Este poema describe la aurora en la ciudad de Nueva York como sombría y desesperanzada. Las primeras líneas presentan la ciudad con columnas de lodo y palomas negras en las aguas contaminadas. A continuación, describe a la gente que busca desesperadamente consuelo pero no encuentra esperanza ni futuro. El poema transmite la sensación de que los habitantes de la ciudad se dirigen a trabajos sin propósito en medio de ruidos y cadenas que sepultan la luz y la humanidad.
3. LA AURORA
La aurora de Nueva York tiene
cuatro columnas de cieno
y un huracán de negras palomas
que chapotean las aguas podridas.
La aurora de Nueva York gime
por las inmensas escaleras
buscando entre las aristas
nardos de angustia dibujada.
La aurora llega y nadie la recibe en su boca
porque allí no hay mañana ni esperanza posible.
A veces las monedas en enjambres furiosos
taladran y devoran abandonados niños.
Los primeros que salen comprenden con sus huesos
que no habrá paraíso ni amores deshojados;
saben que van al cieno de números y leyes,
a los juegos sin arte, a sudores sin fruto.
La luz es sepultada por cadenas y ruidos
en impúdico reto de ciencia sin raíces.
Por los barrios hay gentes que caminan insomnes
como recién salidas de un naufragio de sangre.
4. Imagen
escaneada de un
boceto hecho a
lápiz.
Se aplica a esta
imagen, brillo y
contraste para
mayor definición
de ésta.
5. Por partes, se colorea cada una de
color rojo, seleccionando cada una
de ellas primero con lazo
magnético.
6. En esta capa, con un pincel distinto al normal, hago sombra más
clara en cada parte del labio. Además, se colorea el cielo, también
por partes como los labios. Sombreado al igual que antes.