Nota color sobre la visita del Sociólogo Derrik de Kerkhove a la Facultad de Ciencias Sociales, Universidad Nacional de San Juan, en el marco de las Jornadas Argentino Canadienses del año 2010. Trabajo realizado para la Cátedra Taller de Producción Gráfica I de la TUPE. EQUIPO DE CATEDRA: CELINA ROMERO, MABEL CELANI, GUSTAVO REY. Derrick de Kerckhove (Wanze, 30 mayo 1944) es un sociólogo belga nacionalizado canadiense. Es el Director del Programa McLuhan en Cultura y Tecnologia, autor de La piel de la Cultura y de la Inteligencia Conectada (“The Skin of Culture and Connected Intelligence”), y profesor universitario del Departamento de lengua francesa de la Universidad de Toronto. Actualmente es profesor de la Facultad de Sociologia de la Universidad de Estudios de Nápoles Federico II.

1. DERRIK DE KERCKHOVE
"La Cultura Digital es la fase cognitiva de la electricidad”
FUE SOLO UNA DE LAS COSMOVISIONES DEL FILOSOFO BELGA, NACIONALIZADO
CANADIENCE, EXPUESTAS DURANTE LAS JORNADAS ARGENTINO- CANADIENCES
DESARROLLADAS EN LA FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES A FINES DE OCTUBRE PASADO.
C on un maletín de cuero marrón en su mano derecha, estiloso y original, expresando
cierto sosiego y placidez, se advertía el kinésico gurú comunicacional en el salón de
actos, el recinto estructural que extendió la temperatura corporal de un grupo
social heterogéneo que se dio cita aquella noche de viernes. Un saco oscuro, una camisa
blanca, un pantalón de vestir marrón, unos zapatos negros, una corbata con detalles
primaverales y una bufanda rojo pasión colgando de su cuello, se presentaban como la
extensión de la piel, desde un punto de vista macluheano, del sociólogo belga Derrick de
Kerckhove, nacionalizado canadiense. De esta manera, se hacía presente el bien
denominado discípulo del excepcional visionario Marshall McLuhan en la Facultad de
Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de San Juan, en el marco de las jornadas
Argentino Canadienses de Políticas Regionales. Éstas últimas, se llevaron a cabo el pasado
viernes 29 y sábado 30 de octubre del 2010. El broche de oro del primer día de
conferencias estaría a cargo del científico canadiense, quien, como consecuencia, brindó
una breve pero contundente conferencia que, en primera instancia, estaba programada a
las 20:30.
Las agujas del reloj indicaban que sólo 15 minutos faltaban para las 21 cuando una voz
grandilocuente y grave hizo trepidar los parlantes electrónicos colgados en los laterales de
aquél salón rectangular, de techo blanco, paredes revestidas en machimbre y una
alfombra marrón claro que abarca todo su suelo. De ésta manera el moderador a cargo,
sentado tras un escritorio sobre el escenario que se encontraba en un extremo del salón,
presentaba por el microfóno al doctor en filosofía creador de “The Skin of Culture and
Connected Intelligence” (La piel de la Cultura y de la Inteligencia). Luego del protocolo,
Derrick, quien además ha trabajado con Marshall McLuhan durantes otros 10 años como
traductor, asistente y coautor, se hizo cargo del discurso con un micrófono inalámbrico.
Erguido y con espontaneidad, el científico de fuertes rasgos nórdicos, test nívea, ojos
azules y pelo cano, ubicado al lado del presentador y de una mujer que actuaría de
traductora, comenzó con su exponencia.
Tras dejar un saludo cordial, en español y con acento anglosajón, dirigido a las
autoridades y a la audiencia presente, que observaban atentos sentados en las sillas
rojizas frente al escenario, Kerckhove presentó en inglés y en forma de introducción su
Teoría de la Inteligencia Conectiva. A partir de ello se produjo uno de los primeros
momentos incongruentes, en cuanto a conectividad refiere, en lo que sería la totalidad de
la conferencia del canadiense. De los tres micrófonos existentes, solo uno funcionaba
correctamente. Por lo tanto, se producía un ruido en el flujo comunicacional al retardarse

2. notablemente lo que intentaba explicar el científico, por el hecho de tener que prestarse
el micrófono continuamente con su traductora, demorando notablemente la continuidad
discursiva. Como consecuencia se percibió cierto reconcomio en el público, compuesto de
alrededor de 80 personas, entre autoridades, docentes, estudiantes, expositores,
asistentes etc. El científico, por tal motivo, no hizo caso omiso a tal eventualidad; en forma
denodada y animosa comenzó a enunciar su exponencia en idioma español. De todos
modos, se percibió una baja consolidación del lenguaje hispano por parte del
comunicólogo, aunque aquello generó un efecto retroactivo al producirse un continuo
feed-back por parte del público. Aquél le ayudo a concluir sus ideas cuando él
pronunciaba uniones fonémicas que, si bien se entendía el sentido, no resultaban ser las
correctas en cuanto a cuanto género, número, persona, caso modo o tempo. Por tal
motivo, se pudo percibir un fructuoso flujo comunicacional interpersonal cada vez que
los receptores completaban unívocamente las frases del expositor. Aquella peripecia, no
sólo produjo mayor dinámica, sino que el clima en el salón se tornó aún más ameno y
apacible.
Durante su exposición, habló de temas como la semiótica y el postestructuralismo, de
como la cultura digital es la fase cognitiva de la electricidad donde el lenguaje se relaciona
con la tecnología. Donde esta última, a su vez, codifica, clasifica, transporta y modifica al
lenguaje. Tal modificación, también repercute en simultaneidad al emisor, al receptor, y a
los usuarios del lenguaje. “El lenguaje mantiene una estrecha dinámica con nuestra
mente. Todas las tecnologías que afectan al lenguaje afectan también a las estrategias que
utilizamos para organizar el tiempo, el espacio y nuestro propio ser” explicaba el filósofo.
Luego de 20 minutos, el doctor, atendiendo al dinamismo de su conferencia, comenzó a
exponer, por medio de una computadora y a través de un cañón de video, una serie de
láminas explicativas que se refractaban brillantes en una pantalla, tras el escenario. Las
mismas representaban imágenes con modelos que Derrick argumentaba, en simultáneo,
su contenido. Fue así como habló de la evolución de la inteligencia desde lo oral hasta la
edad electrónica, de la tecnología táctil, del sexto sentido desde la inmersión en la
omnipresencia y del arte electrónica. En el transcurso de esta parte de su conferencia
surgió otra eventualidad cuando a la computadora que utilizaba para mostrar las
imágenes se le cayó la conexión Wi-fi a Internet. Lo que se apreció bastante controversial,
por no decir humorístico, al tratarse de la exposición de quien nos describe el sistema
eléctrico, como extensión de nuestras capacidades, y su impacto en la sociedad. De todas
maneras, el inconveniente fue solucionado rápidamente para que Kerckhove pueda
concluir, con éxito, su imponente conferencia.
Al término de la exposición varios integrantes del público se aproximaron a
congratularlo y dar el parabién. Por un lado, algunas autoridades, asistentes y directivos
osaron en tomarse fotografías con el científico, para lo que él respondió muy
amablemente. También Derrick, con un teléfono celular, se fotografió con quienes se
acercaban, en tanto que intercambiaban algunas palabras y direcciones de e-mail. Por
otro lado, muchos de los presentes se fueron retirando paulatinamente, generando un

3. decrescendo en la intensidad de las relaciones en el salón de actos. La multitud se
dispersó repentinamente y Kerckhove se retiro del recinto caminando rodeado de colegas,
en el medio de la fosca y seductora noche, hacia el estacionamiento donde lo esperaba un
automóvil, la extensión del pie que lo llevaría a su próximo destino.