1. SistemasSalariales PerlaPaulinaRamírezCorral 24/11/2016
El Sistema Salarial es un tema delicado ya que involucra al gobierno, la inversión
privada, la fuerza laboral, y la política del país, un salario mínimo demasiado
elevado o demasiado bajo sólo generará ineficiencia, bajo crecimiento económico
y/o inflación y desempleo.
Es una cuestión de economía básica: las leyes de oferta y demanda no se
pueden derogar, por más que los políticos populistas nos quieran convencer de lo
contrario. Lo que hoy sucede en México es sólo una muestra de lo que puede
ocurrir cuando un gobierno trata de ir en contra de las fuerzas elementales del
mercado.
Como cualquier otro precio, el salario equilibra la oferta y la demanda de empleo y
desempleo, por lo que un salario distinto al equilibrio sólo creará desempleo o
escasez de mano de obra. Los salarios no se pueden fijar por decreto. Para un
político populista es muy fácil decir que el sueldo 'justo' debe ubicarse en 100, 300
o 400 pesos, pero no podemos evadir o invalidar las leyes de oferta y demanda.
Como nos recuerda Murray N. Rothbard, “en realidad, sólo hay una forma de
pensar en el salario mínimo: es desempleo obligatorio. La ley dice: es ilegal para
cualquier empresario el contratar a alguien por menos de X pesos por día o por
hora. Esto implica que un número importante de contratos laborales, libres y
voluntarios, o subcontratados, serián arbitrariamente declarados ilegales y que por
lo tanto, el desempleo aumentará. Consideremos que la Ley de Salarios Mínimos
no ofrece fuentes de empleo, sólo las declara ilegales y el ‘empleo ilegal’ es el
resultado inevitable”. Después de todo, si el salario mínimo es tan efectivo para
acabar con la pobreza, ¿por qué dejarlo en 73.04 pesos?
¿Por qué no subirlo a 80, 170, 200, 300 o 400 pesos?
Si un empleado aspira a ganar más de 100 pesos por día o por hora, tendrá que
capacitarse, estudiar y obtener experiencia para elevar su capital humano. Si esta
persona estudiara ingeniería en cualquiera de sus ramas, un salario mínimo en
100 pesos le resultará irrelevante, porque probablemente el valor de su trabajo en
el mercado será mucho mayor. Esto nos demuestra la importancia de la
educación.
De manera aleatoria, la inversión en maquinaria e infraestructura hará que se
produzcan más artículos por hora, que el empresario obtenga más valor por cada
persona empleada al incrementar su productividad, y que el salario aumente de
manera natural. Si el gobierno realmente busca una mayor prosperidad debe
entonces crear las condiciones propicias para que el empresario invierta y para
que la gente incremente su capital humano y no solo darles trabajos con bajos
sueldos y compensaciones.
2. SistemasSalariales PerlaPaulinaRamírezCorral 24/11/2016
Entre las condiciones necesarias para que el empresario invierta encontramos: el
imperio de la ley, que las leyes justas y fáciles de cumplir, una mínima intervención
del gobierno en la economía y derechos de propiedad claros y firmes. Es decir,
que la regulación sea razonable, transparente y que el empresario no sienta la
amenaza de una expropiación de su planta productiva. Para que el empresario
asuma 'riesgos no asegurables' requiere de un cierto optimismo que es necesario
para enfrentar un entorno frágil ya que el gobierno busca explotar no solo la clase
trabajadora, al unísono busca sacar su mayor provecho de los inversionistas.
Otra forma de verlo es que, mientras un trabajador va incrementando su capital
humano, asciende por una imaginaria 'escalera de salarios'. Fijar un salario
mínimo es equivalente a romper con un mazo los primeros peldaños en esta
escalera de oportunidad; es algo totalmente injusto para aquellos con poco capital
humano, que no pudieron terminar sus estudios básicos por cualquier razón, y que
de haber existido estos peldaños tendrían la oportunidad de ascender
gradualmente, a lo largo de su vida, por esta escalera imaginaria.
Lo que debemos fomentar para impulsar los ingresos de las familias de manera
permanente es la inversión productiva, la educación y la creación de
infraestructura. La política de un 'salario mínimo', como muchas otras que
impulsan los políticos populistas, es sólo una simulación que afecta terriblemente y
de por vida a la gente en la base de la pirámide. Al instrumentar políticas públicas,
debemos entender bien la dinámica, el entorno económico y pensar que la
'solución' puede resultar peor que la supuesta enfermedad.