Las redes sociales permiten ampliar el círculo social y crear nuevas amistades y contactos laborales, pero al compartir información personal hay que usarlas de forma prudente y responsable para evitar que otros abusen de esa información y pongan en riesgo la identidad e integridad de las personas. Se debe aprovechar las herramientas de las redes sociales de forma madura y consciente de los riesgos de un uso inadecuado.