El documento describe una competición de matemáticas escolares. El favorito era Sócrates, pero cometió errores porque se dedicó a hacer bromas a su rival Anna en lugar de concentrarse en su propia prueba. Para sorpresa de Sócrates, Anna ganó la competición a pesar de estar cansada.

1. EL INGENIOSO DERROTADO
Estaba a punto de celebrarse el certamen
de matemáticas escolares en la ie
Ciudadela de la Paz. Los niños más listos
estaban reunidos para empezar la
competición.
El favorito era Sócrates, un chico de 13
años que había batido todos los récords
de cálculo y resolución de problemas. Muy
de cerca le seguía Anna, una niña de
grado sexto uno de su misma edad.
Anna estaba muy cansada, al igual que Sócrates. Ella sabía que tenía que
dedicar todas sus fuerzas a resolver la última prueba de cálculo. Sócrates,
por su parte, estaba convencido de que ganaría, y
dedicó sus últimos esfuerzos a hacer bromas a su
rival.
Los jueces comprobaron los ejercicios de los
chicos. Al cabo de un rato un juez se acercó a los
micrófonos para anunciar el ganador:
El vencedor de este año es…. la señorita Anna,
de Gran Bretaña.
dijo Sócrates-. ¡Eso es imposible!
Si te hubieras preocupado más de tu prueba en vez de molestar a tu rival
no hubieras cometido errores, Podrías haber
ganado sin humillar ni molestar a tu rival.