3. La vida moderna sería impensable sin el
consumo de energía, procedente en su mayor
parte de unos recursos limitados y
contaminantes, como el carbón, el gas o el
petróleo.
4.
5. No obstante existen energías alternativas,
como el viento y la luz solar, que podrían
evitar los graves problemas de deterioro
medioambiental.