1. INTEGRANTES: ILSE LORENA VELAZQUEZ CORTAZAR MARIA GPE. SANCHEZ OROZCO III SEMESTRE 302 VIAJE A CATEMACO
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3. Fundada en el año de 1774, el místico poblado de “las casas quemadas” pertenecía a la provincia de Santiago de Tuxtla. Y no es sino hasta finales del siglo XIX que es elevada a la categoría de villa y en 1966 declarada oficialmente ciudad de Catemaco .
4. De abundantes recursos naturales, la ciudad se caracteriza por la extensa variedad de flora y fauna que le rodean en el Lago de Catemaco y en sus montañas. Debido a esto, gran parte de la zona está protegida dentro de la reserva ecológica de Los Tuxtlas, municipio veracruzano al que pertenece; además de algunos desarrollos privados con esta inclinación conservacionista.
5. Asimismo, la tradición indígena en la ciudad ofrece al visitante una muy peculiar visión del mundo, ya que a pesar de su gran vocación religiosa en donde se rinde honor a la Virgen del Carmen, en Catemaco permanecen vivas las prácticas mágicas de brujos de magia blanca y negra. Todo esto se conjuga además con prehispánicas prácticas rituales que se mantienen vivas en la vida cotidiana de los locales y los centros turísticos como son los baños de Temascal y las ceremonias de saludo al sol.
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7. La palabra Eyipantla proviene del náhuatl Eyi (tres) y Pantli (bandera, barranco), Tla (agua). En español se traduce como Salto de Tres Chorros. Aproximadamente 30 metros de ancho y 60 metros de alto, la caída es impresionante, especialmente al acercarte a su base.
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9. Nanciyaga es para el turista un descubrimiento de la selva con sus maravillas y beneficios. La visita a la reserva consiste en un recorrido de aproximadamente 30 minutos, en donde se iniciará al viajero en los misterios del lugar.
10. También se puede ir a pasar el día: visitar al chaman, tomar un baño de lodo, nadar en el hermoso manantial de agua mineral y disfrutar en el restaurante los platillos de comida típica.
11. Quien desee adentrarse en las tradiciones antiguas, puede tomar un baño de temazcal. El de Nanciyaga, además de tener una construcción muy hermosa, ofrece un espacio a los participantes para la exploración interna, el cuidado personal y la convivencia ritual.
12. Una experiencia completa se logra si se decide pasar unos días en las cabañas. A las 6 de la tarde terminan las visitas guiadas y el afortunado huésped puede gozar de unas horas de absoluta tranquilidad: los ruidos de la selva, la puesta del sol, la observación de aves, reptiles y flora hacen de la estancia algo fuera de lo común. Temprano por la mañana la aventura comienza en un kayak o lancha de remos, con la visita a las islas de la laguna, en un viaje asombroso sobre las oscuras aguas que en su punto más profundo alcanzan los 55 m.
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14. La Barra, con una población de 318, situada en el final de un camino de terracería que separa al Golfo de México de la Laguna de Sontecomapan. La mayor parte del área costera consiste en dunas de arena ambientalmente amenazadas y las tortugas marinas que periódicamente tienden a ser pisoteadas por el ganado que pasta por los alrededores, y milagrosamente han sobrevivido.
15. Una manera de gozar este “refugio” es ir en el taxi acuático de Sontecomapan a La Barra , punteando cerca de 8 kilómetros del camino feo que puede convertirse en pavimento en el 2015.