La tecnología nos ayuda a resolver problemas cotidianos fácilmente y nos permite tener una vida más sencilla. Sin embargo, también tiene efectos negativos como la contaminación ambiental debido al incremento en el consumo de energía y emisiones de gases, el calentamiento global, la generación de residuos difíciles de eliminar como los plásticos y residuos nucleares, y los daños de accidentes como derrames de petróleo. Se proponen soluciones como el reciclaje, energías alternativas y la reducción de emisiones.