1. 27-06-2013, Valparaíso.
Como estudiante de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso expongo que :
El día 25 de junio del presente año, luego de ser conocidas las votaciones de las
diferentes carreras de la PUCV en el CGE en respuesta al cierre de las puertas al dialogo
por parte de rectoría y la poca claridad y concreción de las propuestas entregadas al
alumnado, se toma la decisión de la radicalización del movimiento estudiantil mediante una
Toma general de los edificios de la universidad. Frente a esta decisión, los estudiantes
presentes en el CGE nos dirigimos al eje Brasil a realizar la ocupación de los diferentes
edificios; personalmente me dirigí a Casa Central. Luego de estar aproximadamente una
hora afuera del recinto intentando ingresar, comenzamos a entrar a la Universidad
mediante una escalera que conducía al segundo piso de la misma. Una vez que varios
compañeros logran ingresar, Fuerzas Especiales de carabineros, llegan al lugar por avenida
Argentina a impedir que esto siguiera sucediendo. Inmediatamente comienza el
procedimiento para tomar detenidos a los compañeros sin siquiera intentar dialogar ni
avisar sobre un posible desalojo. En ese momento se encontraba una compañera subiendo
por la escalera, ante esto, los efectivos de fuerzas especiales procedieron a moverla con el
objetivo de que mi compañera no lograra subir; junto a dos compañeros afirmamos la
escalera y fue en ese momento cuando Fuerzas Especiales nos retienen violentamente.
Logré que me soltaran, pero al lado mío se encontraba un compañero en el suelo al cual
fuerzas especiales lo estaban golpeando y pisando, frente a esto, intenté ayudarlo y
alrededor de 4 carabineros de las fuerzas especiales me detuvieron, tirándome al suelo y
arrastrándome de mi bufanda y mochila, de esta forma, me condujeron al furgón de fuerzas
especiales. Una vez arriba, nos quitaron los celulares, nos leyeron nuestros derechos y se
nos informó que habíamos sido detenidos bajo el cargo de usurpación de la propiedad
privada. Posteriormente, en Pedro Montt con 12 de febrero, nos hicieron bajar del furgón,
esposándonos y haciéndonos ingresar a un auto de carabineros, nos condujeron al Hospital
Carlos Van Buren, donde constatamos lesiones, procedimiento que no fue firmado por
nosotros, para ser trasladados a la 2ª Comisaría - Valparaíso Central. En el recinto me
separaron de mis compañeros y una carabinera me condujo al baño del recinto, donde me
obligó a despojarme de mi vestimenta completamente, incluyendo la ropa interior, además
hizo que me agachara desnuda frente a ella, como también dándole la espalda; posterior a
esto, la funcionaria policial me comenzó a entregar de una prenda para que me vistiera, una
vez vestida, me condujo a una celdacontigua a la de mis compañeros. Luego de un tiempo,
llegaron funcionarios y nos informaron que no existían cargos en nuestra contra,
contradictorio a los que nos había sido informado anteriormente en el furgón policial, por lo
que solo nos habían realizado un control de identidad, sin embargo, no firmamos ninguna
documentación que acreditara que habíamos sido detenidos, que nos habían dado a conocer
nuestros derechos ni que nos estábamos retirando de la comisaria, entregándonos nuestras
pertenencias y expulsándonos del recinto.

2. Ante esto declaro:
1.- Ante las declaraciones de las autoridades universitarias referentes a la supuesta
violencia ejercida por nosotros, estudiantes, en la ocupación de los edificios; considero que
las respuestas entregadas por parte de rectoría a nuestro “Exigitorio único PUCV”
demuestran la poca o nula disposición de entregar soluciones y avances concretos a los
años de movilización que como estudiantes hemos llevado a cabo en busca siempre del bien
común, en ese sentido, estas respuestas vacías e inconsistentes resultan tanto o más
violentas que cualquier acción que se pudiese llevar a cabo.
2.- Repudio enormemente el hecho de que las autoridades autoricen un desalojo en una casa
de estudio con rol público, conociendo la forma de proceder de carabineros y fuerzas
especiales, poniendo en riesgo evidente, tanto físico como moral, a todos los estudiantes.
3.- Teniendo en cuenta que la Toma de la universidad fue decidida democráticamente por
parte del consejo general de estudiantes, me parece inaceptable que rectoría no posibilite
llevar a cabo estas acciones siendo que en repetidas ocasiones mencionaron la voluntad de
respetar las decisiones emanadas del estudiantado y avalar las movilizaciones a nivel
nacional y local. En este sentido, agregar que la última respuesta a nuestro “Exigitorio
único PUCV”, vino acompañada de un “ultimátum” lo que cerró todo camino hacia el
diálogo imposibilitando continuar con el paro indefinido y provocando que como
estudiantes, decidiéramos radicalizar nuestra movilización como medida de presión para
poder lograr alcanzar nuestras exigencias.
4.- Declaro públicamente que el día 25 de junio del presente año, sentí que todos mis
derechos como mujer, como estudiante y como ciudadana fueron vulnerados y pisoteados
por el actuar violento de carabineros. Considero que nadie debe pasar por la inmensa
humillación que significó desvestirme frente a una carabinera y mostrar mi intimidad de
mujer, más aún el hecho de tener que ponerme en posiciones indignas para que ella pudiera
observar. Recalco la intención de querer hacer público mi desnudo a los demás detenidos
que allí se encontraban, lo que solo fue evitado debido a mi conocimiento de la forma en
que se procede en una detención, sin embargo, tuve que desnudarme frente a sentirme
amenazada física y psicológica por parte de la carabinera y todo su contexto.
5.- Finalmente, creo que estas medidas solo buscan amedrentarnos en la protesta social y
lograr que no continuemos luchando por nuestros ideales y convicciones, lo que bajo
ningún punto de vista fue logrado en mi persona, todo lo contrario, ya que con esta
situación vivida solo lograron reafirmar y aumentar mi convicción y fuerza para continuar
en esta lucha. En este sentido, los invito a reflexionar y aumentar el poder de lucha ya que
nuestros cuerpos pueden ser amedrentados y ultrajados, pero jamás lograrán destruir
nuestras mentes y nuestro espíritu soñador y consciente.
¡Arriba los que luchan!