Este poema expresa el profundo amor de un hombre por una diosa llamada Ariana. El hombre desea que Ariana sea su luz y su sol para alumbrar su vida. Daría su vida con tal de pasar la noche con ella y el resto de sus días. La considera su luna, su sol, su despertar y todo aquello por lo que lucha. El amor que siente por ella es tan grande que penetra su corazón y lo llena por completo. Con un abrazo cálido de ella sería como tener un pedacito de cielo en la tierra.