El poema describe el profundo dolor y soledad que siente el alma del hablante después de perder el amor de su amado/a. El alma ya no siente ni late, petrificada por el dolor de saber que su amor se ha grabado en mármol en su corazón. Ahora su corazón se ha convertido en una ruina silenciosa, vacía y aterradora sin luz ni sonido, pues ya no puede escuchar los ecos del amor de su amado/a.