4. Diversas aplicaciones de realidad aumentada (RA)
permiten descubrir facetas del mundo que antes estaban
solo en las enciclopedias. Es posible, por ejemplo, hacer
un tour virtual de la ciudad que se visita, conocer más
datos acerca de un monumento, pararse frente a una
obra de arte y, al enfocarla con un celular, saber quién la
pintó, en qué contexto histórico y hasta qué obras
similares se produjeron en la misma época.
La RA ya se usa para generar mapas en 3D del lugar que
se escanea, que pueden dar indicaciones mucho más
precisas que las que logra el propio GPS.
Además, es posible descubrir hoteles, restaurantes,
comercios y mil lugares ubicados en el mapa. El turista
despistado podría apuntar el móvil hacia una esquina de
Montevideo y descubrir dónde queda el lugar más
cercano para comer comida italiana, si es que antes ese
restaurante se “geolocalizó” .