Ayabaca, tierra de religiosidad y devoción al Señor Cautivo
1. AYABACA TIERRA DE RELIGIOSIDAD
La Provincia peruana de Ayabaca es una de las 8 provincias que integran el
Departamento de Piura, perteneciente a la Región Piura.
Limita al norte y al este con la República del Ecuador; al sur con las provincias de
Morropón y Huancabamba; y, al oeste con las provincias de Piura y Sullana.
Historia
Ayabaca, o Ayavaca, se ubica, junto con la provincia de Huancabamba, sobre la cadena
occidental de los Andes. Su ciudad capital, Ayavaca, es la más alta del departamento de
Piura.
El nombre Ayabaca, también escrito como Ayavaca, proviene del quechua, derivándose
de dos raíces: aya, que se relaciona con la muerte, pero también con la inmortalidad; y
huaca, que designa a los santuarios y lugares sagrados. En algunas monografías locales
se ha limitado este sentido al de "sepultura o tumba antigua de muertos", vinculando el
nombre al hallazgo de osamentas humanas y restos de armas primitivas cerca de la zona
donde los españoles reunieron a la población nativa (en el "Pueblo de Indios de Nuestra
Señora del Pilar de Ayavaca" o "Ayavaca Vieja"), bajo la suposición de que esos serían
los restos de huestes caídas en feroces combates como respuesta a la actitud
expansionista de los Incas.
Para una comprensión más amplia de la posible etimología de AYA HUACA o AYA
WAKA, hay que considerar que en quechua, AYA es difunto y ancestro, no sólo en el
sentido físico del cadáver o la osamenta, sino también en el sentido simbólico y
trascendente del alma que abandona el cuerpo, temporalmente durante el sueño y
definitivamente al término de la vida, pero que vuelve a circular en los procesos vitales,
como en los ciclos del agua, la luz y las estaciones que se mueven junto con la tierra.
AYA es otro nombre del espíritu o la energía universal de la Pachamama. Por eso, la
palabra quechua AYA también designa el color rojo pálido o amarillento del amanecer
y del crepúsculo y la palidez de los recién nacidos y los moribundos, mientras que
HUACA es el nombre de respeto que reciben los lugares y las cosas sagradas.
En ese sentido, el antiguo santuario de AYAHUACA o AYAWAKA, ubicado en el
extremo occidental de la cordillera de los Andes, en los últimos parajes cordilleranos
donde se oculta o “muere” el sol, y al mismo tiempo, en la zona geográfica donde nacen
todos los ríos y fuentes de agua de la región, vendría a ser la Morada de los Ancestros o
el Santuario de la Muerte, pero también de la Inmortalidad, del cambio y transformación
de la vida.
2. Señor Cautivode Ayabaca
Ayabaca, es una pintoresca ciudad, ubicada en las serranías piuranas a 2,815 m.s.n.m., y
dentro de su bello paisaje andino, de clima saludable, también se respira en el ambiente
una gran devoción religiosa por su santo patrono el Señor Cautivo, por quien su
festividad atrae gran cantidad de fieles, quienes llegan en peregrinación desde diferentes
zonas norteñas del Perú e incluso del país vecino, Ecuador.
Según la historia, el año 1751, el sacerdote español, García Guerrero quiso dar a su
pueblo una imagen del Señor; para lo cual se decidió utilizar un tronco, del que había
brotadosangre luego que un labrador le diera un hachazo. Era de un árbol de cedro,
encontrado en el cerro Zahumerio de Jililí.
Se dice, que los escultores que aceptaron realizar el tallado de dicha imagen, pusieron
como condición que no se viera ninguna parte del proceso, hasta la obra estuviese
terminada y que sólo aceptarían recibir sus alimentos, una vez al día, al amanecer,
pasado a través de la puerta y dejado allí.
Luego de cierto tiempo, los vecinos del lugar, sintiéndose intrigados por saber qué
estaba sucediendo con los escultores y especialmente con la obra que se les había
encomendado; decidieron ir a la casa, llamaron a la puerta y al no obtener respuesta,
ingresaron y se encontraron con la gran sorpresa de ver que los escultores no se
encontraban por ningún lado; que la comida que se les había estado dejando, estaba
intacta y que éstos habían dejado una hermosa escultura de Jesús, con las manos
cruzadas.
La leyenda creció, al igual que la fe y devoción, más aun si consideraban todo ello, una
"obra de ángles"; como la llamaron. En su creencia, creyeron entender que fueron
ángeles disfrazados de artesanos errantes, quienes providencialmente fueron
encontrados por los ayabaquinos.
El año de 1904, un sacerdote de apellido Velásquez, inauguró el templo, el que fue
refaccionado en 1974; cuando se reconstruyó la fachada y se agregaron dos escalinatas
para facilitar la venereación de la imagen.
En el día central de la festividad, se lleva en procesión por las calles del pueblo, la bella
imagen de un metro ochenta de estatura, con las manos cruzadas; que lleva una corona
de oro sobre su cabeza y va vestido con un hábito morado, bordado con hilos de oro.
Las calles de dicho recorrido, son previamente alfombradas con flores.
3. Los fieles tienen una gran devoción por los milagros que dicen haber recibido de la
imagen.
Las Imágenes que rodean el interior el Santuario
Existen muchas imágenes de santos conocidos que rodean el interior de la iglesia, pero
entre las que destacan tenemos: en primer lugar “El Cuadro de las Animas” en donde se
encuentra dibujado el cielo, el purgatorio y el paraíso representado por ángeles,
personas sufriendo y demonios, el otro que destaca es el altar “Jesús Crucificado” en
donde se ha tallado a Jesús crucificado y a sus pies se encuentran llorando María
Magdalena y María la madre de Jesús, todas las estatuas talladas en caoba.
Exterior del Santuario
Se encuentra rodeado por unas rejas de metal para mayor seguridad por su entrada
secundaria hay una pileta que embellece la vista por las noches con sus luces que se
reflejan en el agua.
La Hermandad
La hermandad “Señor Cautivo de Ayabaca” se encarga de movilizar la imagen y son los
únicos autorizados para esta actividad pues, ninguna otra persona ajena a la hermandad
puede cambiar, bajar o sacar del templo en procesión a la imagen. La conforman
habitantes de la ciudad quienes se preparan y reciben charlas para realizar su trabajo.