1. La instalacion del equipo de radio
En esta guia vamos a aprender a instalar el sistema de radio en un avion, ya sea armado
artesananlmente o un ARTF (listo para volar)
La instalación de la radio y sus elementos de control es una tarea que debe de comenzar en el mismo
momento que se aborda la construcción del modelo y acaba en último lugar. De su correcta ejecución
depende que nuestro modelo envejezca de forma natural. No pocas veces una mala instalación es la
causa de esos desastres inexplicables. Por otra parte, si prevemos su ubicación desde el principio no
tendremos la desagradable sorpresa de tener que hacer cirugía para instalar una última transmisión.
La disposición habitual del equipo de radio es colocar la batería bajo o detrás del deposito, el receptor a
continuación y los servos en la parte central o trasera del habitáculo que suele quedar bajo las alas. Esta
disposición no es caprichosa sino que responde a una experiencia acumulada por todos los
aeromodelistas. La batería se coloca delante porque en caso de desastre al ser un elemento pesado des
trozaría cualquier elemento delicado que tuviera delante, el receptor y los servos están previstos casi
siempre en el diseño del modelo ya que su colocación correcta posiciona en cierta medida el centro de
gravedad. La batería no es un elemento tan delicado como el receptor y no necesita nada especial para
su protección si bien es conveniente envolverla en una espuma ligera.
Los servos se colocan normalmente en la parte posterior del alojamiento del ala debido a que así resulta
más sencillo instalar las transmisiones para los mandos de cola, elevador y dirección.
Con esta disposición queda un hueco importante para el receptor, que sí es un elemento delicado, en la
parte delantera, donde lo acomodaremos envolviéndolo en espuma. Una buena espuma de protección es
el tubo de aislamiento para calefacción que encontraremos en los establecimientos especia. Izados, este
tubo se encuentra en muchos diámetros, es suficiente elegir uno que per. mita el deslizamiento suave del
receptor en su interior. Este paquete flexible se sujeta al piso del fuselaje con unas tiras de velero.
2. Antena oculta
La antena, que generalmente se suele colocar al exterior, debe de instalarse lo mas extendida posible,
tanto es esto así que el receptor obtendrá su rendimiento óptimo si esté totalmente extendida, ya que el
receptor se ajusta para la cantidad de cable de antena que lleva instalada. Si la antena forma curvas y
pliegues, la longitud total de ésta se ve acortada y por ende el rendimiento del receptor es menor, esta
pérdida de rendimiento no es muy evidente para pérdidas de longitud de pongamos como ejemplo un
veinte por ciento, pero si cometemos el error de dejar la antena perfectamente enrollada en el interior de
nuestro avión las consecuencias serán fatales.
Durante un tiempo estuvo de moda la antena vertical en los aviones de radiocontrol, hoy esta practica ha
sido abandonada ya que el nivel de calidad de los equipos de radio actuales permite una serie de
libertades grandes en su utilización.
La tendencia actual consiste en instalar la antena en el interior del fuselaje del avión. Nuestros fuselajes
son de madera o plástico y por tanto no provocan un aislamiento de la señal de radio que llega al
receptor, otro problema serían las transmisiones metálicas paralelas a la antena, pero la longitud de onda
en la que operan los equipos de radiocontrol es mucho mayor que la distancia entre la antena y estos
elementos metálicos que eventualmente pueda albergar el fuselaje. Para la instalación de la antena en el
interior del fuselaje es suficiente haber montado con antelación un tubo de plástico en su interior por el
que deslizaremos el cable de la antena, cuando llegue el momento; si nuestros fuselajes son demasiado
cortos colocaremos este tubo hacia la deriva o le daremos una salI da al exterior, donde colgaré el
sobrante de la antena que el aire de la marcha mantendrá extendida. Mantener la antena extendida al
máximo es lo realmente importante.
Servos bien sujetos
De nada sirve que nuestros fabricantes de servos se esfuercen en suminístranos unos servos de gran
precisión mecánica, alta potencia y rigidez si nosotros los montamos de cualquier manera sobre sus
bastidores. Los servos deben de instalarse en un bastidor suficientemente firme; puede utilizarse el
bastidor en plástico que suministran algunos fabricantes, pero estos bastidores que son muy prácticos a la
hora de cambiar el equipo de radio de un modelo a otro necesitan sin embargo de un bastidor a su vez.
Nosotros somos más partidarios del bastidor fijo al fuselaje, sencillo de realizar con el esquema que
presentamos, ligero y resistente y participando a su vez en la resistencia de los flancos del fuselaje.
3. Una fijación firme no quiere decir sin embargo una fijación rígida, el servo es también un elemento con
una electrónica delicada aunque no lo sea tanto como la del receptor, pero al mismo tiempo es un
elemento mecánico que debe de transmitir esfuerzos importantes y recibirlos asimismo, para conseguir el
doble propósito de mantenerse en su sitio y protegerse de los esfuerzos exteriores se utiliza la fijación por
silenbloks.
4. Interruptor por el lado limpio
El acceso al interruptor debe de hacerse por el lado del modelo donde no llega la grasa del
motor, éste suele ser el lado izquierdo, si los flancos del fuselaje son de fibra o plástico, su
espesor seré pequeño y esto nos permite situar el interruptor directamente fijado en esta zona,
pero existe una manera más practica y cómoda y que, además, aísla totalmente el interruptor del
ambiente exterior. Consiste esta solución en instalar una varilla de mando que vaya desde el
interior del fuselaje al exterior para maniobrar con ella el encendido y apagado de la radio.
Conviene cuidar que la posición de encendido sea tirando de la varilla, ya que si se instala al
contrario será muy difícil mantener apagado el equipo durante el transporte, ya que cualquier
cosa que presionase sobre el interruptor encendería el receptor con el desgaste inútil de la carga
de batería.
>Baterías de cinco elementos
Es una practica habitual del automodelismo radiocontrolado, en el avión casi no lo utilizamos,
quizá pecando de conservadurismo ,pero con los equipos de tipo medio actuales es
perfectamente posible la alimentación del equipo de recepción con cinco elementos de Níquel-
Cadmio que es el equivalente a los cuatro elementos de pilas secas para lo que vienen previstos
muchos equipos actuales, con esta disposición notaremos que nuestros servos son mas rápidos
y potentes aunque en realidad estén trabajando a su rendimiento normal. Esta alimentación no
es adecuada cuando se utilizan servos de alto rendimiento, ya que estos servos trabajan
generalmente con el motor sobrealimentado.
5. Conclusión
Como hemos observado la instalación del equipo de a bordo es simplemente el respeto de unas
pocas normas sencillas, eso si, muy depuradas en la historia de la técnica aeromodelista; habré
casos especiales en que tendremos que salimos de la norma, pero en general estos consejos
valdrán para el ochenta por ciento de los modelos que construyamos..