El documento describe un mapa de riesgos de una central azucarera ante un sismo de magnitud 7. Se determinó que las áreas más peligrosas son las calderas y la sala de control, donde se trabaja con maquinaria pesada y químicos calientes, por lo que corren mayor riesgo en caso de sismo. Otras áreas también pueden verse afectadas pero se encuentran más retiradas de las maquinarias, dándole a los trabajadores más tiempo para evacuar por la salida 2.