Este poema de Pablo Neruda enumera las cosas que quedan prohibidas, como llorar sin aprender, tener miedo a los recuerdos, no luchar por lo que se quiere, no demostrar amor, olvidar a los amigos, fingir ante la gente, no creer en uno mismo, olvidar a quienes se echan de menos, no intentar comprender a los demás, no crear su propia historia, no buscar la felicidad ni vivir con una actitud positiva. En general, prohíbe no vivir plenamente y aprovechar cada día.