Los videojuegos de Rock Band y Guitar Hero ofrecen la ventaja de que los jugadores pueden experimentar tocar instrumentos musicales de una manera divertida y acercarse al género del rock, además de desarrollar habilidades motoras. Sin embargo, estos juegos también tienen las desventajas de que solo proporcionan conocimientos muy generales sobre la música que no son aplicables en el mundo real, su simulación de los instrumentos no es completamente realista y requieren una inversión económica considerable.