El documento enfatiza que no debemos tener miedo sino confianza en Dios, ya que lo más querido para una madre es su hijo. Advierte que aunque hay manos que salvan vidas, también hay manos criminales que las quitan, por lo que debemos tener cuidado en qué manos ponemos a nuestros hijos. Finalmente, exhorta enfáticamente no abortar, ya que aunque un bebé no esté lo suficientemente fuerte en el vientre, es una vida, y no hay nada más hermoso que llevar un bebé en el vient