El documento describe las contribuciones de varios conservacionistas mexicanos como Enrique Beltrán, Miguel Álvarez del Toro y Gertrude Duby Blom a la conservación de los recursos naturales y áreas silvestres de México en el siglo XX. Promovieron el uso sostenible de los recursos, la creación de parques nacionales y zoológicos para proteger especies en peligro de extinción, y educaron al público sobre la importancia de conservar los ecosistemas y la biodiversidad de México.