2. Cristología.
Una naturaleza ... Una Persona ...
... tres Personas. ... dos naturalezas.
Naturaleza
Divina
Padre Hijo Espíritu
Santo
Naturaleza
Humana
Todo lo
necesario
“Cuando vino el para ejecutar
la obra. ... nacido de mujer
cumplimiento del
y nacido bajo la
tiempo, Dios envió
ley”.
a Su Hijo, ...
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3. Una Persona Divino-Humana.
Emanuel
Dios con los hombres
Jesús es Dios manifestado en carne (Jn.1:1, 14; 1ª Jn.1:1; Ap.19:13)
Su naturaleza humana, no puede separarse jamás de su Persona
Divina, por lo que Jesús es Emanuel: Dios con nosotros (Sal.33:6;
107:20)
Jesús es Dios, encontrándose con Su creación (Ga.4:4)
El Dios eterno se hace hombre en unión con los hombres para poder morir
por ellos en una cruz (Ef.2:16)
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4. Jesucristo poseía todos los atributos
Divinos.
Cristo es: Texto bíblico.
Omnisciente. “Así como el Padre me conoce, y Yo conozco al Padre”
(Jn.10:15)
Omnipresente. “Allí estoy Yo en medio de ellos” (Mt.18:20); “Yo estoy
con vosotros todos los días” (Mt.28:20)
Adorable. “Creo, Señor; y le adoro” (Jn.9:38)
Omnipotencia. “Quiero; se limpio. Y al instante su lepra desapareció”
(Mt.8:3)
Eternidad. “Antes de que Abraham fuese yo soy” (Jn.8:58)
Verdad absoluta. “Yo soy el camino, la verdad y la vida” (Jn.14:6)
Inmutable. “Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos”
(He.13:8)
Tiene vida en si “En Él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres”
mismo. (Jn.1:3)
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5. A Cristo se le atribuyen actividades
Divinas
Cristo actua: Texto bíblico.
Juzgar a los “Nunca os conocí; apartaos de mi, hacedores de maldad”
hombres (Mt.7:23)
Autoridad suprema. “Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra”
(Mt.28:18)
Conservador de lo “Quien sustenta todas las cosas con la palabra de Su
creado. poder” (He.1:3)
Creador del “Todas las cosas por Él fueron hechas, y sin Él nada de
universo. lo que ha sido hecho, fue hecho” (Jn.1:3)
Salvador. “Y en ningún otro hay salvación” (Hch.4:12)
Perdona pecados, “Que se predicase en Su nombre el arrepentimiento y
cualidad Divina. perdón de pecados en todas las naciones” (Lc.24:47)
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6. “Semejante a los hombres” (Fil.2:7b)
Jesucristo era como los hombres en cuanto a Su
naturaleza humana:
Cuerpo humano (Mr.14:8; Ga.4:4)
Alma humana (Mt.26:38)
Espíritu humano (Lc.23:46; Jn.11:33)
Nació (Lc.2:7) y creció (Lc.2:52)
Tuvo una familia humana (Mt.13:56) y trabajó (Mr.6:3)
Tuvo hambre, sueño, sed y cansancio (Mt.4:2; Mr.4:38;
Jn.4:6-7)
Lloró (Jn.11:35)
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7. “Semejante a los hombres” (Fil.2:7b)
Pero esa naturaleza humana, desde el mismo momento
de su concepción, es formada en la Persona Divina del
Hijo de Dios.
No había pecado en la humanidad de Jesús (2ª Co.5:21)
Su relación única, como Hijo amado, con el Padre
(Jn.20:17b)
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8. Nombres Divinos de Jesucristo
Nombres: Texto bíblico.
“De los cuales, según la carne, vino Cristo, el cual es Dios
sobre todas las cosas, bendito por los siglos” (Ro.9:5)
Dios. “Aguardando la esperanza bienaventurada y la
manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador
Jesucristo” (Tit.2:13)
Hijo de Dios. “Tu eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente” (Mt.16:16)
El Señor. “Dijo el Señor a mi Señor: Siéntate a mi derecha”
(Mt.22:44)
Rey de reyes y “Y en Su vestidura y en Su muslo tiene escrito este
Señor de señores. nombre: REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES”
(Ap.19:16)
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9. Igualdad con las otras Personas Divinas.
Igualdad: Texto bíblico.
“El Padre y Yo uno somos” (Jn.10:30)
Con el Padre. “El que me ama, Mi palabra guardara; y Mi Padre le
amará, y vendremos a él, y haremos morada con él”
(Jn.14:23)
“Por tanto, íd y haced discípulos a todas las naciones,
Con el Padre y el bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo y del
Espíritu. Espíritu Santo” (Mt.28:19)
“La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios, y la
comunión del Espíritu Santo sean con todos vosotros.
Amen” (2ª Co.13:14)
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10. Oficios de Jesús.
Oficio Oficio
Real Profético
Objetivo
Salvador
Oficio
Sacerdotal
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11. Aplicación personal.
Jesús es el ejemplo supremo para el cristiano.
La vida cristiana se lleva a cabo: “con los ojos puestos en Jesús”
(He.12:2)
La encarnación del Verbo de Dios es un acto de amor infinito de
parte de Dios (Jn.3:16) Esto debe despertar en cada uno de los
creyentes entrega incondicional por gratitud y amor:
Primeramente a Dios (Ro.12:1)
Después a los hermanos (1ª Jn.3:16)
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Notas del editor
Como veiamos el domingo pasado hay un único Dios que subsiste en tres Personas Divinas. Cada una de ellas es Dios, compartiendo la misma naturaleza y esencia, la misma gloria y atributos divinos. En un momento dado de la historia el Padre envía al Hijo en misión salvadora: “ Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo, nacido de mujer y nacido bajo la ley, para que redimiese a los que estaban bajo la ley, a fin de que recibiésemos la adopción de hijos” (Ga.4:4) Un plan trazado en la eternidad: “Entonces dije: He aquí que vengo, oh Dios, para hacer tu voluntad, como en el rollo del libro está escrito de mi” (He.10:7); cumplido en el momento designado por Dios. El enviado es el Hijo, la segunda Persona de la deidad, que asume una naturaleza humana, totalmente dependiente de la Persona Divina del Hijo de Dios. El propósito del plan es claro: salvar al pecador y elevarle a la posición de hijo de Dios. Así que el Verbo hace sitio en su ser divino y asume una naturaleza humana, dependiente en todo de la naturaleza divina. No hay desvinculación de ningún tipo de la segunda Persona de la Deidad del Ser Divino.
Jesús es Emanuel, Dios con nosotros, pero es mas, es Dios-hombre. Jesús no es solamente un hombre vinculado con la deidad de forma suprema, es Dios manifestado en carne. Su Persona Divina, no puede separarse jamás de su naturaleza humana, por lo que Jesús es Emanuel: Dios con nosotros. La naturaleza Divina le corresponde eternamente como Dios; la naturaleza humana asumida en el tiempo histórico de los hombres porque es también hombre. Jesús es sin duda un hombre de la historia y del tiempo, pero no es menos verdad que se trata de Dios que irrumpe y se introduce en la temporalidad desde Su eternidad. Jesús es Dios saliéndose de si mismo y encontrándose con su creación y, todavía mas, con su criaturas que, desorientadas por el pecado, rebeldes por su condición, no lo aprecian como Creador, sino que lo repudian como luz. Dios, en Cristo, irrumpe en la historia de los hombres temporales y mortales para elevarlos a la máxima dimensión jamás imaginada, al hacerlos inmortales por comunicación de la vida eterna. El Logos , que estaba junto al Padre, el eterno, ha nacido, padecido y muerto como hombre.
La deidad del Hijo esta atestiguada en diversos pasajes: Jn.1:1; 1:18; 20:28; Ro.9:5; Fil.2:6; Tit.2:13; He.1:8; 1 Jn.5:20.
La deidad del Hijo esta atestiguada en diversos pasajes: Jn.1:1; 1:18; 20:28; Ro.9:5; Fil.2:6; Tit.2:13; He.1:8; 1 Jn.5:20.
“ Esta ha hecho lo que podía,; porque se ha anticipado a ungir mi cuerpo para la sepultura” (Mr.14:8); “Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a Su Hijo, nacido de mujer y nacido bajo la ley” (Ga.4:4) “ Entonces Jesús les dijo: Mi alma está muy triste, hasta la muerte; quedaos aquí y velad conmigo” (Mt.26:28) “ Entonces Jesús, clamando a gran voz, dijo: Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu. Y habiendo dicho esto, expiro” (Lc.23:46); “Jesús entonces, al verla llorando, y a los judíos que la acompañaban, también llorando, se estremeció en espíritu y se conmovió” (Jn.11:33) “ Y dio a luz a su hijo primogénito, y lo envolvió en pañales, y lo acostó en un pesebre” (Lc.2:7); “Y Jesús crecía en sabiduría y en estatura, y en gracia para con Dios y los hombres” (Lc.2:52) “ ¿No están todos sus hermanos con nosotros?” (Mt.13:56); “¿No es este el carpintero, hijo de Maria, hermano de Jacobo, de José de Judas y de Simón?” (Mr.6:3) “ Y después de haber ayunado cuarenta dias y cuarenta noches, tuvo hambre” (Mt.4:2); “Y Él estaba en la popa, durmiendo sobre un cabezal; y le despertaron” (Mr.4:38); “Y estaba allí el pozo de Jacob. Entonces Jesús, cansado del camino se sentó así junto al pozo. Era como la hora sexta. Vino una mujer de samaria a sacar agua; y Jesús le dijo: Dame de beber” (Jn.4:6-7). “ Jesús lloro” (Jn.11:35)
Esa naturaleza humana es puesta en unión y total dependencia con la Persona Divina del Hijo de Dios. Esta naturaleza humana depende íntimamente de su naturaleza Divina. “ Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en Él” (2ª Co.5:21) “ Subo a mi Padre y a vuestro Padre, a mi Dios y a vuestro Dios” (Jn.20:17b)
La deidad del Hijo esta atestiguada en diversos pasajes: Jn.1:1; 1:18; 20:28; Ro.9:5; Fil.2:6; Tit.2:13; He.1:8; 1 Jn.5:20.
Tres oficios llevados a cabo: Oficio Real: habló de la aproximación a los hombres del reino de los cielos: “Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado. Pues este es aquel de quien hablo el profeta Isaias, cuando dijo: Voz del que clama en el desierto; preparad el camino del Señor, enderezad sus sendas” (Mt.3:2-3) Oficio Sacerdotal: Jesús vino con el propósito de ofrecer Su vida en sacrificio expiatorio por el pecado del mundo: “Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas. Así como el Padre me conoce, y yo conozco al Padre; y pongo mi vida por las ovejas. Por eso me ama el Padre, porque yo pongo mi vida, para volverla a tomar. Nadie me la quita, sino que yo de mi mismo la pongo. Tengo poder para ponerla, y tengo poder para volverla a tomar. Este mandamiento recibí de mi Padre” (Jn.10:11, 15, 17, 18) Oficio Profético: Jesús vino para ser revelador supremo del Padre: “A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, Él le ha dado a conocer” (Jn.1:18) Un propósito Soteriológico: La salvación de todo hombre
“ Puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de Él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sento a la diestra del trono de Dios” (He.12:2) “ Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a Su Hijo Unigénito, para que todo aquel que en Él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna” (Jn.3:16) “ Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional” (Ro.12:1) “ En esto hemos conocido el amor, en que Él puso su vida por nosotros; también nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos” (1ª Jn.3:16)