmo 064
Salmo 064
 
DOMINGO 11º DEL TO. Ciclo B. Día 17 de junio del 2012
DOMINGO 11º DEL TO. Ciclo B. Día 17 de junio del 2012DOMINGO 11º DEL TO. Ciclo B. Día 17 de junio del 2012
DOMINGO 11º DEL TO. Ciclo B. Día 17 de junio del 2012
 
Salmo 086
Salmo 086Salmo 086
Salmo 086
 
Salmos
SalmosSalmos
Salmos
 
Salmo 2
Salmo 2Salmo 2
Salmo 2
 
Salmo 002
Salmo 002Salmo 002
Salmo 002
 
Presentación dgo 4° ord c1
Presentación dgo  4° ord c1Presentación dgo  4° ord c1
Presentación dgo 4° ord c1
 
La misericordia de dios en el magníficat
La misericordia de dios en el magníficatLa misericordia de dios en el magníficat
La misericordia de dios en el magníficat
 

Más de Securizame (20)

Salmo 138
Salmo 138Salmo 138
Salmo 138
 
Salmo 137
Salmo 137Salmo 137
Salmo 137
 
Salmo 136
Salmo 136Salmo 136
Salmo 136
 
Salmo 135
Salmo 135Salmo 135
Salmo 135
 
Salmo 133
Salmo 133Salmo 133
Salmo 133
 
Salmo 134
Salmo 134Salmo 134
Salmo 134
 
Salmo 131
Salmo 131Salmo 131
Salmo 131
 
Salmo 130
Salmo 130Salmo 130
Salmo 130
 
Salmo 129
Salmo 129Salmo 129
Salmo 129
 
Salmo 128
Salmo 128Salmo 128
Salmo 128
 
Salmo 127
Salmo 127Salmo 127
Salmo 127
 
Salmo 125
Salmo 125Salmo 125
Salmo 125
 
Salmo 126
Salmo 126Salmo 126
Salmo 126
 
Salmo 124
Salmo 124Salmo 124
Salmo 124
 
Salmo 122
Salmo 122Salmo 122
Salmo 122
 
Salmo 123
Salmo 123Salmo 123
Salmo 123
 
Salmo 120
Salmo 120Salmo 120
Salmo 120
 
Salmo 119
Salmo 119Salmo 119
Salmo 119
 
Salmo 118
Salmo 118Salmo 118
Salmo 118
 
Salmo 117
Salmo 117Salmo 117
Salmo 117
 

Salmo 098

  • 1.
  • 2.
  • 3. ● Este Salmo es un himno de alabanza al Señor, que estableció su trono en Sión para revelarse a Israel como Rey justo y poderoso (vs. 1-4). ● La benevolencia y la justicia con que el Señor gobierna a su Pueblo se manifiesta, de manera arquetípica, en las figuras de Moisés, Aarón y Samuel: ellos son, a un mismo tiempo, los mediadores de la Revelación divina y un ejemplo constante para los fieles (vs. 6-8). ● La triple aclamación al Dios “santo” (vs. 3, 5, 9) recuerda el canto de los Serafines de Is. 6. 3, y es un indicio del carácter marcadamente litúrgico del Salmo. ● Si bien este poema pertenece al grupo de “Himnos a la realeza del Señor” (Sal. 47; 93; 96 - 98), por su forma y su contenido difiere notablemente de los demás.
  • 4. ▬ «El Señor reina». Esta aclamación, inicio del Salmo 98 revela un tema fundamental y su género literario característico. Se trata de un canto del pueblo de Dios al Señor, que gobierna el mundo y la historia como soberano trascendente y supremo. ▬ De hecho, al comenzar el día, el fiel sabe que no está abandonado a la merced de la casualidad ciega y oscura, ni abocado a la incertidumbre de su libertad, ni dependiente de las decisiones de otro, ni dominado por las vicisitudes de la historia. Sabe que, por encima de toda realidad terrena, está el Creador y Salvador en su grandeza, santidad y misericordia. ▬ El salmo tiene el sabor de una alabanza contemplativa que se eleva hacia el Señor, sentado en su gloria celeste ante los pueblos y la tierra (Cf. versículo 1). Y, sin embargo, Dios se hace presente en un espacio y en medio de una comunidad, es decir, en Jerusalén (Cf. v. 2), mostrando que es «Dios-con-nosotros». ▬ Se podría decir que el Salmo 98 se realiza hoy en la Iglesia, sede de la presencia del Dios santo y trascendente. El Señor no se ha retirado en el espacio inaccesible de su misterio, indiferente a nuestra historia y a nuestras expectativas. «Viene a juzgar la tierra. Juzgará el orbe con justicia y a los pueblos con equidad» (Salmo 97, 9). ▬ Dios se ha hecho presente entre nosotros sobretodo en su Hijo, hecho uno de nosotros para infundir en nosotros su vida y santidad. Por este motivo, ahora no nos acercamos a Dios con terror, sino con confianza.
  • 5. El Señor reina, tiemblen las naciones; sentado sobre querubines, vacile la tierra.
  • 6. El Señor es grande en Sión, encumbrado sobre todos los pueblos. Reconozcan tu nombre, grande y terrible: él es santo.
  • 7. Reinas con poder y amas la justicia, tú has establecido la rectitud; tú administras la justicia y el derecho, tú actúas en Jacob.
  • 8. Ensalzad al Señor, Dios nuestro, postraos ante el estrado de sus pies: él es santo.
  • 9. Moisés y a Aarón con sus sacerdotes, Samuel con los que invocan su nombre, invocaban al Señor, y él respondía. Dios les hablaba desde la columna de nube; oyeron sus mandatos y la ley que les dió.
  • 10. Señor, Dios nuestro, tú les respondías, tú eras para ellos un Dios de perdón, y un Dios vengador de sus maldades.
  • 11. Ensalzad al Señor, Dios nuestro, postraos ante su monte santo: santo es el Señor, nuestro Dios.
  • 12. ¡SANTO, SANTO, SANTO! Comienzo la oración de rodillas. Me inclino hasta el suelo, cierro los ojos y adoro en silencio la majestad de tu presencia infinita. Tú eres la santidad, Señor, y mis labios están manchados con polvo de mentiras y aliento de orgullo. Quiero expresar con mi gesto y mi silencio el sentido de adoración total que me llena cuando aparezco ante tu santa presencia. Acepta el homenaje sincero de todo mi ser, Señor. "El es santo». Trato a diario contigo con amistad y familiaridad, y aprecio esos momentos y atesoro esa intimidad. Pero nunca me olvido de que mi sitio está aquí abajo, en el barro de la tierra, mientras que el tuyo está en los cielos. Conozco la distancia, y por eso precisamente aprecio mucho más el que te me acerques y me trates como a un amigo. Me aprovecho en pleno de tu oferta de amistad, y mi vida entera está llena de esos diálogos familiares contigo, en plena libertad y confianza, que son testigos diarios de tu bondad y generosidad. Pero hoy quiero volver a mi puesto de ser creado, de ser finito y limitado ante tu presencia infinita, y ofrecerte mi adoración silenciosa en la reverencia de mi cuerpo. "Ensalzad al Señor, Dios nuestro, postraos ante el estrado de sus pies. El es santo».
  • 13. Dios santo, cuyo Hijo se entregó a sí mismo, para que también nosotros fuéramos santos ante ti, ayúdanos a proclamar con nuestras obras tu grandeza y a vivir de tu perdón, no manchando la santidad que nos has otorgado. Te lo pedimos por Jesucristo nuestro Señor. Amén.