El poema expresa los sentimientos que surgen en el hablante al decirle "te quiero" a su amado/a. Al pronunciar esas palabras, el hablante siente que se llena el alma de pájaros y cielos, que se le encoge el pecho y agrandan los silencios, y que grita que está viva aunque un nudo en la garganta le impide hablar. Al decir "te quiero" solo desea mirarse en los ojos de su amado/a, pues solo en ellos vive su amor.