Los valores son atribuidos a los objetos por individuos o grupos sociales, modificando su comportamiento hacia esos objetos. La existencia de un valor resulta de la interpretación subjetiva de la utilidad, deseo o importancia de un objeto, según los criterios e interpretación personal de cada sujeto. Valores como la honestidad, lealtad e identidad cultural son fundamentales para la convivencia pacífica en sociedad aunque son intangibles e influyen en cómo las personas se relacionan.
Los valores agregados y atribuidos a los objetos por interpretación social
1.
2. Los valores son agregados a las
características físicas, tangibles del
objeto; es decir, son atribuidos al
objeto por un individuo o un grupo
social, modificando -a partir de esa
atribución- su comportamiento y
actitudes hacia el objeto en cuestión.
3. Se puede decir que la existencia de un
valor es el resultado de la interpretación
que hace el sujeto de la utilidad, deseo,
importancia, interés, belleza del objeto. Es
decir, la valía del objeto es en cierta
medida, atribuida por el sujeto, en acuerdo
a sus propios criterios e interpretación,
producto de un aprendizaje, de una
experiencia, la existencia de un ideal, e
incluso de la noción de un orden natural
que trasciende al sujeto en todo su ámbito.
4. Valores tales como: honestidad, lealtad,
identidad cultural, respeto,
responsabilidad, solidaridad, tolerancia,
entre otros como la perseverancia y la
resilencia, son fundamentales para el
convivir pacífico de la sociedad de los
cuales la sociedad vive de ellos e incluso son
intangibles y nadie los puede cambiar solo
uno propio a como se da a conocer con los
demás o también con las experiencias de la
vida.