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Sheyla Saavedra Durán 141171
Sergio Reyes Angona
Escritura en las Profesiones PC-212-02
09 de Junio del 2012
Intervención arquitectónica:rehabilitación adaptativa
El enfoque del tema se basa en que actualmente la sociedad moderna nos obliga
a aprovechar el espacio arquitectónico lo mejor posible. Me refiero, a que es de
vital importancia utilizar con plenitud los edificios que se encuentran en declive,
decadencia y deterioro. Edificios obsoletos. Para lograr reutilizar este tipo de
edificios, que como diría el urbanista Kevin Lynch “desechos de la humanidad”
(Lynch, 2005), es conveniente la rehabilitación de sus antiguas estructuras para
adaptarlas a los usos contemporáneos. Pero la otra cara de la moneda, y la gran
controversia en el tema de preservación arquitectónica, es la conservación del
patrimonio. “Mórbida dedicación a la conservación” (Koolhaas, 2011) a la cual el
arquitecto se refiere, al mantenimiento de edificios históricos o espacios que no
son nuevos y que hoy en día, vemos a menudo que no se utilizarán para los fines
en que fueron diseñados originalmente, lo que resulta una pérdida de autenticidad
y de respeto por el pasado.
La decisión de llevar a cabo la intervención del edificio es muy difícil. A
veces, en casos de espacios que son muy antiguos y que el deterioro ha
alcanzado un nivel alto, es preferible dejar el espacio sin intervenir, quiero decir
conservarlo. Reconstruir detalladamente la estructura original. Aquí es donde
empieza el debate: “la presencia del pasado en el presente o la ruptura entre
tradición y actualidad”(Costa, 2006). Pero antes de determinar la postura que
tomaremos tendríamos que plantearnos algunas cuestiones como:¿Qué criterios
de arquitectura antigua merece la pena salvar?¿Es deseable, para rehabilitar un

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edificio histórico, volverlo a su estado original o debería reflejar la historia?Cómo
debería el pasado estar equilibrado con el presente y el futuro?
En los últimos años las condiciones económicas han obligado a muchos de
nosotros a apretarnos el cinturón y sacar el máximo provecho de lo que tenemos,
en lugar de reemplazarlo viejo con lo nuevo. Este nuevo proceso de diseño nos
lleva a la actitud de reciclar los desechos y que se extiende a la arquitectura en
forma de reutilización adaptativa, esto es la fusión de un antiguo edificio en algo
que mejor se adapte a las necesidades actuales.
Destrucción de la historia
Vemos que los edificios históricos a través de los ojos contemporáneos,
tratan de pelear con el tiempo y la historia tratando de entender lo que era la
arquitectura original, pero según el arquitecto Rem Koolhaas “la estrategia es
quitar cada una de las capas del tiempo y glorificarlas más no interpretarlas”
(Koolhaas, 2011). Así es como Koolhaas expone el paso del tiempo en un edificio.
En cambio el no intervenirlosacumularía edificios en desuso, acumularía historia,
paisajes nostálgicos y desinteresados por turistas, capas de polvo y memorias
jamás contadas, y lo mas importante, desaprovecha espacio necesario dentro de
la ciudad.
La rehabilitación adaptativa en edificios antiguos, que son de importancia
histórica y cultural, pueden proveer vitalidad al diseño de la ciudad y la
recuperación física del espacio. Su reemplazo con construcciones modernas
pueden eliminar cualquier herencia y la conexión con el entorno, algo que la
rehabilitación puede mantener.
Ni todo lo bueno es nuevo ni todo lo malo es viejo
Solà-Morales defiende la intervención como “una interpretación arquitectónica,

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una interpretación única, que sea resultado de la suma entre pasado y presente”
(Costa, 2006).Hay quienes odian lo antiguo y aman lo nuevo; y es que los
estereotipos han hecho creer a los usuarios que lo nuevo es siempre lo mejor.
Hay que reconocer que en alguna medida es cierto que en la edificación nueva se
cuenta con más adelantos. Pero ¿Es lo material, lo físico, lo mas importante?
Fue hasta las ultimas décadas del siglo XX cuando, la intervención fue
sensibilizando la historia y cambiando el concepto de “desecho arquitectónico”, se
empieza a querer lo antiguo y a concederle el valor que le corresponde. Un
ejemplo claro, es la restauración de la antigua iglesia del siglo XVIII en Holanda.
La cual paso por numerosas funciones, todas tratando de conservar lo que era su
uso original, hasta llegar a la conclusión de que no debía ser conservada, porque
ya no funcionaba como tal. Así que el concepto hecho por el despacho de
arquitectura Merkx + Girod, fue rehabilitarlo, fusionar el pasado con el presente
sin perder la memoria del lugar. El ambiente espacial pacifico, lúgubre, iluminado
por ventanales que proyectan ases de luz mínimos, alturas dobles, presencia de
arcos apuntalados y frescos a su alrededor, trajo como mejor adaptación, la
suspensión de elementos muy lineales en la separación de la estructura existente
para exponer y celebrar la historia del edificio.
La biblioteca es un gran gesto, una declaración que coincide con las
dimensiones monumentales de la iglesia... el objeto no se impone en el
espacio, ni se enfrenta con la arquitectura de la iglesia, sino que mejora sus
experiencias.(Brooker y Stone, 2010)
Examen de derroche
Pero no todo es el valor de lo construido, también es el valor económico.
Los edificios en desuso representan una inversión en material y procesos de

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construcción que , aunque pueda ser ya obsoleto tiene valor inmobiliario. Hay
pocos procesos más derrochadores que derribar un edificio existente y su
sustitución por algo totalmente nuevo. A pesar de esto, como algunos podrían
argumentar, es el desperdicio de energía y de material, la rehabilitación
adaptativa se ha convertido en una alternativa a la demolición de edificios
antiguos y en desuso.
Esta es una de las razones para recuperar y reutilizar esas construcciones,
pues su valor económico, que se ha reducido porque no tiene una utilidad, se
transforma con una nueva inversión que permite un nuevo uso y, por lo tanto, un
nuevo valor.
Así es como funciona la intervención arquitectónica. La ciudad vive dentro
de la historia. Las calles, los espacios, los edificios, las viviendas. Todos tuvieron
un nacimiento, un auge, una declinación. Como dice Antonio Sahady: "Los
hombres, una vez transcurrido su periodo activo, jubilan". En el caso de los
edificios esta posibilidad de detener su tiempo, es convirtiéndolos por ejemplo en
boutiques o museos; darles la segunda opción de integrarlos a la vida
contemporánea.

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Referencias
Lynch, Kevin. (2005). Echar a perder un análisis del deterioro. Barcelona: Gustavo
Gili.
Koolhaas, Rem. (2011). Rem Koolhaas on preservation. Recuperado Junio 08,
2012 a partir de http://www.designboom.com/weblog/cat/9/view/15383/rem-
koolhaas-on-preservation-festarch-2011.html
Costa, Xavier. (2006). Intervenciones. Barcelona: Gustavo Gili.
Brooker, Graeme; Stone, Sally. (2010). Basics interior architecture 04
elemnts/objects. Ava Academia.
Sahady, Antonio. (2002). En edificios de ayer, funciones de hoy. La vivienda: una
constante histórica.Redalyc.