El documento describe varias referencias antiguas a Ajenjo (también conocido como Nibiru) en mitologías, textos y tradiciones de diferentes culturas. Relata eventos catastróficos asociados con cambios en los cuerpos celestes que alteraron el clima de la Tierra y causaron grandes perturbaciones.
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“El segundo ángel tocó también la trompeta, y se vio caer en el mar como
un grande monte todo de fuego, y la tercera parte del mar se convirtió en
sangre, y murió una tercera parte de las criaturas que vivían en el mar, y
pereció la tercera parte de las aves. Y el tercer ángel tocó la trompeta, y
cayó del cielo una grande estrella, ardiendo como una tea, y vino a caer en
la tercera parte de los ríos, y en los manantiales de las aguas, y el nombre
de las estrellas es Ajenjo, y así, la tercera parte de las aguas se convirtió
en ajenjo; con lo que muchos hombres murieron a causa de las aguas,
porque se hicieron amargas.”
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HISTORIA Y MITOLOGÍA
Ajenjo en la antigüedad era conocido como Nibiru para los babilónicos, era un cuerpo
celeste asociado con el dios Marduk. Nibiru significa “Lugar que cruza” o “Lugar de
transición”. En muchos textos babilónicos se identifica con el planeta Júpiter, aunque
en la tablilla cinco de la Enuma Elish se asocian con la Estrella Polar, que también se
conocía como Thuban o Kochab. Nibiru sería un planeta propuesto por Zetacharia
Sitchin, basándose en la idea de que las civilizaciones antiguas habrían obtenido sus
conocimientos y su desarrollo gracias a hipotéticos contactos con extraterrestres. Sin
embargo, esta descripción es considerada inverosímil por científicos e historiadores. En
opinión de Sitchin, el planeta habría adquirido el nombre del dios babilonio Marduk a
consecuencia de una usurpación del poder por parte del dios en el 2024 A.C,
atribuyéndose la creación de la Tierra mediante la falsificación en la copias del poema
épico Enuma Elish.
Enuma Elish es un poema babilónico que narra el origen del mundo. Enuma Elish
significa “Cuando en lo alto” en acadio, y representa las dos primeras palabras del
poema. Está recogido en unas tablillas halladas en las ruinas de la biblioteca de
Asurbanipal (669 A. C. a 627 A. C.), en Nínive. Cada una de las tablillas contiene entre
115 y 170 líneas de caracteres cuneiformes datados del año 1200 A. C. El poema está
constituido en versos de dos líneas, y la función del segundo es enfatizar el primero
mediante oposición, por ejemplo:
“Cuando en lo alto del cielo no había sido nombrado, no había sido llamada con un
nombre abajo la tierra firme”.
Según esta cosmogonía, antes de que el cielo y la tierra tuviesen nombre (ya que no
tener nombre equivalía a no existir), la diosa del agua salada Tiamat y el dios del agua
dulce Apsu, engendraron una familia de dioses con la mezcla de sus aguas, y estos a su
vez a otros dioses. Estos nuevos dioses perturbaban a Apsu, que decidió destruirlos.
Aunque uno de ellos, Ea, se anticipó a los deseos de Apsu, haciendo un conjuro y
derramando el sueño sobre él, para luego matarlo.
Ea, o Nudimmud, el dios parricida, junto a Damkina, engendró a Marduk, el dios de
Babilonia. Al tiempo, Tiamat es convencida de tomar venganza y rebelarse, decide dar
mucho poder a Kingu, su nuevo esposo, y le entrega las tablillas del destino. Marduk es
nombrado por los dioses para enfrentar a Tiamat, accede con la condición de ser
nombrado “Príncipe de los dioses o dios supremo”, finalmente vence a Tiamat y la
mata. Luego le son arrebatadas las tablas del destino a Kingu. Marduk, exultante, planea
realizar obras estupendas y las comunica a Ea:
“Amasaré la sangre y haré que haya huesos. Crearé una criatura salvaje, Hombre se
llamará. Tendrá que estar al servicio de los dioses, para que ellos vivan sin cuidado”.
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Kingu es condenado a morir por ser el jefe de la rebelión, y, con su sangre, Ea crea a la
humanidad. En honor a Marduk se construyó el Esagila en el Etemenanki. El poema es
la historia de la eterna lucha entre el Orden y el Caos, puesto que muestra el prototipo
del guerrero que lucha contra el Caos, pese a no conseguir derrotarle nunca, por lo que
la lucha es constante. Por ello, Marduk, dios de la luz y el orden, debe vencer a Tiamat,
quien representa a la oscuridad y el Caos.
Ajenjo también se muestra en multitud de escritos, documentos y mitología antigua en
distintas partes del mundo.
El Talmud y otras antiguas fuentes rabínicas narran grandes perturbaciones en el
movimiento solar en época del Éxodo y el Cruce del Mar Rojo y cuando la Ley fue
entregada. En el Antiguo Midrashim se relata que cuatros veces el Sol fue forzado fuera
de su curso, en las pocas semanas entre el día del Éxodo y el día en que la Ley fue
dispensada. La prolongada oscuridad, el cataclismo y la conflagración del mundo fueron
el resultado de las perturbaciones en el movimiento de la Tierra.
El Midrashim habla de una perturbación en el movimiento solar en el día del Cruce:
“El Sol no continuó en su curso”.
En ese día, según los Salmos (70:8):
"La Tierra temerosa permaneció quieta".
Es posible que Amos (8:8-9) esté reviviendo la memoria de este evento cuando
menciona la inundación de Egipto en tiempos en que:
"Las tierras emergieron del mar, y terrenos secos fueron tragados por las aguas ", y "
el Sol se ocultó al mediodía”.
Además, el día en que la Ley fue entregada a los hombres, cuando nuevamente hubo
una colisión de mundos, fue de acuerdo con numerosas fuentes rabínicas, un día
inusualmente largo: el movimiento del Sol estaba perturbado. En esta ocasión y en
general en los días siguientes al Cruce , las tinieblas , las densas y cargadas nubes , los
rayos y los huracanes , aparte de la devastación provocada por los terremotos y
maremotos , hacían la observación muy difícil , sino imposible.
Muchos agentes aportaron al cambio del clima La insolación estaba bloqueada por
pesadas nubes de polvo, y la radiación del calor de la tierra estaba igualmente atenuada.
Se generó calor por el contacto cercano de la Tierra con otro cuerpo celeste. La Tierra
fue trasladada a una órbita más alejada del Sol. Las regiones polares se desplazaron. Los
mares y océanos se evaporaron y los vapores precipitaron en nieve sobre las nuevas
regiones polares y altas latitudes en un largo "Invierno Nuclear", lo que originaría una
pequeña edad glaciar formando nuevos casquetes polares. El eje de rotación de la Tierra
apuntó en una dirección diferente, y el orden de las estaciones quedó alterado.
Es muy característico el hecho de que en las tradiciones escritas de los pueblos de la
antigüedad, el desorden en las estaciones vaya siempre conectado con la perturbación en
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el movimiento de las estrellas, el Sol y la Luna en el firmamento. Asimismo, las
tradiciones orales de los pueblos primitivos retienen recuerdos de este cambio en el
movimiento de los cuerpos.
Antiguos registros mexicanos nos hablan de la secuencia de estos eventos. El Sol fue
atacado por Quetzalcoatl. Después de la desaparición de este cuerpo celeste con forma
de serpiente, el Sol se rehusaba a brillar, y durante cuatro días la Tierra estuvo privada
de su luz. Murió mucha gente. Desde entonces el cuerpo con forma de serpiente se
transformó en una estrella. Esta estrella mantuvo el nombre de Quetzalcoatl,
apareciendo por primera vez en el este. Quetzalcoatl corresponde al conocido nombre
del Planeta Nibiru. Leemos allí:
"El Sol se rehusaba a mostrarse y durante cuatro días el mundo estuvo privado de luz.
Entonces apareció una gran estrella. . . se le dio el nombre de Quetzalcoatl. . . para
mostrar su ira los cielos hicieron que mucha gente muriera de hambre y pestilencia".
La secuencia de las estaciones del año y la duración de los días y las noches se hizo
desordenada.
Platón, citando al sacerdote egipcio, decía que la conflagración mundial asociada a
Phaetón fue causada por un cambio en los cuerpos celestes que giran alrededor de la
Tierra.
Phaetón, que significa "La Estrella LLameante", devino la Estrella de la Mañana. El
más antiguo cronista que relata la transformación de Phaetón en planeta es Hesíodo. La
transformación es comentada por Higinio en su Astronomía, donde cuenta que Phaetón,
habiendo causado la conmoción del mundo, fue golpeado por un rayo de Júpiter y fue
alineado por el Sol entre los planetas.
El nacimiento de la Estrella de la Mañana. O la transformación de un personaje
legendario (Ishtar, Phaetón, Quetzalcoatl) en la Estrella de la Mañana fue difundida
motivo de todo el folclore de los pueblos orientales y occidentales. La tradición
tahitiana del nacimiento de la Estrella de la Mañana es narrada en la Sociedad de la Isla
en el Pacífico. La leyenda Mangaiana cuenta que con el nacimiento de una nueva
estrella, la Tierra fue bombardeada por innumerables fragmentos. Los Buriatas,
Kirghises y Yakuts de Siberia y los esquimales de Norteamérica también cuentan del
nacimiento del planeta Nibiru.
Una estrella centelleante perturbó el movimiento visible del Sol provocando un
cataclismo mundial, y pasó a ser la Estrella de la Mañana. Esto se puede descubrir no
sólo en las tradiciones y leyendas, sino también en los libros de astronomía de los
pueblos antiguos de ambos hemisferios.
Entre los eruditos griegos, Pitágoras tiene reputación de haber tenido acceso a alguna
ciencia secreta. Sus discípulos y los alumnos de estos, llamados pitagóricos, eran muy
cuidadosos de no revelar sus conocimientos a nadie que no perteneciera a su cerrado
círculo. Aristóteles hace mención a su interpretación de la naturaleza de los cometas:
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"Algunos de los italianos llamados pitagóricos afirman que el cometa es en verdad uno
de los planetas, pero aparece a grandes intervalos de tiempo y sólo se asoma un poco
sobre el horizonte.”
Aristóteles no estaba de acuerdo con los pitagóricos que consideraban que uno de los
planetas del Sistema Solar era un cometa.
Pero los pitagóricos no creían que un planeta representaba a todos los cometas. Según
Plutarco, ellos pensaban que cada uno de los cometas tenía su órbita y período de
revolución. Entonces, aparentemente los pitagóricos sabían que el cometa "Que es uno
de los planetas" es Nibiru.
El Manuscrito Troano y otros documentos de los mayas describen un cataclismo
cósmico en el que el océano se abalanzó sobre el continente y un terrible huracán barrió
la faz de la tierra. El huracán se levantó arrastrando pueblos enteros y todos los bosques.
Los volcanes explotaron, y los maremotos treparon por encima de las montañas,
mientras impetuosos vientos amenazaban con aniquilar a la especia humana.
La faz de la tierra cambió, montañas colapsaron mientras otras crecieron y se levantaron
por encima de la feroz catarata de agua proveniente del vientre del océano, numerosos
ríos cambiaron su curso, y un salvaje tornado bajó del cielo para danzar entre los
despojos. El final del mundo fue causado por Hurakan, agente físico que trajo la
oscuridad y arrasó con casas, árboles, aún rocas y montes de la tierra. De su nombre se
deriva la expresión "Huracán", que se refiere a un poderoso viento. Hurakan destruyó la
mayor parte de la humanidad. Y en la oscuridad barrida por el viento, una sustancia
resinosa llovió del cielo y aportó con fuego y agua en la destrucción del mundo.
Por cinco días, salvo por la erupción de los volcanes, el mundo estuvo a oscuras puesto
que el Sol no aparecía por ninguna parte en esos instantes.
El tema de un huracán catastrófico es una y otra vez repetido por los Vedas de la india y
por el Avesta de los persas, y el "Diluvium Venti", diluvio de viento, es un término
familiar en muchos autores antiguos. En la sección "La Oscuridad" cito fuentes
rabínicas que se refieren al potente viento del oeste que perduró por siete días mientras
la tierra quedaba envuelta en tinieblas, y la inscripción jeroglífica del “El Arish” sobre
nueve días de destrucción en que hubo tal tempestad que nadie podía abandonar el
palacio ni ver al que tenía a su lado, y la 11ª. Tableta de la Epopeya de Gilgamesh que
relata que:
"Por siete días y siete noches. . .el huracán, la inundación y la tempestad continuaron
barriendo la tierra y casi toda la humanidad pereció en el evento. En la batalle del
dios. Planeta Marduk con Tiamat, Marduk levantó vientos malignos, tempestad,
huracán, ráfagas de viento y la destrucción de todo lo visible”.
Los Maoríes narran que durante un imponente cataclismo:
"Los poderosos vientos , las fieras ráfagas , las nubes , densas , oscuras , feroces ,
empujando sin piedad , irrumpiendo sin oposición ", se precipitaron sobre toda la
creación , en su centro Tawhirima-tea , padre de los vientos y las tormentas , barriendo
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con gigantescos bosques y empujaron las aguas del mar en empinadas crestas que
parecían ser montañas”.
"La tierra quedó sumergida en el océano, pero fue sacada por Tefaafanau".
Narran los aborígenes de Paumotu en la Polinesia . Las nuevas islas " Fueron forjadas
por una estrella". En el mes de Marzo los polinesios veneran a Dios, Taafanua. En
idioma árabe Tyfoon es un tornado y Tufan es el Diluvio. Y también es usada en chino
como Ty-fong.
En el mito cosmológico japonés, el dios del Sol se escondió por largo tiempo en una
cueva de los cielos, temerosa del dios de la tormenta. "La fuente de luz desapareció, y
todo el mundo se hizo oscuro", y el dios de la tormenta causó monstruosa destrucción.
Los dioses hicieron terrible ruido para hacer que el Sol apareciera, y por el tumulto la
tierra tembló. En el Japón y su vasto mar no es extraña la ocurrencia de huracanes y
terremotos.
Dice el texto budista:
"Que cuando un ciclo del mundo es destruido por los vientos, la tierra es puesta al
revés y arrojada por los cielos y áreas de cien, doscientas, trescientas, quinientas
leguas de extensión, se parten y son lanzadas hacia arriba por la fuerza del viento, y no
caen nuevamente sino que quedan convertidas en polvo y sopladas hacia la altura y
destruidas. Y el viento sopla también a las montañas que rodean a la tierra hacia la
altura, son convertidas en polvo y destruidas. El viento cósmico sopla y destruye cien
mil veces diez millones de mundos".
Las mareas son producidas por la acción del Sol, y en mayor grado por la Luna. Un
cuerpo mayor que la Luna o posicionado más cerca de la Tierra, podría tener un efecto
mayor. Un cometa cuyo cuerpo sea del tamaño de un planeta que transitara lo
suficientemente cerca, elevaría las aguas de los océanos a alturas inconcebibles. Una
detención en la rotación de la Tierra o una disminución en su velocidad de rotación,
provocarían una recesión de las aguas oceánicas por inercia hacia los polos.
El Midrashim contiene la siguiente narración:
"Las aguas se apilaron hasta una altura gigantesca, y pudieron ser vistas por todos los
habitantes de la Tierra".
Lo que intenta decir esta frase es que la altura de las aguas era enorme. De acuerdo a las
Escrituras, las aguas treparon a las montañas y se quedaron encima de ellas, y llegaron
hasta los cielos.
Queda claro que en la antigüedad un suceso astronómico de gran magnitud tuvo lugar
en nuestro planeta. La historia y mitología de los distintos lugares de la Tierra narran
cómo un objeto celeste de gran magnitud apareció en los cielos para provocar toda clase
de calamidades en forma de desastres naturales.
Dicho evento ocurrió en distintas fases de nuestro pasado lo que indica que el objeto
celeste puede ser cíclico y como los pitagóricos indicaban “Aparecer en largos
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intervalos de tiempo…”. Todo parece indicar que dichos intervalos largos de tiempo
tienen gran similitud con las órbitas de los cometas.
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FOLCLORE POPULAR
En años recientes ciertos astrónomos cada vez más han llegado a apreciar que lo
codificado en el folclore y las mitologías de muchas culturas son las acertadas
observaciones de los antiguos observadores del cielo. Casi todos hablan de tiempos en
los que llegaron muertes y destrucciones masivas desde el cielo, eventos que por lo
general son retratados como “Batallas celestiales” entre los que denominaron en
diversas ocasiones como “Los Dioses”. Y curiosamente las imágenes en estos “Mitos”
poseen características comunes, incluso entre las mitologías de culturas ampliamente
separadas en tiempo y lugar.
De esta forma haciendo un desglose por las distintas partes del planeta podemos
observar como un hecho local que se suponía localizado en la zona de la antigua
Sumeria y Babilonia está descrito por todo el mundo. Cada cual describiendo el hecho
ocurrido de la forma que ellos creían pero todos con un fondo común…catástrofes y
señales en los cielos.
Según Fred Hoyle, del cual hablaremos más detenidamente en capítulos posteriores, el
cambio de la Edad de Hielo la edad cálida tomó sólo una década. Esto debe de haberse
demostrado casi como desastroso para los humanos en cuanto a que la mega fauna que
conducida a la extinción. Las reversiones del campo magnético de la Tierra cuando
Ajenjo está cerca del afelio podrían causar penetración de iones de alta-energía de los
cinturones de Van Allen. Éstos producirían mutaciones biológicas, nuevas venas de
bacterias y virus, y los efectos combinados de agentes de guerra químicos, nucleares y
biológicos.
Se han grabado datos de culturas ancestrales por todo el mundo. Allan y Delair en
“Cuando la Tierra Casi Muere”, ha catalogado más de quinientas leyendas que
describen esta catástrofe. El tema más popular en las leyendas antiguas es el diluvio,
pero en muchos, el diluvio ocurre después de un incendio o tormenta de fuego.
Cuando es mencionado en pares, la tormenta de fuego precede al diluvio, y el agua lo
extingue. También mencionados son el granizo de hielo, lluvias de sangre y de material
sólido (como piedras), así como tsunamis y lagos y ríos hirvientes. La fecha promedio
de este evento, derivada de todas las fuentes, es de hace 11,581 años aproximadamente.
Un mar de cristal, los campos de fragmentos de cometas, precedieron al cometa
Phaetón. Ellos cayeron primero y siguieron cayendo aun después de haber impactado el
cuerpo principal del cometa. Se reportaron gotas de lluvia de un rango como del tamaño
de la cabeza de un hombre al de una tienda, así como cincuenta kilos de granizo de
hielo. Los gases helados (hielo seco) podría entrar en los cuerpos de agua y darles la
apariencia de estar hirviendo.
Huesos de animales del Pleistoceno tardío encontrados en depósitos de acarreo son
frecuentemente manchados de hierro. Las breccias de huesos son, a menudo,
fuertemente ferruginosos y silicificados. Este material puede haber venido del campo de
fragmentos, o del cuerpo principal del propio cometa, o ambos. Un cometa de núcleo
metálico golpeando la Tierra inyectaría grandes cantidades de polvo de metal en la
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estratosfera, creando un "Cielo de bronce" y convirtiendo la tundra helada en un
pantano lleno de barro. Estas leyendas apoyan la teoría de Fred Hoyle que un meteorito
de metal causó hacia hace 11,600 años la gran extinción de la mega fauna.
Tanto los Navajos y los Choctaw que se encuentran en Arizona y Oklahoma
respectivamente, cuentan cuentos de un tsunami gigante. Estas áreas son muy interiores,
y tendría que haber sido un real gran tsunami para alcanzarlas. Sin embargo, los indios
americanos eran nómadas, y podrían haber vivido originalmente más cerca del océano.
El Corán declara que la presión de la ola que llevó el Arca, conectó con otras aguas de
latitudes más al sur.
Ahora presentaré una serie de extractos sacados de las teorías de Velikovsky, el cual
pensaba muy acertadamente que buscando en nuestra historia y folclore se podía
entender muchas cosas del pasado, del presente y muy probablemente del futuro.
ASIA Y OCEANÍA
Los chinos afirman que es sólo desde que se ha establecido un nuevo orden de las cosas,
que las estrellas se mueven de este a oeste. Los signos del zodíaco chino tienen la
extraña peculiaridad de precederse en dirección retrógrada, es decir, contraria al
movimiento del Sol.
Crónicas chinas mencionan que durante el reinado de Yahou: "Una brillante estrella
apareció".
Los anales chinos que ya hemos citado afirman que en tiempos del emperador Yahou el
Sol no bajó durante diez días. El mundo estaba en llamas, y "En su vasta extensión las
aguas se empinaron hacia las alturas, amenazando con inundar los cielos". Las aguas
del océano se apilaron y luego se lanzaron contra el continente de Asia. Un gran
maremoto barrió por encima de las montañas e invadió el centro del Imperio Chino. El
agua quedó estancada en los valles entre las montañas y la tierra estuvo inundada
durante décadas.
Los chinos se refieren a un colapso del cielo que aconteció cuando las montañas se
desplomaron. Debido a que las montañas se desplomaron o fueron erigidas al mismo
tiempo que el cielo se desplazaban, los antiguos, no únicamente lo chinos, creían que las
montañas sostenían al cielo.
Las tribus se Samoa narran en sus leyendas una catástrofe ocurrida " En los días en que
el cielo antiguo se desplomó". Los cielos o las nubes estaban tan bajos que la gente no
podía estar en pie sin tocarles.
CENTROAMERICA
Cuando los españoles conquistaron Yucatán, indios versados en su antigua literatura
relataron a los conquistadores las tradiciones recibidas de sus ancestros: sus antepasados
se liberaron de la persecución de otro pueblo cuando el Señor abrió para ellos un
camino entre las aguas del mar. Esta tradición es tan similar a la leyenda judía del
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Cruce, que algunos monjes que vinieron a América creyeron que estos indios eran de
origen judío. Fray Diego de Landa escribió:
"Algunos viejos indios de Yucatán dicen que han escuchado de sus antepasados que
este país fue poblado por una raza que vino del Oriente, a quienes Dios liberó abriendo
para ellos doce pasajes a través del mar”.
Si esto fuera cierto, todos los habitantes de la Indias serían de descendencia israelita.
Los antiguos pobladores de México cuentan de una edad del mundo que llegó a su fin,
cuando el cielo se desplomó y la Tierra quedó envuelta en la oscuridad.
Los aztecas relataban:
"No había existido el Sol por mucho tiempo. . . Los jefes comenzaron a mirar a través
de las tinieblas en todas direcciones en busca de la luz, y a hacer apuestas acerca del
lugar en que el Sol volvería a aparecer. Algunos decían " aquí ", otros exclamaban "
allá". Pero cuando el Sol finalmente se levantó, todos estaban equivocados, porque
ninguno de ellos se había fijado en el este".
Similarmente la leyenda maya cuenta que:
"No se sabía desde donde el nuevo Sol habría de aparecer". "Miraban en todas
direcciones, pero eran incapaces de señalar en qué lugar el Sol aparecería. Algunos
creían que despuntaría desde el norte y sus miradas se dirigían en esa dirección. Otros
pensaban que sería desde el sur. En realidad sus predicciones se referían a todas las
direcciones, porque había una luz difusa uniforme en todo el derredor. Sin embargo
algunos fijaron su atención en el oriente, y sostuvieron que el Sol se levantaría desde
allí.”
Entre los incas:
"El poder que regula las estaciones del año y los caminos de los cuerpos celestes era
Huiracocha”. "El Sol, la Luna, el día, la noche, la primavera, el invierno, no son
vanamente ordenados por ti, Oh Huiracocha".
EUROPA
De acuerdo a la historia cosmogónica lapona:
"Cuando cundió perversidad entre los seres humanos, el centro de la tierra tembló de
terror, de modo que las capas superiores de la tierra se desplomaron y muchos de los
humanos cayeron al interior de estas cavernas y allí perecieron. Y Jubmel, el Señor del
Cielo en persona, bajó a la Tierra. . . Su ira terrible destelló con serpientes de fuego
rojo, azul y verde, y las gentes escondieron sus rostros, y los niños gritaban de miedo. .
. Y el dios furioso habló: Invertiré al mundo. Haré que los ríos fluyan al revés. Haré
que el mar se junte en una pared alta como una torre y lo lanzaré sobre los perversos
hijos de la Tierra, y así los destruiré juntos con toda cosa viviente”.
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De acuerdo a la épica lapona, el mundo fue acosado por un huracán y por el mar,
pereciendo casi todos los seres humanos. Cuando cayó la pared de agua sobre el
continente, gigantescas olas continuaron barriendo la tierra mientras los cadáveres eran
tragados en oscuras aguas.
Los esquimales de Groenlandia dijeron a los misioneros que en una antigua época la
Tierra se revolvió y la gente que entonces vivía transformó en “Contraria".
Los finlandeses en su Kalevala cuentan que el cielo perdió pie y que una chispa de
fuego creó un nuevo sol y una nueva luna. Los lapones presentan ofrendas para que el
cielo no pierda su sostén y caiga.
Los Esquimales de Groenlandia temen a que el soporte del cielo pueda desfallecer y que
el cielo se caiga matando a los seres humanos. Un oscurecimiento del Sol y la Luna
precederían a dicha catástrofe.
CANADA
El antropólogo germano-americano Franz Bohaz ha trazado la mitología de los Utes de
la provincia canadiense de la Columbia Británica, donde los Utes resultan ser
provenientes de los Kutenai, los que a su vez descienden de los Okanagan. Los Kutenai
ocupan territorios que comprenden partes de la Columbia Británica, Alberta,
Washington, Idaho y Montana. Como los Utes, los Kutenai hablan de un gran fuego que
provocó erupciones de la tierra cuando el Sol fue golpeado por una flecha. Y hablan de
su temor a que el mundo termine cuando el cielo pierda su estabilidad:
"Los Kutenai miran hacia la Estrella Polar cada noche”. Si no está en su lugar
significa que el fin del mundo es inminente".
En 1886 el famoso historiador americano Hubert Howe Bancroft relataba el mito de los
Okanagan acerca de su isla - paraíso perdido:
"Samah - tumi - whoo – lah”. "Hace mucho tiempo, cuando el Sol era joven y no más
grande que una estrella, había una isla lejos en medio del océano. Se llamaba Samah -
tumi - whoo - lah, que quiere decir Isla del Hombre Blanco. En ella vivía una raza de
gigantes - gigantes blancos. Su gobernante era una espigada mujer blanca llamada
Scomalt. .Ella podía crear cualquier cosa que quisiera. Por muchos años los gigantes
blancos vivieron en paz, pero al final comenzaron las disputas entre ellos. Estas
disputas se convirtieron en una guerra. Se escuchaba el ruido de la batalla, y muchos
de ellos caían muertos. Scomalt estaba muy, muy enojada. . . empujó a los gigantes
perversos hacia un extremo de la Isla del Hombre Blanco. Cuando los hubo reunido a
todos allí, rompió una parte del terreno y la empujó mar adentro. Por muchos días la
isla flotó a la deriva, golpeada por las olas y el viento. Todos murieron, excepto una
mujer y un hombre. . . Pensando que su isa se hundiría, construyeron una canoa. . .
luego de remar por muchos días, arribaron a unas islas. Se desplazaron por entre las
islas, y finalmente llegaron al continente”.
Los Okanagan y los Utes temían cualquier cambio dramático en el cielo como el
temible portento de una nueva gran inundación. El temor de que nuevamente el Sol
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pudiera vagar errático por el cielo y que el cielo pudiera caer llegaba a ser una obsesión.
Y los Okanagan creían que en un tiempo futuro:
"Los lagos derretirían los cimientos del mundo y los ríos cortarían el mundo en
pedazos. Entonces el mundo flotaría tal como lo hiciera la isla muchos soles y nieves
atrás. Este sería el fin del mundo.”
NORTE AMÉRICA
Los indios Choctaw de Oklahoma relatan:
"La tierra estuvo sumida en la oscuridad por largo tiempo. Finalmente una luz
apareció en el norte. Pero se vieron olas del tamaño de una montaña, que se acercaban
rápidamente".
Cito como ejemplo la tradición de la tribu Oraibi de Arizona. Ellos cuentan que el cielo
colgaba demasiado bajo y el mundo estaba en la oscuridad y no había sol, ni luna, ni
estrellas a la vista:
"La gente murmuraba por la oscuridad y el frío". Entonces el dios planeta asignó
tiempos, estaciones y caminos para los astros del cielo”.
Más al sur encontramos a los Washo del oeste de Nevada, Ellos narran que mucho
tiempo en el pasado las montañas se estremecieron con las erupciones de los volcanes:
"Tan grande era el calor que las montañas incandescentes derritieron a la estrellas y
éstas cayeron".
La ahora extinta tribu Cahto:
"El cielo se desplomó No existía la tierra. En una gran extensión no había tierra. Las
aguas del océano vinieron todas juntas Todos los animales perecieron ahogados".
Los Shasta, del norte de California, cuentan que en una época pasada el Sol cayó de su
camino normal. En otro mito cuentan como el monte Shasta salvó a sus ancestros de
este diluvio.
A principios del siglo IXX un Cherokee llamado Sequoya creó un alfabeto para escribir
el lenguaje de la tribu. Su trabajo dejó una rica herencia de mitos transcritos de la
tradición oral de su pueblo. En uno de estos mitos la inundación se atribuye a las
incontables lágrimas de la diosa del Sol. Se dijo que ella llegó a odiar a los hombres, y
los maldijo con una gran inundación.
SUDAMERICA
Las tradiciones de los pueblos del Perú cuentan que por un período de tiempo igual a
cinco días y cinco noches no había Sol en el cielo, y que el mar, después de alejarse de
las costas, irrumpió sobre el continente. Todo el paisaje de la tierra cambió con la
catástrofe.
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Los pueblos de Sudamérica también cuentan mitos relativos a una gran inundación y los
eventos que la acompañaron. Entre ellos, los Ipurinas del noroeste del Brasil narran:
"Hace mucho tiempo la Tierra fue azotada por una inundación ardiente. Esto aconteció
cuando el Sol, un caldero de agua ardiendo, se volcó".
En Chile los Araucanos tiemblan ante una traumática memoria ancestral:
"La inundación fue el resultado de una erupción volcánica acompañada de un violento
terremoto",
Cada vez que hay un terremoto los nativos tienden a huir a las montañas. Ellos tienen
miedo de que después del temblor un maremoto pueda nuevamente ahogar al mundo.
Como los Araucanos los Incas del Perú quedaban paralizados por temor a que cualquier
cambio en el Sol fuera anunciador de destrucción. En 1555 un cronista español
comentaba:
"Cuando hay un eclipse de Sol o de Luna los indios lloran y se lamentan atemorizados,
porque creen que ha llegado el momento en que la tierra perecerá. . .".
El famoso historiador peruano Garcilasso de la Vega, hijo de un conquistador español y
una princesa inca, preguntó a su tío Inca acerca de la historia de los orígenes de su
pueblo. Él contestó que habían salido de las regiones del sur inmediatamente después
de la inundación. En otras palabras, la agricultura habría sido introducida en la región
del lago Titicaca por gente que ya poseía estos conocimientos pero habrían sido
forzados a abandonar su tierra natal cuando la inundación destruyó sus tierras del sur.
Las tradiciones de los Casinaua, aborígenes del oeste del Brasil, narran lo siguiente:
"Los rayos destellaban y los truenos rugían terriblemente, y todos estaban
aterrorizados. Entonces el cielo explotó y los fragmentos cayeron y mataron a todos. El
cielo y la Tierra cambiaron de lugar. Nada vivo quedó sobre la Tierra".
En estas tradiciones se menciona los mismos elementos: los rayos y truenos, " la caída
del cielo, la lluvia de meteoritos.”
AFRICA
Los Primitivos de Africa, tanto en las provincias orientales como occidentales del
continente, cuentan de un colapso del cielo ocurrido en el pasado.
Los Ovararo relatan que hace muchos años:
"El grande de los cielos Eyuru dejó caer el cielo sobre la tierra. Casi todos murieron,
quedando muy pocos con vida”.
Las tribus de Kanga y Loanga también tienen una tradición del colapso del cielo que
aniquiló a la raza humana.
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Los Wanyoro de Unyoro también cuentan que el cielo cayó sobre la tierra y los mató a
todos:
“El dios Kagra lanzó el firmamento sobre la tierra para destruir a la raza humana.”
En muchas ocasiones dicho folclore ha ido pasando de generación en generación de
forma casi inalterada en las distintas tribus que habitan nuestro planeta. Dicho folclore
está allí, visible y palpables para quienes lo deseen escuchar sin ningún tipo de
manipulación, tan sólo la interpretación que el interlocutor quiera dar a ese folclore y
sacar sus propias conclusiones.
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LITERATURA
Son muchos los autores que han citado este supuesto cuerpo celeste en sus libros. Creo
conveniente citar cronológicamente los más conocidos. De esta forma se podrá observar
el punto de vista de cada escritor respecto a este objeto. Hay que decir que algunos de
ellos no citan las fuentes y dicen haber recibido dicha información de una forma algo
esotérica o divina. La mayoría de ellos toman las fuentes de antiguos textos como base
para sus libros. Quizás porque en la Historia se encuentren muchas de las respuestas que
en el presente nos hacemos.
Un supuesto médium brasileño llamado Hercilio Maes escribió en 1956 “Mensajes del
Astral”. En el cual una entidad llamada Ramatís profetizaba sobre el fin del Mundo.
Según Ramatís los tiempos apocalípticos guardan una estrecha relación con ciclos
perfectamente definidos y no tienen otra necesidad que la purificación y selección de la
especie humana. También nos habla de un astro que desencadenaría dicho fin del
mundo y aparecería visible en los cielos en los tiempos finales. Dicho astro fue
nombrado de distintas formas: Planeta Higienizador, Planeta Intruso, Planeta
Depurador, Absinto pero fue Hercólubus el que posteriormente cogió más fama.
Lo describe como un gigante 3200 más grande que la tierra con una órbita de 6666 años
alrededor de nuestro sol. Los efectos de la aproximación de Hercólubus serían
devastadores y ocasionaría enormes cataclismos terrestres. Los ejes terrestres se verían
afectados y su denso y magnetismo se comportaría como un imán absorbiendo las
energías de nuestro planeta.
En la década de los años sesenta hay muchos autores pseudocientíficos que fueron
influenciados por las ideas que proponía Hercilio Maes. Muchas de esas ideas descritas
en los libros hablaban de fechas fallidas sobre la llegada de dicho objeto a las
proximidades de nuestra órbita.
El paramilitar brasileño Aladino Félix más conocido con el sobrenombre de Kraspedon
escribió en 1959 el libro “Contacto con los discos voladores”. Como no iba a ser
menos el autor describía su encuentro con seres “jupiterianos” que le habían informado
sobre sucesos que tendrían lugar en un futuro no muy lejano. Este autor se dedicaba a
profetizar según lo que sus supuestos extraterrestres le contaban. Entre sus teorías más
cercanas estaba la de los dos soles. Según le habían informado los extraterrestres un
segundo sol penetraría en breve en nuestro sistema solar desde la dirección de Cáncer.
Esto creará problemas en las órbitas de los planetas del sistema solar causando
catástrofes en nuestro planeta.
Otro autor Victor Manuel Gómez Rodriguez con el seudónimo Samael Aun Weor,
esoterista y escritor Colombiano que en sus libros mezclaba el arte, la religión, la
astrología y la parapsicología. En sus libros “Discos voladores” y “A los mil llegamos
pero a los dos mil no” y “Misterios Mayas” escritos en la década de los sesenta.
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Describe casi con las mismas palabras lo dicho por Ramatís de Hercilio Maes. Según el
escritor el planeta Hercólubus sería seis veces más grande que Júpiter y pertenecería al
sistema Tilo. Su enorme magnetismo y masa haría que el gigantesco astro invirtiera los
polos magnéticos terrestres. Eso produciría una serie de cataclismos descomunales
como los acontecidos en la antigua Atlántida. Las tierras se elevarían y se hundirían en
los mares como consecuencia de los cataclismos y así mismo aparecerían nuevas islas.
El escritor y ufólogo Jose Antonio Rosiano más conocido como Yosip Ibrahim en su
libro “Yo visité Ganímedes” de 1972 cita casi textualmente los libros de sus
antecesores. Por lo que su obra es mera recopilación de lo dicho por Ramatís. Como
resumen de su obra cita Hercólubus como un planeta gigantesco que en la Biblia
llamaban Ajenjo, tres veces más grande que Júpiter. Dicho planeta pertenece a un
sistema desconocido para muchos astrónomos, pero que en Ganímedes es conocido
como Tila. El paso de dicho planeta originaría cambios de polos terrestres con los
consecuentes cataclismos.
Como vemos la década de los sesenta estuvo plagada de escritores y pseudocientíficos
predicando una nueva era que no llegaba. Anunciándose como predicadores y sabedores
de la única verdad posible. Cabe destacar las fuertes connotaciones bíblicas que tenían
algunos autores así como referencias al más célebre profeta de todos los tiempos,
Nostredamus.
Ya sea influido por su imaginación, fuentes bíblicas o de otra índole lo único destacable
sin duda por lo novedoso sería las palabras de Ramatís en boca del escritor Hercilio
Maes. Este escritor marcó un antes y un después influenciando a posteriores escritores e
hizo famoso a Ajenjo, bautizándolo con el nombre de Hercólubus.
En la década de los setenta otro investigador y arqueólogo llamado Zecharia Sitchin
escribió un libro “El 12º Planeta” presentado en 1976 que dio a conocer a Ajenjo de
una forma que ningún otro había hecho hasta el momento. En este libro Sitchin describe
a diez planetas, el sol y la Luna. Según su teoría, sacada de traducciones de antiguas
tablillas de arcillas sumerias así como de fuentes Mayas, Nibiru era un planeta que
habría sido el hogar de una raza extraterrestre llamada Annunaki. Dicho planeta habría
quedado atrapado dentro del Sistema Solar con una órbita de unos 3600 años como
consecuencia del impacto de uno de sus satélites contra un hipotético planeta llamado
Tiamat. Como consecuencia de dicho impacto habría originado nuestro planeta y la luna
así como el cinturón de asteroides entre Marte y Júpiter.
La órbita de Nibiru alrededor del sol es muy elíptica, según los libros de Sitchin,
ubicado más allá de la órbita de Plutón en su punto más lejano. Nibiru tarda 3600 años
en completar un recorrido orbital con los efectos de gravedad de un planeta grande
moviéndose cerca del sistema solar interior, ya que Nibiru podría causar grandes
anomalías en las órbitas de los otros planetas, perturbando el cinturón de asteroides y
creando un gran problema al Planeta tierra. Según Zitchin las Fuentes bíblicas y
mesopotámicas nos presentan sólida evidencia de que el período orbital de Nibiru es de
3.600 años. El número 3.600 era representado por los sumerios como un gran círculo.
19. 19
La expresión para referirse al planeta, el "Shar", también significaba "Un círculo
perfecto" o "Un círculo completo". Y también significaba el número 3.600. La
conclusión que se saca es que estos “Shar” tenían relación con el periodo orbital de
3.600 años.
Es posible que además de traducir las tablillas de arcilla sumerias, se sirviera de textos
ya traducidos por el arqueólogo británico Reginald Campbell Thompson. Campbell era
experto en la lectura cuneiforme y tradujo muchos textos antiguos babilónicos como
“La epopeya de Gisgamesh” que pudieron servir de inspiración para Sitchin a la hora
de escribir su libro.
Pongamos de ejemplo una cita de Campbell sobre el acercamiento de Nibiru a nuestro
sistema solar publicado en “Reports of the Magicians and Astronomers of Niniveh and
Babylon”
Si, desde la posición de Júpiter, el Planeta pasa hacia el Oeste, habrá un tiempo para
morar en la seguridad. La amable paz descenderá sobre la Tierra. Si, desde la posición
de Júpiter, el Planeta aumenta en brillo y en el Zodiaco de Cáncer se convierte en
Nibiru, Acad se desbordará de plenitud, el rey de Acad crecerá poderoso. Si Nibiru
culmina…las tierras habitarán con seguridad, los reyes hostiles estarán en paz, los
dioses recibirán las oraciones y atenderán las súplicas”.
Algunos compañeros de profesión de Sitchin lo tachan de realizar unas traducciones un
poco subjetivas. Ya que para un mismo concepto de las antiguas lenguas muertas podía
haber varias interpretaciones. Es por eso que toda la historia y civilización contada en su
libro podría resultar del fruto de unas interpretaciones propias no demasiado de acorde
con sus homólogos de profesión.
Los movimientos New Age de la segunda mitad del siglo XX influyeron de manera
determinante en la interpretación del libro de Sitchin. Por lo que muchas personas lo
tildan de farsante y manipulador por crear una falsa religión entorno al contenido de su
libro.
El trabajo de Sitchin ha sido desacreditado por científicos de todo el mundo debido a
que muchas de sus teorías están fuera del plano de las leyes de la física conocida. Por lo
tanto la comunidad científica niega la existencia de este planeta, y ha realizado
múltiples declaraciones en este aspecto.
A finales del siglo XX otro gnóstico colombiano llamado Joaquín E. Amórtegui
Valbuena mejor conocido como Rabolú escribió el libro “Hercólobus o planeta rojo”
en 1998. Por si ya no teníamos bastante con los plagios de sus antecesores, este escritor
y pseudocientífico se dedicó a repetir lo que el esoterista Samael Aun Weor dijo años
atrás. Que un planeta llamado Hercólobus se dirigía hacia la tierra y que su
acercamiento ocasionaría temblores, maremotos, agrietamientos, hundimientos y
cambio de los ejes terrestres. Como ya profetizaban los anteriores escritores, 1999 sería
el año de aproximación de dicho planeta. Despierta muchas suspicacias que el libro
20. 20
fuera publicado en 1998, justo un año antes de la fecha señalada por lo que muchos lo
tildan de “Pesetero”.
Cabe destacar que muchas fuentes de internet atribuyen erróneamente el nombre de
Hercólobus a este autor y a su libro pero como hemos comentado fue Hercilio Maes
quien lo citó por primera vez en la década de los sesenta.
Pasado el milenio otra nueva oleada de escritores profundizaron sobre el tema de
Ajenjo. Sin duda por lo novedoso podemos citar al escritor Andy Lloyd y su libro
“Estrella Oscura: Evidencia del Planeta X” del 2005. Andy compara el Planeta X con
una Estrella enana marrón oscura, un distante y no visto compañero binario de nuestro
Sol, varias veces más grande que el Planeta Júpiter, con un sistema planetario propio.
En este caso vemos una cierta influencia de Sitchin en buena parte de su libro aunque
con cierto matices. Para Andy un planeta que se comporta como un cometa en la
práctica no puede generar vida tal y como la conocemos según afirmaba Sitchin. La
vida se tendría que generar en el interior del planeta o como planeta Andy que un
planeta orbitara una estrella enana marrón que le proporcionara el calor necesario para
la vida. Según Andy la probabilidad de que el sol tuviera un gemelo oscuro era alta, tal
y como afirmaba el astrónomo Carl Sagan en su hipótesis sobre Némesis.
Poco tiempo después otros dos escritores Marshall Masters y Greg Jenner hablaron
sobre la llamada Biblia Kolbrin. No es una Biblia propiamente dicha. Se compone de 11
libros, los primeros 6 fueron escritos por académicos y escribas egipcios después del
éxodo. Los cinco libros restantes fueron escritos por los sacerdotes celtas de Gran
Bretaña después de la muerte de Jesús. Las obras completas fueron posteriormente
trasladadas a la abadía de Glastonbury, donde permanecieron hasta el siglo XII.
Realmente parece una Biblia paralela, ya que menciona detalles relevantes a ciertos
pasajes como el diluvio y el éxodo. Y nombra al Destructor como causante de ambos
eventos así como de futuros que han de venir. Realmente no se ha podido demostrar la
autenticidad de dicho documento pero es interesante saber cómo distintos autores de
distintas épocas dieron otra versión de lo que supuestamente ocurre cíclicamente en
nuestro planeta por causa de un cuerpo celeste desconocido.
El escritor Marshall Masters describe con todo tipo de detalle los distintos pasajes de los
manuscritos conservados. Proporciona correlaciones históricas sólidas a los hechos de la
ciencia que se informa en el Internet hoy.
Para demostrar este punto crucial de este escritor incluye tres sagas épicas extraídas de
la Biblia Kolbrin, entre ellos:
1-El hundimiento de Atlantis(patria de Egipto).
2-El Diluvio (Diluvio de Noé), que incluye una cuenta de Celtica del Diluvio.
3-El Éxodo (incluyendo el vuelo hacia la libertad).
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Es curioso observar como en las tres sagas el mismo objeto pasa causando catástrofes
similares. Lo que puede dar a entender que es un proceso cíclico y que tarde o temprano
volverá a suceder.
En el libro de los Manuscritos, El destructor, Parte 3 del Pergamino de Adepha,
Capítulo 5, párrafo 1 lo describe de la siguiente manera:
“El aspecto del Verdugo, llamado también el Destructor, fue visto en todo Egipto y sus
alrededores. Su color era brillante y fiero, y de apariencia cambiante e inestable. Se
retorcía alrededor de sí mismo, como el agua que entra burbujeante en una pileta por
un surtidor sumergido, y todos los que lo vieron atestiguan que era la visión más
horrible que se puede imaginar. No era sólo un gran cometa ni una estrella vagabunda
sino más bien un feroz cuerpo de fuego.”
Y en el párrafo 4:
“Este era el aspecto del Verdugo, llamado El Destructor, cuando apareció en días ya
pasados hace mucho tiempo, en época remota. Así quedó descrito en los antiguos
textos, de los cuales han quedado muy pocos. Se dice que cada vez que aparece en los
cielos, la Tierra abre su vientre por efecto del calor, como se abre una nuez asada al
fuego. Entonces las llamas explotan hacia arriba a través de la superficie del terreno y
sus lenguas lamen la vencidad, y los pastos, los cultivos y los árboles son consumidos
por las llamas quedando convertidos en blancas cenizas.”
Aunque vemos un cierto carácter literario en cada una de las descripciones. La esencia
de destrucción al paso de este objeto es evidente. No es de extrañar que ciertos autores
encuentren ciertas similitudes entre el paso de Ajenjo, las plagas de Egipto y la
activación del volcán Santorini durante el Éxodo.
El efecto 2012 y los Mayas tuvo un efecto notable en la supuesta venida de Ajenjo. En
multitud de libros y foros de internet se daba por hecho que la venida de dicho astro
tendría lugar el 21 de Diciembre del 2012.
El escritor e investigador turco Burak Eldem en libro “2012: cita con Marduk” este
escritor especulaba con el periodo orbital y la fecha de regreso de dicho objeto.
Cambiando datos de escritores anteriores para que parecieran propios. Sin duda el título
del libro ya hacía presagiar al lector que dicha fecha no había sido elegida al azar.
Se ha escrito mucho acerca de Ajenjo como se puede comprobar. Unas veces con el
mero propósito de divulgar información de interés. Pero en un cierto número de veces
por aprovechar un tirón mediático para enriquecerse como pudimos ver con el efecto
2012.
Quizás el hecho de hablar de algo desconocido que está documentado en textos antiguos
despierte la curiosidad de lectores amantes de libros con una temática de misterio y
esoterismo. La verdad que aunque cada escritor tiene su estilo y personalidad, la esencia
22. 22
misma de Ajenjo está en cada uno de los libros. Lo que nos puede hacer pensar que
aunque el género ciencia ficción pueda ser fruto de la imaginación de cada escritor, el
fondo mismo pueda tener una cierta realidad, en ocasiones desconcertante.
23. 23
PROFECÍAS
Cuando nos ponemos a buscar profecías podemos comprobar como la gran mayoría
hablan sobre el fin del mundo en una época de grandes cambios. Da igual en qué lugar
del mundo nos encontremos las profecías, todas parecen tener una cierta similitud y
confluir en una serie de acontecimientos que cambiarán la faz de la Tierra.
Yo siempre he creído que toda profecía sobre el fin del Mundo está basada en hechos
pasados que suceden cíclicamente. Nuevas eras aparecen como desaparecen las
sucesivas civilizaciones en su cúspide de evolución. No es de extrañar que los antiguos
mayas y aztecas basaran sus calendarios en dichos cambios de eras, las cuales predecían
a la anterior con una serie de catástrofes que “Purificaban” el planeta para la siguiente
era. Como si todo estuviera planificado de tal manera que las eras fueran pasando hasta
que “Un aviso” las reiniciara de nuevo.
Cuando hablamos de profecías es difícil poner una fecha determinada para “El evento”
pues la mayoría son interpretaciones subjetivas que hacemos de dichas profecías. No
tenemos en cuenta ni la forma metafórica de algunas de ellas ni los sucesivos cambios
que ha tenido nuestro actual calendario.
A lo largo de los siglos nuestro calendario ha sufrido muchas modificaciones y
cualquier fecha predicha en un pasado puede estar desvirtuada en el presente.
Conocemos con exactitud los acontecimientos ocurridos en un lapso de un siglo pero si
vamos retrocediendo en el tiempo podemos comprobar cómo existe una gran
inexactitud en fechas relevantes, por lo que nuestra apreciación cronológica de la
historia ha estado “Manipulada” por los distintos cambios de nuestro calendario y
pueden haber errores de años o incluso siglos si nos referimos ya a milenios atrás.
De esta forma las profecías hay que cogerlas con pinzas y no entrar en fechas exactas
sino en un periodo de tiempo, en señales y sucesos que nos estén dando a entender que
las profecías están dentro del lapso de tiempo que entendemos. No obstante en este
apartado intentaré dar una explicación más o menos lógica sobre a mi parecer cuál será
el periodo aproximado del “Evento”.
Todas las profecías son interesantes pero mencionarlas todas en este libro sería algo
insustancial, ya que el propósito del mismo es analizar el Planeta X en todos los
aspectos. Así que citaré las profecías que en mi opinión son relevantes. Es cierto que los
días de oscuridad también se nombran en la mitología y el folclore popular del pasado.
Pero considero más productivo citar las profecías que mencionan señales en el cielo.
Uno de los más famosos profetas de todos los tiempos fue Nostredamus. Fue un médico
y consultor astrológico provenzal de origen judío, considerado uno de los más
renombrados autores de profecías. Desde la publicación del libro, muchas personas se
han visto atraídas por sus misteriosos versos (comúnmente escritos en cuartetas). La
mayoría de sus seguidores afirman categóricamente que Nostradamus predijo todas las
24. 24
catástrofes del mundo, desde su época hasta la fecha en que supuso que acontecerá el fin
del mundo.
En contraste, muchas de las fuentes científicas afirman que la relación que existe entre
los eventos mundiales y Nostradamus es resultado de las traducciones e interpretaciones
tendenciosas, con la finalidad de que coincidan plenamente con los acontecimientos que
ocurren día a día.
En relación con el Ajenjo no escribió ninguna que lo mencionara directamente, pero sí
menciona un futuro cataclismo cósmico. Quizás la profecía que más se acerca podría ser
la 996 que dice así:
“La Luna oscurecida en profundas tinieblas
Su hermano pasará a estar de color ferruginoso,
El grande oculto largo tiempo bajo tinieblas,
Entibiará hierro en la presa sanguinolenta.”
Sin duda se le podría dar un sinfín de interpretaciones, así como figuras literarias, pero
profundizando en el tema se puede ver como hace mención a la Trinidad babilónica Sol,
Luna y otro objeto celeste que se oculta largo tiempo. “El grande oculto largo tiempo
bajo tinieblas” podría interpretarse como que su órbita dura miles de años y durante
mucho tiempo está en los confines del Sistema Solar. También se deduce que dicho
objeto tiene grandes dimensiones pero no especifica si es una Enana Marrón, Un Planeta
o Cometa. Está hablando del regreso de algún objeto cósmico, quizás Ajenjo, por lo que
aunque dicha predicción tiene fuertes connotaciones cristianas. El profeta deja intuir que
pasa cíclicamente, y que a su paso causará grandes catástrofes.
En la Centuria X LXXII
“El años mil novecientos noventa y nueve siete meses,
Del cielo vendrá un gran rey de terror,
Resucitar el gran Rey de Algolmois,
Antes después de Marte reinar por dicha.”
Muchos han dado a esta profecía en el pasado el temido fin del mundo del cambio de
milenio pero como hemos dicho no sabemos si dicha profecía tiene otro tipo de
connotaciones. El hecho que diga una fecha no es significativo si tenemos en cuenta que
a lo largo de los siglos los calendarios han ido variando de tal manera que no sabemos
respecto a qué calendario está reflejado. Que se nombre “Marte” quizás es relevante a
una gran guerra que no se ha producido todavía y esté dando pinceladas a que el regreso
del gran rey de terror estará precedido por la guerra. En la antigüedad al Sol se le
denominada gran rey en algunos contextos. Así que es posible que se refiera a Ajenjo
25. 25
como un segundo sol en su regreso. Una apreciación mía por supuesto todos son meras
conjeturas e interpretaciones subjetivas.
En la Centuria X LXVII
“El temblor tan fuerte en el mes de Mayo.
Saturno, Capricornio, Júpiter, Mercurio en el buey,
Venus también can Cáncer, y Marte en Nonato,
Caerá granizo entonces mayor que un huevo.”
Nos habla de un inmenso terremoto en un mes en concreto. Quizás esté algo encriptado
dicho mensaje, ya que las líneas siguientes posiblemente hablen de una conjunción o
alineación cósmica que tiene que producirse en un futuro. Sus consecuencias recuerdan
a una de las míticas plagas de Egipto por lo que vuelve a recordarnos su carácter
cíclico.
En la Centuria IX LXXXIII
“Sol veinte de Tauro tan fuerte tierra tiembla,
El gran teatro repleto arruinará,
El aire cielo y tierra oscurecidos y perturbados,
Cuando al infiel Dios y santo arrollarán.”
Como en la cuarteta anterior nos habla de un cataclismo en una conjunción cósmica
determinada que ocasionará grandes terremotos y una oscuridad que recuerda a los
citados tres días de oscuridad pero sin especificar el tiempo de dicha oscuridad en la
profecía.
Centuria VIII XVI
“En el lugar que Hierón hizo su nave fabricar,
Tan gran diluvio será tan súbito
Que no habrá lugar ni tierras donde refugiarse,
La ola subirá Fesulano Olímpico.”
En esta cuarteta está recordando claramente al diluvio de Noé, una connotación
religiosa. Pero al ser en forma de profecía nos está recordando que los días pasados
ocurrirán en un futuro. Nos vuelve a recordar el carácter cíclico de las catástrofes. En la
cuarteta nos menciona “Ola” en singular, no hay múltiples olas sino una única ola.
Quizás se refiera a la Ola de marea, es decir, que el nivel del Mar va subiendo
26. 26
súbitamente debido a las mareas o a la atracción de un gran astro como ocurre con la
luna llena.
Centuria III XXXIV
“Cuando la falta de Sol sea.
En pleno día el monstruo será visto,
De otra manera se le interpretará,
Carestía no importa, nadie lo habrá previsto.”
Una cuarteta muy interesante, ya que nos habla de un ocultamiento del Sol, no sabemos
si por la oscuridad del cielo o por un determinado eclipse. “El Monstruo” tiene
connotaciones claramente negativas en referencia a alguna señal en el cielo. Ya
sabemos que el folclore antiguo dio distintas formas negativas en cuanto a la forma y
apariencia de Ajenjo. Algunos dijeron que tenía forma de serpiente, otros de dragón
pero se ve que ambas apariencias tienen connotaciones no demasiado buenas porque
produce grandes catástrofes. Quizás el hecho que diga que se le interpretará de otra
manera pueda deberse a que para que no cunda el pánico se diga que es un cometa
pasajero, alguna estrella o incluso algún planeta brillante como Venus, Marte o Júpiter.
Los textos bíblicos tienen referencias de este objeto que vaga por el espacio exterior. El
anuncio de cataclismos asociados a la llegada de un fenómeno espacial de
características extraordinarias, lo encontramos relatado en las profecías de Daniel y
luego en el Apocalipsis 8,9,10.
“Tocó, pues, el primer ángel la trompeta, y se formó una tempestad de granizo y fuego,
mezclados con sangre, y descargo sobre la tierra, con lo que la tercera parte de la
tierra se abrasó, y con ella se quemó la tercera parte de los árboles, y toda la hierba
verde.
El segundo ángel tocó también la trompeta, y se vio caer en el mar como un grande
monte todo de fuego, y la tercera parte del mar se convirtió en sangre, y murió una
tercera parte de las criaturas que vivían en el mar, y pereció la tercera parte de las
aves. Y el tercer ángel tocó la trompeta, y cayó del cielo una grande estrella, ardiendo
como una tea, y vino a caer en la tercera parte de los ríos, y en los manantiales de las
aguas, y el nombre de las estrellas es Ajenjo, y así, la tercera parte de las aguas se
convirtió en ajenjo; con lo que muchos hombres murieron a causa de las aguas, porque
se hicieron amargas.
Después tocó la trompeta el cuarto ángel, y quedo herida la tercera parte del Sol, y la
tercera parte de la luna, y la tercera parte de las estrellas; de tal manera que se
oscurecieron en su tercera parte, y así quedo privado el día de la tercera parte de su
luz, y lo mismo la noche...”.
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El quinto ángel toco la trompeta, y vi una estrellas del cielo caída en la tierra, y diósele
la llave del pozo del abismo, y abrió el pozo del abismo; y subió del pozo un humo
semejante al de un grande horno, y con el humo de este pozo quedaron oscurecidos el
sol, y el aire...”-
Son muchas las fuentes bíblicas y proféticas referentes a sucesos cósmicos y
astronómicos alrededor de un astro desconocido. Esto indicaría que los antiguos
profetas sabían de las leyes de las estrellas que no sabemos hoy y que intentaban
representar esta sabiduría en los escritos religiosos de una forma un poco encubierta.
Así sirva de ejemplo en el Libro de Job Capítulos 38 podemos leer:
“38:31 ¿Podrás tú atar los lazos de las Pléyades,
O desatarás las ligaduras de Orión?
38:32 ¿Sacarás tú a su tiempo las constelaciones de los cielos,
O guiarás a la Osa Mayor con sus hijos?”
También son muchas las referencias bíblicas que describen el paso de Ajenjo cerca de
nuestro planeta y sus consecuencias. El libro de Isaías en su capítulo 9-16 tenemos
algunas de ellas.
“Porque las más resplandecientes estrellas del cielo no despedirán la luz
acostumbrada; se oscurecerá el Sol al nacer y la luna no alumbrara con su luz... Por
eso haré temblar el Cielo y se moverá la Tierra de su lugar…las montañas se
derretirán...los valles se agrietarán”.
Otra referencia En San Lucas capítulo 21:
“25. Entonces habrá señales en el sol, en la luna y en las estrellas, y por toda la tierra
los pueblos estarán llenos de angustia, aterrados por el estruendo del mar
embravecido.
26. La gente se morirá de espanto con sólo pensar en lo que va a caer sobre la
humanidad, porque las fuerzas del universo serán sacudidas.”
En San Marcos y San Mateo 24:
“29 Inmediatamente, después de la tribulación de aquellos días, el sol se obscurecerá y
la luna no dará su brillo, las estrellas caerán del cielo y el mundo de los astros se
desquiciará.
30 Entonces aparecerá en el cielo la señal del Hijo del hombre, y se golpearán el pecho
todas las tribus de la tierra y verán al Hijo del hombre venir sobre las nubes del cielo
con gran poder y gloria.
31 Y enviarán a sus ángeles con potente trompeta, para que reúnan a sus elegidos
desde los cuatro vientos, de un extremo a otro de los cielos.”
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Mateo encuentra, pues, en el Antiguo Testamento que el día de Yahvé, se anunciaría
con un eclipse de sol y las consiguientes tinieblas. El astro rey se oscurecería ante la
intervención de Yahvé. Si concretamos que para los hebreos Ajenjo era Yahvé podemos
deducir que lo que intentan decirnos es que habrá un eclipse de sol por un objeto celeste
distinto a la Luna, Ajenjo.
El profeta Joel también da referencias (Jl. 3:12-18):
“El sol y la luna se oscurecerán, y las estrellas retraerán su resplandor. Y Jehová
rugirá desde Sión, y dará su voz desde Jerusalén, y temblarán los cielos y la tierra…”
En el Libro del profeta Amós (Am 8,9):
“Sucederá en aquel Día, dice el Señor Dios, que haré ponerse el Sol al mediodía y
oscureceré la Tierra en mitad de la mañana.”
En Zacarías 14:
“Y sucederá en aquel Día…que no habrá luz, sino frío y hielo… Y habrá un día,
conocido sólo del Señor…que no habrá día ni noche… cuando en la tarde habrá luz.”
Son muchas las referencias a cambios drásticos en el planeta al aparecer unas señales en el
cielo. Si quitamos el simbolismo divino podemos concretar que se refiere a señales
astronómicas que afectan a nuestro planeta. En muchas referencias bíblicas se comenta que el
sol y la luna se oscurecerán. Si bien son citas bíblicas, hacen alusión a un determinado tipo de
eclipse. La luna y el sol no pueden oscurecerse al mismo tiempo, tiene que haber otro objeto que
se interponga o que influya en cierta manera produciendo dicho efecto. También se podría
interpretar como que se detuvo el movimiento de rotación de la Tierra por un lapso de tiempo
determinado. Son muchas las posibles interpretaciones que se le puede dar así que son meras
conjeturas.
Quizás esos tres días de oscuridad que menciona el Éxodo durante las plagas que azotaron
Egipto tengan alguna relación con el paso de este Objeto. Es posible que dicho tiempo de
oscuridad tenga un nexo de unión con Ajenjo. Son muchas culturas en distintas partes del
mundo las que se hacen eco de tiempos oscuros y grandes calamidades venidas del cielo.
Otro profeta, quizás menos conocido que Nostredamus fue Edgar Cayce. El profeta Edgar
Cayce, conocido popularmente como “El Profeta Durmiente”, desde muy temprana edad
desarrolló una impresionante capacidad de videncia y habilidades psíquicas, al entrar a un
estado de trance o de hipnotismo donde era capaz de predecir con exactitud eventos futuros.
Edgar Cayce predijo gran número de profecías referente a cambios en nuestro planeta por
ejemplo:
“Tierras que son cálidas se volverán heladas, y tierras cubiertas por el hielo se
volverán tierras cálidas.”
“Los grandes cambios mundiales ocurrirán en el lapso de una generación. Los cambios
comenzarán en forma lenta. Más tarde, se verá un aumento en la intensidad, de los
terremotos y cambios en el clima como las tormentas violentas y sequías.”
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“Uno de los signos del comienzo de este período es el movimiento de masas de tierra en
el Océano Pacífico, con simultánea actividad en el Mar Mediterráneo y Monte Etna en
Sicilia. Esto marcará el comienzo de los cambios en gran escala.”
Pero quizás la más relevante pueda ser la siguiente:
“Los cambios se desatarán por la llegada de un cuerpo celeste al Sistema Solar.”
Claramente nos dice que los grandes cambios serán ocasionados por la llegada de un
cuerpo celeste. Podemos deducir que al entrar a nuestro Sistema Solar nos esté diciendo
que su órbita es amplia y de larga duración. Que es un objeto que pasa largos periodos
de tiempo fuera de nuestro sistema solar pero que regresa cíclicamente.
Uno de los profetas más relevantes de nuestro tiempo más reciente fue Benjamín Solari
Parravicini un pintor y escultor argentino. También es conocido por una serie de
dibujos proféticos que realizó a lo largo de su vida.
Mientras dibujaba y pintaba en su estudio, comenzó a pensar ideas espontáneas, frases y
dibujos que para él no tenían sentido y que escribió en papel. Siendo católico destruyó
muchos de estos dibujos porque no creía en ellos. Solari declaró en varias oportunidades
que al realizar estos dibujos, oía una voz y sentía que su mano era guiada.
Tiene en su haber distintas profecías sobre el fin del mundo y los cambios terrestres
pero quizás las más relevantes en cuanto a cambios debido a objetos celestes sean las
siguientes:
"Llegará un cometa desconocido. Pax".1939
"Cae sobre la tierra el día 5 del 5 de cincos el golpe de fuego estelar. Caerá en las
regiones del Gibraltar y de las islas Baleares.
Tres días allí dos en América del Norte, y por fin un día de cinco horas en las Antillas.
El fuego purificará". (BSP 1938)
"Llegará la hora de las horas, y en su oscuridad, recibirá el choque del gran planeta.
Trastocará así la tierra. Todo caerá". (BSP 1939)
Una de las más claras es además la que, en definitiva, resume todo lo referente a Ajenjo
y sus consecuencias al paso cerca de nuestro Planeta.
"Un planeta será herido por un planeta apagado que rueda los espacios. Ese planeta
será la tierra. La herida en el choque será en la parte sur del hemisferio Norte y
arrancará gran parte de su colofón. Entonces el mundo tierra en el sacudimiento dará
un volcón igual al que dio cuando le fue arrancado el trozo de "América del Sud" hoy
llamado en el alto "Suna". De nuevo el diluvio de nuevo la oscuridad, de nuevo el eje
en su lugar, de nuevo el rodar y un nuevo mar en el foso dejado, y de nuevo otra luna
que brillará más. La Amnis", en latín, Amnis = Río. (BSP1938).”
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En esta profecía nos habla directamente de “choque”, que el objeto celeste impactará
contra nuestro planeta. Pero no sabemos si dicho impacto es debido a la interacción de
ambos objetos por el diferencial de gravedad y masa de los distintos planetas. Que lo
denomine “planeta apagado que rueda los espacios” puede intentar decir que es una
Enana Marrón que apenas emite luz o un tipo de objeto celeste que desconocemos de
gran masa pero que es tan oscuro que sólo se puede ver reflejado en nuestro propio sol.
Y nos deja entrever que su amplia órbita le permite rodar por los espacios, no sólo por
nuestro sistema solar.
De nuevo otro profeta que nos hace referencias bíblicas claras, como queriendo decir
que las advertencias están escritas en nuestra historia y que si sabemos interpretar las
señales del cielo sabremos cuando será el día sin necesidad de poner fechas a los
eventos.
Rasputín fue un místico ruso con una gran influencia en los últimos días de la Dinastía
Romanov. También fue conocido como “El Monje Loco” que hizo una serie de
profecías apocalípticas. Quizás La profecía que nos interesa de este curioso profeta es la
siguiente:
“Lágrimas del Sol caerán sobre la Tierra como chispas de fuego, quemando a personas
y plantas…Un gran dragón derramará mucha sangre”, son las palabras que anuncian
la llegada de un nuevo Juicio Final.”
Vemos de nuevo la figura del dragón personificada en el cielo en los tiempo finales,
quizás las lágrimas del sol quieran decir algún tipo de escombro espacial que
incandescente atraviese nuestra atmósfera y caiga en forma de bola de fuego, tal y como
sucede con los distintos bólidos que se están observando últimamente caer a la Tierra.
Otro profeta del siglo XII muy poco conocido fue San Hildegaro, él vaticinó que:
"Antes de que el cometa llegue, muchas naciones, exceptuadas las buenas, serán
azotadas por el deseo y el hambre. La gran nación en el océano que está habitada por
gente de diferentes tribus y descendencias será desbastada por un terremoto, tormentas
y una gran marejada. Esta será dividida y, en gran parte sumergida. Esa nación
también tendrá muchos infortunios en el mar y perderá sus colonias"
En esta profecía ya nos menciona el objeto celeste que surca los cielos, un cometa. Y
nos narra los efectos previos al pasaje de dicho cometa que perfectamente se puede
situar en nuestra actualidad o en años no muy alejados a nuestra época.
Quizás el mago Merlín sea conocido como personaje de ficción pero en verdad es que a
este enigmático personaje se le atribuyen numerosas profecías. Las cuales escribió cerca
del año 400 de nuestra era. Las que fueron atribuidas al mago Merlín, fueron
recopiladas por Volta en el año 1450.
“El dragón aparecerá entre los mortales al finaliza el año 2000. Parecerán victoriosos, llenos de
honra, Pero será bueno que los hombres mantengan la mirada fija sobre la Toscaza, porque
31. 31
será de ese lado que aparecerá el dragón. Allí serán sacrificadas las vírgenes. El litoral
de Cartago será tragado por el mar y se desfigurarán otras tierras. Es el tiempo del
dragón de Babilonia.
Cuando el dragón de Babilonia llegue al fin, muchas señales saltarán de la tierra
africana. Las ciudades de los seguidores del dragón serán destruidas.
Próximo el fin del mundo, cuando el sol y la luna cambiarán, los grifos vendrán a
comer trigo. Los países estarán llenos de lágrimas. El sol se demorará en el Este y la
luna en el Occidente; y ellos no seguirán más su curso. En ese momento en que los
hombres y mujeres tendrán los niños más raramente., las personas perderán la fe y el
mundo será sumamente malvado: Los pequeños se apretarán. Los grifos volarán en
Egipto.
Próximo el fin del mundo, el Papa y los Cardenales tendrán que huir de Roma hacia un
lugar donde ellos pasarán inadvertidos, bajo circunstancias difíciles. Él morirá de una
manera cruel en su sufrimiento, en el exilio. Los sufrimientos de la iglesia serán
mayores que en cualquier tiempo pasado.”
En el libro “Los profetas del Bosque” de Jose María Sánchez de Toca también se
menciona en distintas profecías sucesos en el cielo que vaticinan el final de los tiempos.
Cesareo de Heisterbach vaticinó que:
“Aparecerán en el cielo muchas señales espantosas: el sol se oscurecerá y aparecerá
de color de sangre a gran número de personas.”
“Durante cuatro horas se verán dos lunas juntas rodeadas de cosas sorprendentes y
admirables. Muchas estrellas chocarán unas con otras, señal de la destrucción y de la
matanza de muchos hombres.”
El Stomberger vaticinó que:
“Habrá una señal en el cielo y vendrá un señor muy severo que sacará le piel a tiras a
la pobre gente…Pero no durará mucho, pues cuando todo esto haya ocurrido, entonces
vendrá el gran desescombro.”
“De todos los espantos el último será el desescombro de los bancos. Cuando caiga la
gente de los bancos como moscas de la pared empieza el último tiempo. Será terrible.”
El Mühlhiast, el segundo gran profeta del bosque de Baviera vaticinó:
“Sólo veía tres épocas en el siglo XX, de las cuales la última terminaría con el
desescombro de los bancos y una última guerra.”
“Ya no se distinguirán verano e invierno…no durará mucho puesto que vendrán
veranos cortos…habrá una señal en el cielo”.
El párroco bávaro Francisco de Sales Handwercher vaticinó que:
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“Vi una espantosa señal de fuego en el firmamento. Desde la más profunda lejanía del
cielo colgaba de las estrellas algo parecido a un mantel. Del paño subían niebla, humo
y llamas y de repente todo el paño tomó forma de una viga. En uno de los extremos
tenía una corona, pero en el otro vi que colgaba el azote de Dios. Durante mucho
tiempo vi brillar la viga horizontalmente en el cielo; pero cuando el azote subió
lanzaba rayos de fuego que caían. Finalmente se la vio convertirse en una espada de
guerra que se alzó roja de sangre sobre ciudades y países…”
Francisco Kugelbeer vaticinó que:
“Aparece una cruz en el cielo. Es el fin de las tinieblas…tres días y tres noches de
oscuridad. Un terremoto empieza a tronar terriblemente. NO arde ningún fuego. No se
puede comer ni dormir, sino solamente rezar. Los rayos entran en las casas, y se oyen
las atroces maldiciones de demonios. Terremotos, truenos, bramidos del mar…”
Alois Irlmaier vaticinó que después de la gran guerra (3ª Guerra mundial):
“Un rayo cegador, junto con un formidable trueno darán comienzo a la catástrofe. Al
mismo tiempo, terribles terremotos sacudirán la Tierra. Del cielo caerán pesados
fragmentos de roca mezclados con pedazos de hielo que lo aniquilarán todo…”
Gottfried von Werdenberg, el labrador de Waldviertel vaticinó que:
“Las estrellas caen como hojas”…”Estamos esperando, mirando algo en el cielo.
Entonces veo que el sol se oscurece. Todos creían que veían las estrellas. Pero en
realidad se trata de una especie de brasas, como millones de bolas relucientes al rojo
blancos que caen sobre nosotros. Caían al suelo empezando por oriente y tomaban
color amarillento y luego rojizo…”
“En pleno día cae lluvia de rayos. Cae y Cae y arden todas las construcciones, hierba y
todo lo que puede arder…sólo sobreviven las pocas personas que se sentaron en el
Búnquer…Lo que vi solamente se puede explicar cómo el estallido de la corteza
terrestre. Vi un relámpago deslumbrante. Luego, desde miles de partes de las alturas a
las que fueron arrojadas, caen de vuelta a la Tierra y parecen como las ramas
colgantes de un poderoso abedul. El terremoto es tan fuerte que la tierra tiembla de un
modo indecible. La tierra tiembla y se mueve un día entero…”
Son frecuentes las profecías y el folclore popular en las tribus indígenas. En el libro
“Profecías Nativo americanas y Cuentos de los Tiempos Finales”, del doctor Robert
Ghost Wolf, 1994-2004 Se narra la historia de las Katchinas. Ellos hablaron de Cambios
Terrestres y de ‘Tormentas de Fuego’ en los días finales y dispongo aquí de un extracto
de esta profecía o cuento tan popular por internet:
“El regreso de la Estrella Katchina Azul, que es también conocida como Nan ga
sohu será el despertador que nos diga del Nuevo día y de la nueva manera de vida, el
nuevo mundo que está viniendo. Aquí es donde comenzarán los cambios. Comenzarán
como fuegos que arderán dentro de nosotros, y nosotros arderemos con deseos y
33. 33
conflicto si no recordamos las enseñanzas originales, y volvemos a las maneras
pacíficas de vida…”
No muy lejos detrás de los mellizos vendrá el Purificador – La Katchina Roja, que
traerá el Día de Purificación. En este día la Tierra, sus criaturas y toda vida tal como la
conocemos cambiarán para siempre. Habrá mensajeros que precederán esta venida del
Purificador. Ellos dejarán mensajes para aquellos en la Tierra que recuerdan las Viejas
maneras. “Los mensajes serán encontrados escritos en la piedra viva, a través de los
granos sagrados, y aun las aguas…”
“Al irnos acercando al tiempo de la llegada del Purificador estarán aquellos que
caminan como fantasmas a través de las ciudades, a través de las barrancas que
habrán construido en sus montañas hechas por el hombre…“Cuando venga
el Purificador nosotros lo veremos primero como una pequeña Estrella Roja, la cual
vendrá muy cerca y se sentará en nuestros cielos, observándonos. Observándonos para
ver lo bien que nosotros recordamos las enseñanzas sagradas…”
“Este purificador nos mostrará muchas señales milagrosas en nuestros cielos. De esta
manera sabremos que el Creador no es un sueño. “Recibiremos muchas advertencias,
permitiendo que cambiemos nuestras maneras de debajo de la Tierra así como sobre
ella. Entonces, una mañana, en un momento, despertaremos al Rojo Amanecer. El cielo
será del color de la sangre, muchas cosas, entonces, comenzarán a ocurrir, que en este
momento no estamos seguros de su naturaleza exacta, puesto que mucho de la realidad
no será como lo es ahora…
“Habrá muchas bestias extrañas sobre la Tierra en esos días, algunas del pasado y
otras que nunca antes habíamos visto. La naturaleza de la humanidad parecerá extraña
en esos tiempos, nosotros caminamos entre los mundos y habitaremos muchos espíritus,
aun dentro de nuestros cuerpos…”
Habiendo leído multitud de profecías he llegado a la conclusión en varias cosas. La
primera que la mayoría de ellas hablan de tres guerras mundiales que traerán muerte y
destrucción al mundo, sabemos que dos han ocurrido ya pero la tercera según las
profecías sería la peor de todas y no ha ocurrido aún. La segunda que en los días finales
el mundo estaría teñido de días de oscuridad. Concretamente tres días de oscuridad que
envolverán al mundo en los días finales. Y por último que después de dicha guerra una
señal en el cielo provocará un cataclismo global.
Es bastante curioso como distintas profecías hablan también del descalabro de los
Bancos en los tiempos finales. Y es algo inequívoco que las deudas mundiales que se
están acumulando actualmente son impagables y que tarde o temprano todo el sistema
caerá en una recesión financiera sin precedentes.
De todas formas lo que más intriga me causa es que el tiempo va pasando y, habiéndose
cumplido o no todas las profecías, resulta curioso que no queden tantas en el tintero a
34. 34
estas alturas. Podemos analizar las distintas profecías de cualquier sujeto, ya sea
conocido o no, y siendo objetivos estamos llegando a un tiempo en el que toda
confluyen a un mismo punto. Como si la acción del ser humano sea tan predecible en el
tiempo que determinadas personas supieran que tales acciones iban a ocurrir en un
futuro. O quizás todo esté orquestado de tal manera que determinadas manos guíen al
ser humano a tal destino final.
35. 35
APARIENCIA
La apariencia de Ajenjo ha sido descrita en multitud de escritos y narrada por el folclore
popular en las distintas partes del mundo. Según Sitchin, el signo pictográfico del
Duodécimo Planeta, “Planeta del Cruce” era una cruz. Este signo cuneiforme, que
también significa “Anu” y “divino”, evolucionó en las lenguas semitas hasta la letra
“tav” que significaba la señal.
(Algunos ejemplo en la antigua babilonia)
(Shamash el dios babilónico portando la misma cruz usada por el Papa Católico miles de años antes del Cristianismo)
36. 36
Reconocido como un gran viajero en los cielos, remontando el vuelo hasta las inmensas
alturas de su apogeo, para, después, bajar curvándose en el Cielo de su perigeo, se
representó al planeta como un Globo Alado.
Donde quiera que los arqueólogos descubrieran restos de pueblos de Oriente Próximo,
el símbolo del Globo Alado aparecía, dominando templos y palacios, tallado en las
rocas, grabado en sellos cilíndricos, pintado en las paredes. Acompañaba a reyes y
sacerdotes, se colocaba por encima de sus tronos, se cernía por encima de ellos en los
escenarios de las batallas, se grababa en sus cuadrigas. Objetos de arcilla, metal, piedra
y madera se adornaban con este símbolo. Los soberanos de Sumer y Acad, de Babilonia
y Asiría, de Elam y Urartu, de Mari y Nuzi, de Mitanni y Canaán, todos, reverenciaban
este símbolo. Reyes hititas, faraones egipcios, persas, todos, proclamaban la supremacía
del símbolo. Los sietes sellos representados por Zoltan Andrew Simon en Atlantis son
un buen comparativo.
a) Sur América
b) Tolteca
c) Azteca
d) Maya
e) Babilonia
f) Egipto
g) Irán
Zecharia Sitchin ha descrito las ceremonias realizadas por los sacerdotes
mesopotámicos durante el adviento de Nibiru en los cielos. Los textos acadios que cita
señalan la presencia simultánea de “Los discos solares”. Estas referencias hacen
alusión a los discos del Sol y Ajenjo, representado como un segundo sol, en su estado
de excitación al perihelio.
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También representado en piedras conmemorativas como la del templo de Marduk.
También se representa en multitud de culturas como la Trinidad babilónica Nimrod,
Semiramis y Tammuz. Para ese tiempo ya en Babilonia era una vieja historia la idea de
tres dioses juntos. Algunas de las representaciones más claras de los símbolos celestes,
que fueron meticulosamente copiadas por Henry Rawlinson, asignan la posición más
prominente a un grupo de tres símbolos que significan al dios Anu flanqueado por sus
dos hijos Enlin y Enki.
En ocasiones también se representaba a su tercera hija Ninharsag en forma de cortador
umbilical.
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Otra piedra de origen mesopotámico del museo británico muy famosa en el mundo de
internet y representada en multitud de libros. Ésta muestra tres símbolos, otra trinidad,
el sol, la luna y otro objeto. Los académicos dicen que los símbolos pueden representar
a Venus (Diosa Ishtar), la Luna (Dios Sin) y el sol (Dios Shamash).
TRINIDAD
Hay una trinidad clara de los objetos celestes sol, luna y un tercer objeto celeste. Cabe
destacar la presencia de la deidad babilónica Marduk más debajo de la representación,
una deidad estrechamente asociada con Ajenjo. Es interesante comparar esta imagen
con un dragón alquímico después, Azoth, con sus dos soles y una luna, que se muestra a
la izquierda. Las similitudes son aún más cuando se tiene en cuenta la presencia del
dragón o serpiente en sí. En ambos casos, la serpiente parece el Dragón Cósmico,
equivalente a la deidad Kematef en la mitología Egipcia y otras tantas a lo largo del
planeta.
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Todas las antiguas escrituras señalan una estrecha relación entre el sol y la Serpiente. La
serpiente es símbolo de la destrucción y la catástrofe. No es de extrañar que en todas las
culturas la serpiente funcione como un símbolo de fuerzas cósmicas y como metáfora
del renacimiento y renovación espiritual. Una ilustración de Vicenzo Cartari puede dar
un ejemplo claro de la simbología de la serpiente con los dos soles, uno parecido al
nuestro y el otro con un tono marrón.
Los mayas asocian a la serpiente una antigua catástrofe, en el capítulo cinco del Chilam
Balam podemos leer lo siguiente:
“Esto aconteció cuando la Tierra empezó a despertar, nadie sabía lo que iba a suceder.
Una lluvia copiosa corrió hacia abajo y cayeron cenizas. La gran serpiente de los
cielos provocó que las rocas y los árboles se estrellaran contra el suelo. La gran
serpiente se quebró en el cielo y los restos de su piel y huesos cayeron a la Tierra.
Después de eso las aguas se elevaron en una gran inundación y el cielo cayó...”
En las Revelaciones de Juan de la Biblia lo describen como:
“Un Dragón rojo, con siete cabezas, diez cuernos y siete coronas sobre sus cabezas...”
Sin duda la Biblia Kolbrin da una descripción quizás más de acorde con la realidad.
“El Verdugo, es como una bola de fuego que circunda que dispersa pequeñas crías de
fuego en su tren. Cubre alrededor de una quinta parte del cielo y envía retorciéndose,
los dedos de serpiente a la Tierra…se enrolla como si fuera una bobina...No fue un
gran cometa o una estrella desprendida, siendo más como un feroz cuerpo de fuego…”
Otro gran ejemplo del Destructor proviene de la mitología china. Los chinos tienen una
antigua tradición de un dragón celestial persiguiendo una perla roja dentro de las nubes.
Esta joya única tiene llamas se elevan desde la superficie ardiente y siempre está
conectado de alguna manera con el cuerpo del dragón.
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Las leyendas del pasado son folklore, pero la similitud de motivos desde cinco
continentes e islas del Océano Pacífico son contundentes; brujas sobre escobas, el
dragón y el escorpión, un animal con muchas cabezas y un cuerpo alado, una mujer
cuyos velos fluyen detrás de ella, estas imágenes son mitos cósmicos universales
registrando las formas características poseídas por cometas.
La leyenda de la batalla cósmica de los dioses planetarios es familiar a todos nosotros.
En otros mitos, la batalla era entre Bel y el Dragón, Marduk y Tiamat, Isis y Seth,
Vishnu y la Serpiente, y Zeus y Tifón. En las épicas homéricas, los griegos escogen a
Atenas/Venus como su protector, los troyanos escogieron a Ares/Marte. Una situación
similar existió en antiguo México. Los Toltecas adoraban a Quetzlcoatl/Venus, pero los
aztecas más tarde reverenciaban a Huitzilopachtil/Marte. La identidad, conflicto y
características de los dioses planetarios son consistentes a través del antiguo mundo. Las
crónicas chinas registran a dos soles batallando en el cielo, y el disturbio que causó en
los otros planetas. Marte fue perseguido por Venus, la Tierra se sacudió, montañas que
brillaban intensamente colapsaron.
Según Velikovsky cuando los antiguos vieron al gran cometa interactuar eléctricamente
con Marte y eliminar su atmósfera, vieron una enorme serpiente de filamento que se
extendía desde el cometa a Marte y las auroras en la atmósfera superior que rodeaban
Marte hicieron parecer como si una serpiente cósmica amarrara Marte en su boca. El
registro histórico es rico con este simbolismo de la destrucción de Marte, visto por los
habitantes de la Tierra.
Las grandes descargas eléctricas de fuerza interplanetaria son conmemoradas en las
tradiciones, leyendas y mitologías de las naciones de todo el mundo. Dios - Zeus de los
griegos, Odín de los nórdicos, Ukko de los finlandeses, Perun de los paganos rusos,
Wotán de los germanos, Mazda de los persas, Marduk de los babilonios, Shiva de los
hindúes se describen esgrimiendo rayos en sus manos, y se describe al dios descargando
sus rayos sobre el mundo acosado por las aguas y el fuego.
Sahagun, la gran autoridad en asuntos mexicanos del siglo XVII, apuntó que los
mexicanos llamaban cometa a "Un planeta que echa humo". Se puede concluir que
puesto que los mexicanos llamaban a Venus " La estrella que humea " la consideraban
un cometa.
También está consignado en los Vedas que la estrella Nibiru se ve como una braza que
humea. Aparentemente la estrella tenía cola, oscura durante el día y refulgente por la
noche. En forma muy específica esta cola refulgente que Nibiru presentaba en épocas
pasadas, se menciona en el Talmud , en el Tractate Shabbat :
"Cuelga fuego del planeta Nibiru".
Este fenómeno fue descrito por los Caldeos. Se decía que el planeta Nibiru "Tenía
barba". En moderna astronomía se usa la misma expresión técnica (barba) en la
descripción de los cometas. No es entonces extraño que los caldeos lo describieran
41. 41
como "La brillante antorcha del cielo", y también como "El diamante que alumbra
como el Sol", y que compararan su luz con la del Sol naciente. “Un notable prodigio
celestial" lo llamaron los caldeos.
Los hebreos similarmente describen a Nibiru:
"La brillante luz de Nibiru brilla desde un extremo al otro del cosmos".
Y el texto de astronomía china de Soochow se refiere al pasado cuando comenta:
"Nibiru era visible a plena luz del día y, al moverse en los cielos, rivalizaba en brillo
con el Sol ".
En el siglo VII el rey Ashurbanipal escribe acerca de Nibiru (Ishtar):
"Quien va vestido con fuego y barbas saliendo de una corona de total esplendor".
Los egipcios bajo el reinado de Seti escriben acerca de Nibiru (Sekhmet):
"Una estrella viajera que disipa su llama en el fuego. . . una llama de fuego en su
violencia".
Con su cola y trayecto no circular, Nibiru era más un cometa que un planeta, llamado
“La estrella humeante" por los mexicanos. También lo designaron como
Tzontemocque, o "Crin de caballo". Los árabes llamaron a Ishtar (Nibiru) por el
nombre de Zebbaj o "El peludo", tal como hicieron los babilonios.
Plinio escribió:
"Los planetas a veces tiene cabellos".
Pero la apariencia de cabello es algo característico de los cometas, de hecho la palabra
cometa se deriva de la expresión griega para "Cabello". La palabra peruana "Chaska"
(cabello desordenado) es todavía allí el nombre de Venus, aunque en el presente “La
Estrella de la Mañana” es definidamente un planeta y no tiene una cola.
Sanchoniaton afirma que Astarte (Nibiru) tenía cuernos de toro. El planeta fue todavía
nombrado como Ashteroth, Karnaim o Asterte Encornada, nombre asignado a una
ciudad en Canaan en honor de la deidad. El becerro de oro adorado por Aarón y los
israelitas al pie del Monte Sinaí era una imagen con cuernos de la estrella. Fuentes
rabínicas afirman que:
"La adoración de Israel por la imagen del toro es parcialmente explicada por la
circunstancia de que al cruzar el Mar Rojo vieron el Trono Celestial y claramente
distinguieron a las Cuatro Criaturas Vivientes alrededor del Trono, y vieron al toro".
Una copia del becerro fue colocada por Jeroboam en Dan, en el gran templo del Imperio
del Norte.
Tishtrya del Zend - Avesta es la estrella que ataca a los planetas:
42. 42
"La brillante y esplendorosa Tishtrya moldea su forma con luz que se mueve en la
forma de un toro con cuernos de oro".
Los egipcios pintaron similarmente al planeta y lo veneraron en la efigie de un toro. El
culto al toro también floreció en la Grecia Micénica. Una cabeza de vaca dorada con
una estrella en su frente fue encontrada en Micenas, en la Grecia continental.
Las gentes de la lejana Samoa, tribus primitivas que dependen de la tradición oral ya
que no poseen escritura repiten hasta hoy:
"El planeta Nibiru se puso salvaje y le salieron cuernos de su cabeza".
Los Ajenjo podían ser vistos sin un telescopio. Los cuernos eran porciones luminosas de
la cola de Nibiru que se cercaba a la Tierra. Los cuernos pudieron extenderse hacia el
Sol en la medida que Nibiru se aproximaba al Sol, mientras que las colas de los cometas
generalmente apuntan en dirección opuesta al Sol.
Realmente Ajenjo podría definirse como un “Cometa” tal y como afirmó el astrónomo
Carlos Muñoz Ferrada del que hablaremos en otro capítulo posterior.
Otras representaciones más recientes quizás son el famoso ' Serpent Mount ' en el estado
de Ohio, originalmente de 1846. Un cuerpo de serpiente en espiral se adjunta a un
esferoide alargado.
Y la representación de Avebury, Inglaterra.
43. 43
Estos dos diseños son las representaciones que más fielmente se ajustarían a la realidad.
Sin duda la similitud con un Cometa es enorme pero cada persona es diferente y por lo
tanto su punto de vista también.
En la antigüedad la gente se limitaba a identificar lo que veían sus ojos y quizás no
estaban familiarizados con el mundo de la astronomía así que sus comparaciones las
hacían con cosas que cotidianas para ellos que conocían de sobra.
El tiempo va desgastando la piedra y el folclore pero parece mentira que miles de años
atrás en distintas partes del mundo que no tenían ningún tipo de relación se describiera
el mismo acontecimiento pero con distintos puntos de vista.
44. 44
EVIDENCIAS GEOLÓGICAS
Sin duda los episodios catastróficos han quedado grabados de manera inexorable en
nuestro planeta. Son numerosos los vestigios geológicos de épocas pasadas en los cuales
se puede apreciar cómo hemos sufrido una serie de catástrofes a lo largo de los miles de
años.
Tenemos muchos indicadores de dichos factores: Los anillos de los árboles, depósitos
de sedimentos, estratificación del terreno, fósiles, cilindros de hielo…etc. Cada uno de
ellos nos narra de una manera gráfica y visual que en distintas épocas ocurriendo
desastres naturales de diversa índole.
Los científicos Michel R. Legrand y Robert J. Delmas del Laboratorio de Glaciología y
Geofísica del Ambiente. Publicaron un artículo “Impurezas Solubles en Cuatro
Muestras de Hielo de los Últimos 30,000 años”, en el cual a partir de unas muestras de
distintos cilindros de hielo hicieron gráficos de las variaciones del Oxígeno 18 y los
componentes iónicos Na NH 4 y Ca2 y H y Cl y NO3 y SO4. La escala de tiempo para
cada nivel del componente iónico, así como los niveles de O18 llegan hasta hace 30,000
años. El gráfico muestra coincidencias en los años 1600ªA.C, 5200 A.C, 8800 A.C,
12400 A.C, 16000 A.C, 19600 A.C. Todas estas ocasiones fueron de gran stress
geológico.
La Glaciología es la ciencia que estudia los mantos de hielo de
la Antártida y Groenlandia hasta la escarcha y el granizo, pasando por los glaciares de
montaña, la nieve, el hielo marino, el hielo lacustre y el hielo fluvial. Muchos
científicos la estudian para comprobar las distintas cantidades de CO2 que a lo largo de
los siglos han dado lugar a cambios climáticos. Dichos estudios están basados en las
mediciones de CO2 atrapado en las burbujas de aire extraído de cilindros de hielo de la
Antártida y Groenlandia sobre todo. También hay que decir que muchos autores dudan
de la exactitud de los datos obtenidos por este medio. Algunos rangos de fechas pueden
variar de 100 años en adelante pero los cambios cíclicos son evidentes.
Podemos encontrar una clara similitud entre estas anomalías encontradas en los
cilindros de hielo y las supuestas venidas de Ajenjo. Sitchin y otros autores dan a este
periodo orbital de 3600 años una cierta importancia. No es de extrañar viendo las
coincidencias y evidencias geológicas que se presentan. No hablamos de un hecho
aislado, de catástrofes puntuales ocurridas en un lapso de tiempo. Sino de catástrofes
que pudieron perfectamente ser el inicio y final de distintas civilizaciones, como tantos
vestigios históricos tenemos.
El suceso del año 1600 A.C, casi no muestra registros de actividad volcánica en el
hemisferio sur. Pero en el norte, las muestras nos dicen que la actividad comenzó en el
año 1644 A.C. Los datos de muestras de hielo de Groenlandia parecían apoyar las
fechas de radiocarbono. Una gran erupción fue identificada en muestras de hielo
45. 45
fechada en 1644 A.C que se sospechaba fuera Santorini. Sin embargo, ceniza volcánica,
obtenida de un núcleo de hielo demostró que no era de Santorini, llevando a la
conclusión de que la erupción puede haber ocurrido en otra fecha.
Hay que mencionar que algunos autores apoyan la teoría de la erupción de Santorini
como posible causa de las supuestas plagas de Egipto que se mencionan en la Biblia.
Entre el 1628 A.C y el 1627 A.C la erupción del volcán terminó con una gigantesca
explosión de caldera. Como efecto de la explosión la isla perdió buena parte de su
superficie, y se puso en marcha un maremoto que asoló el Mediterráneo Oriental,
provocando, entre otros efectos, una grave crisis de la civilización minoica de Creta.
Marinatos popularizó la idea de que la explosión prehistórica de Santorini está en el
origen del mito de la Atlántida y del Mito del Éxodo. La explosión fue muy intensa y la
emisión de polvo oscureció la atmósfera lo suficiente como para que el hecho fuera
observado en China.
El 15 de julio, en un artículo publicado en 1999 por la revista Geophysical Research
Letters, el cambio de clima árido del Desierto del Sáhara ocurrió rápida y
dramáticamente hace 3600 años. Llegaron a la conclusión de que el cambio climático
actual en el desierto del Sahara fue provocado por cambios en la órbita de la Tierra y la
inclinación del eje terrestre. El cambio en el clima y la vegetación del norte de África
fue abrupto.
Un estudio realizado por Claude Jones de los “Grandes Lagos” demostró que estos
lagos han existido por sólo 3600 años. Esto es confirmado por varios mapas geográficos
históricos de Michigan disponibles en las bibliotecas de Michigan. Gales obtuvo el
mismo resultado en Owen Lake en California. Van Winkle obtuvo el mismo resultado
en los lagos Albert y Summer en Oregon.
Análisis de radiocarbono por Libby también indican que las plantas asociadas con los
mastodontes en México tienen probablemente sólo cerca de 3600 años de
antigüedad. Similares conclusiones sobre la supervivencia tardía de la fauna del
Pleistoceno fueron sacadas por diversos los trabajadores de campo en muchas partes del
continente americano.
A partir de observaciones en las playas de todo el mundo, Daly llegó a la conclusión de
que hubo un cambio en el nivel de los océanos, que bajó de hace 3600 años. Kuenen y
otros confirmaron los resultados de los hallazgos de Daly con evidencias derivadas de
Europa.
La evidencia del evento del año 5200 A.C es fuerte en la muestra “Dome C” también.
Según el artículo en el New York Times del 17 de diciembre de 1996
titulado “Diluvio Del Mar Negro Podría Relacionarse Con Difusión De La Agricultura
En Europa”, un equipo internacional de geólogos y oceanógrafos reconstruyó la
historia de una catastrófica inundación en dicha fecha.