2. Su vida
Gabriel Taborín nació el 1 de noviembre de 1799 en Belleydoux (Ain),
Francia y creció en un ambiente rural y dentro de una familia cristiana.
Su infancia transcurrió en su pueblo natal con la educación que les
impartía el sacerdote, pues no había escuela como consecuencia de la
Revolución francesa.
3. Realizó estudios en algunas localidades vecinas durante los años 1812 –
1817. A finales de 1817 ejerció como maestro en su pueblo natal a
propuesta del Ayuntamiento. Hasta que a los 24 años se siente llamado por
Dios y se decide por la vida religiosa. Camino que le llevará a la fundación
de un Instituto de Hermanos dedicados a la catequesis, la educación
cristiana y la ayuda a los párrocos. Durante unos años peregrina por
diferentes localidades de la región en sus intentos de hacer realidad sus
ideales.
4. Su obra
En latín: Institutum Fratrum a Sancta Familia de Bellicio es un
instituto religioso de hermanos de derecho pontificio fundado el
día 28 de agosto de 1841. Tuvo una gran ayuda para esta
fundación de parte del Obispo de Belley, Monseñor Devie. Con el
correr de los años el Venerable Hermano Gabriel se vio apoyado y
ayudado por el santo Cura de Ars, San Juan María Vianney con
quien mantuvo una intensa amistad.
5. En 1889 se hace la primera fundación fuera de Francia. El 20
de marzo de 1889 llegan los Hermanos de la Sagrada Familia a
la República Oriental del Uruguay. En el año 1903 se funda en
Italia. En 1908 en la República Argentina y en 1909 en España.
Con el correr de los años los Hermanos de la Sagrada Familia
de Belley se establecen en Burkina Faso, Costa de Marfil y
Benín. También en el continente americano en Brasil, Ecuador,
México y Colombia. De igual forma en Filipinas e India. La
Curia general del Instituto está en Roma, talia.
6. Fallecimiento
El 24 de noviembre de 1864 falleció en Belley (Francia) Gabriel
Taborin, fundador de los Hermanos de la Sagrada Familia,
congregación religiosa que, desde hace más de medio siglo
7. El «hermano Gabriel» siempre estuvo sometido a una intensa e
ininterrumpida actividad y resolviendo personalmente los
problemas que iban surgiendo en el Instituto. Atendía
personalmente y viajaba a pie a visitar a los Hermanos, 150 en
fecha de su fallecimiento, distribuidos en 50 comunidades,
manteniendo una variada correspondencia, más de 11.000
cartas, escribiendo obras piadosas y algunos textos u
orientaciones pedagógicas para los Hermanos que estaban
en las escuelas.