hace referencia a aquellas personas que sufren un trastorno
adictivo con el juego.
La ludopatía se define como una alteración de forma progresiva
en el comportamiento de un individuo por una incontrolable
necesidad de jugar y apostar, presentando menos importancia a
su entorno y las consecuencias negativas que pueden sufrir;
En pocas palabras podríamos definir el juego compulsivo como
una alteración del comportamiento que consiste en perder el
control de nuestros impulsos ante el juego o, de forma más
sencilla, es un trastorno por el que nos volvemos adictos al juego.
Principalmente la persona empieza jugando como si fuera una
situación social ya sea una festejación como un aniversario,
cumpleaños etc. Igualmente, es fácil que quienes a menudo entran
en contacto, en los bares, con las tragamonedas, se puedan iniciar
solos en la dinámica de juego, ver como otros sacan el premio,
intentar distraerse si están aburridos o haciendo tiempo para
hacer otras actividades, sobretodo porque no interpretan que lo
que hacen es tan peligroso.
Trastornos del estado de ánimo como la depresión.
Trastornos de la personalidad donde controlar los
impulsos derivan en una adicción.
Personas con un nivel alto de ansiedad en las que el
juego les tranquiliza.
El no saber manejar la plata y no tener conciencia de
esta los puede llevar a la ruina.
La persona ludópata empezara a sentirse muy
preocupado por el juego necesitando cada vez mas el
aumento de las magnitud o la frecuencia con la que
realice las apuestas además muchas veces se sentirá
avergonzada y tratara de evitar que otras personas se
enteren de su problema Cuando la persona ha terminado
su dinero recurre a pedir diferentes préstamos a sus
amigos y cuando se le es negado recurre a tomar objetos
preciados de su casa para venderlos o cambiarlos por
dinero.
En su trabajo las personas tienden a entrar a
diferentes paginas de casino para poder jugar
iniciando partidas en juegos y se disgustan si son
interrumpidos en la mitad del juego. Por lo general
juegan todos los días y por largo tiempo
para olvidarse de los problemas que tienen. Como
consecuencia pueden perder su trabajo o grandes
oportunidades en su vida.
Se vale de diferentes patrañas para poder jugar
como: robar, engañar, falsificar papeles y demás.
Fase de ganancia: El jugador inicia
invirtiendo pequeñas cantidades en el juego y
consigue ganar algunos premios, e incluso en
algunos casos éstos premios pueden llegar a ser
significativos en relación al dinero invertido en
la apuesta; se comienzan a generar fuertes
esperanzas irracionales de obtener mayores
ganancias.
Fase de Perdida: En esta fase el jugador utiliza el
propio juego para recuperar las pérdidas ocasionadas por
su propio juego. Para seguir jugando recurrirá a pedir
dinero a las personas cercanas a su entorno, a solicitar
préstamos en los bancos, manejo de tarjetas de crédito,
empeño de joyas, etc. que piensa podrán ser devueltos
con las ganancias obtenidas en el juego.
Empiezan a aparecer los problemas familiares y laborales
que guardan relación con el juego y las deudas
acumuladas por el jugador son bastante mayores, lo que
le obligan a confesar su adicción.
Fases de Desesperación: El jugador incrementa su
actividad de juego, convirtiéndose este en su máxima
necesidad y preocupación. Asimismo, siguen en
aumento la cantidad de tiempo y dinero dedicados al
juego, aumentando también las deudas. Muestra
nerviosismo e irritabilidad, trastornos de sueño, de
alimentación, depresión, ansiedad, entre otros,
apareciendo ideas de suicidio e incluso en algunos
casos se producen intentos suicidas.
Fase de Abandono: Le parece imposible dejar de
jugar y se convence de que es inútil hacer nada para
intentar dejar de jugar.
La mejor forma de prevenir la ludopatía es
“contando contigo mismo” para afrontar el
malestar. Muchas personas se inician en el juego
patológico para superar situaciones
emocionalmente negativas ante las que no
disponen otro recurso de afrontamiento.
Para los padres de familia prevengan que sus
hijos no caigan en la ludopatía se puede emplear
lo siguiente:
No deje a sus hijos sin supervisión cerca del
ordenador cuando utilice nuestra página.
Proteja sus programas de juegos con contraseña.
No permita que personas menores de 18 años
participen en ninguna actividad de juego.
Eduque a sus hijos acerca de la legalidad y del daño
potencial del juego en el caso de menores de edad.
Limite la duración de tiempo que sus hijos pasan
conectados.
No llevar en el bolsillo más dinero del estrictamente necesario, y a
ser posible evitarlas monedas "propicias".
no acudir, por el hecho de "ir", a establecimientos donde exista la
posibilidad de jugar, evitando no solo la participación en el juego de
azar, sino también su "contemplación" en los demás.
No tomar bebidas alcohólicas ni drogas de ningún tipo, aparte de
la medicación prescrita por el médico, y reducir el consumo de
excitantes (café) y de tabaco.
No permanecer ocioso o inactivo por mucho tiempo, debiendo
ocuparse en actividades que redunden en beneficio propio y/o de los
demás y en el caso de disponer tiempo "muerto", recurrir a prácticas
físicas o deportes, entre otros.
No permanecer solitario. Comunicarse y dialogar con los compañeros o
con la familia.
Vaciarse de forma sincera, de sus secretos del pasado respecto a posibles
deudas o pérdidas, para evitar tener que recurrir a una información
escalonada que podría comprometer seriamente la credibilidad ante los
demás.
Acudir sistemáticamente a las terapias de grupo, y participar en ellas con
la máxima sinceridad, confidencialidad y respeto; realizar las tareas que el
terapeuta marque en le proceso de tratamiento.
Ofrecer reparación efectiva de los daños causados en el pasado a cuantas
personas hayan resultado agraviadas por el juego de azar, así como
también ayudar a cualquier persona al que se conozca en dificultades. La
ayuda a los demás en este terreno es la mejor ayuda a si mismo.
Cambiar la mentalidad respecto al dinero.
La ludopatía es un trastorno que nos hace adictivos a los
juegos de azar generando que en ocasiones se debiliten los
lazos familiares, laborales y sociales.
Como toda adicción, tiene sus etapas y en estas el ludópata
ira aumentando su nivel de atracción por los juegos de azar,
así como aumentara sus niveles de apuestas que trae como
consecuencia una alza en el nivel de perdidas.
Así pues, se debe tener moderación al momento de jugar
presencial y virtualmente.