2. Cambios en la apariencia y
sensibilidad de tus senos
Los senos son los primeros
en dar señales físicas de los
cambios por venir. Desde el
inicio del embarazo notas
que en las areolas aparecen
pequeñas erupciones, se
ven como espinillas o
bolitas que no solían estar
allí. Los senos también se
vuelven más sensibles y
poco después empiezan a
agrandarse y a oscurecerse
las areolas.
3. Leve sangrado
Puedes tener un muy leve sangrado vaginal entre
siete y diez días después de la posible fecundación,
es decir, de cuando se tuvieron relaciones
sexuales. A diferencia del sangrado que se puede
tener al inicio del período menstrual, en este caso
se trata de unas cuantas gotitas de color rosado o
café claro que desaparecen en uno o dos días. El
sangrado se da por la implantación del óvulo
fecundado en el útero.
4. Sentido del olfato sensible
De repente se notan olores que antes pasaban
desapercibidos, o si aromas a las que se
estaba acostumbrada causan repulsión. Otros
sentidos experimentan cambios similares,
excepto la visión, que más bien puede
empeorar en el embarazo.
5. Aumento en la temperatura basal
Tu temperatura basal (al despertar) ronda los
36 grados centígrados. Cerca del momento de
la ovulación puede aumentar medio grado y
mantenerse allí hasta el inicio del próximo
ciclo menstrual. Sin embargo, si se mantiene
alta más de 18 días, esto puede ser señal de
un embarazo.
6. Cansancio
Desde la concepción, el
cuerpo se da a la tarea de
iniciar los cambios
necesarios para sostener
el embarazo. Además, las
hormonas del embarazo
hacen de las suyas, en
especial la progesterona y
la hormona
gonadotrofina coriónica.
7. Náuseas o achaques
Las náuseas en el embarazo suelen empezar
hacia el final del primer mes de embarazo,
pero algunas mujeres pueden sentir el
malestar desde el inicio.