Este poema corto celebra la belleza de la naturaleza, incluyendo el mar azul, los pájaros cantando, el sol brillante y la lluvia pura. Lamenta que pocos respetan la naturaleza hoy en día a pesar de que de ella dependemos para vivir y estamos conectados a ella, aunque no siempre lo sentimos. El poema termina describiendo al autor escribiendo mientras disfruta del sonido de un grillo y el aroma de una flor sencilla.