El documento habla sobre la importancia de dar gracias a Dios en todo momento, incluso durante tiempos de adversidad. Aconseja no desmayar aunque el cuerpo se desgaste, porque el espíritu interior se renueva cada día. También dice que las tribulaciones leves nos ayudarán a mejorar y aprender paciencia, lo que nos dará una sensación del peso eterno de la gloria. Finalmente, recomienda no enfocarse en las cosas temporales de este mundo, sino en las cosas eternas que no se ven.

1. Título: Agradecidos con Dios en todo tiempo
Texto: 2 Corintios 4:16-18
Introducción: Para todos nosotros resulta fácil dar gracias a Dios cuando todo va
bien, no hay nada que nos incomode todo lo que pasa en nuestra vida es bueno,
pero que difícil es dar gracias cuando la adversidad ha tocado nuestra vida y nos
encontramos en un callejón sin salida en ese momento no tenemos ningún deseo
de dar gracias a Dios por lo que está pasando máxime cuando esperamos la
respuesta de Dios al problema que nos aqueja, nada de lo que escuchamos es
alentador porque tenemos un panorama oscuro que no los permite ver la luz de
esperanza que espera por nosotros, entender a Dios en esos momentos es difícil,
pero él si nos entiende y nos quiere ayudar, cuando usted da gracias en los tiempos
difíciles, él se hace más grande, y las circunstancias se vuelven más pequeñas:
I. POR TANTO NO DESMAYEMOS (v.16)
a) Aunque nuestro hombre exterior se va desgastando
b) Aunque quedemos sin fuerzas
c) Sabemos que el interior no obstante se renueva día en día
II. DEBEMOS ESPERAR QUE PASE ESTA LEVE TRIBULACIÓN (v. 17)
a) Porque esto nos ayudara a mejorar nuestra vida
b) Aquí es donde vamos a aprender a tener paciencia
c) Solo así sentiremos en nosotros el eterno peso de gloria
III. NO MIRANDO LAS COSAS QUE SE VEN (v.18)
a) Si no las que no se ven
b) Pues las que se ven son temporales
c) Pero las que no se ven son eternas
CONCLUSIÓN: Aunque la tempestad sea grande, siempre debemos confiar en
Dios porque solo él nos puede sacarnos del problema y darnos una vida llena de
paz por una eternidad.