Desde el pasado día 15 de junio se ha hecho realidad el sueño de millones de personas: poder viajar a otro país de la Unión Europea sin tener que estar permanentemente vigilando las llamadas realizadas o las aplicaciones del móvil con actualizaciones automáticas, o bien directamente permaneciendo en el extranjero incomunicados. Se trata del fin del roaming, que marca el inicio de un verdadero mercado único.