Las ciudades ofrecen muchas oportunidades para que las personas disfruten de actividades recreativas y culturales en espacios públicos. Estos espacios son importantes para promover la interacción social y mejorar la calidad de vida de los residentes urbanos. Sin embargo, a menudo enfrentan amenazas como la gentrificación, la privatización y el desarrollo comercial que pueden reducir el acceso público y la diversidad de usos.