2. Se encuentra en los bosques de América Central y Sudamérica. Su piel contiene un químico tóxico que pone enfermo o mata a cualquier animal que la toque o la coma. Dos microgramos de esta toxina podrían matar a un mamífero grande o incluso a una persona. Rana veneno flecha
3. Pez piedra Se encuentra en aguas del Pacífico y alrededor de Australia. Este pez se parece a una roca o pieza de coral. Bien camuflado, ataca a cualquier pez que nada por las cercanías. Una potente toxina almacenada en sus 13 espinas puede detener a cualquier depredador que se cruce en su camino. En humanos, el veneno causa un intenso dolor, inflamación de los tejidos, conmoción y finalmente la muerte.
4. Nativa de Australia, es considerada la serpiente más venenosa de la Tierra. Una mordida contiene suficiente toxina (110 miligramos) como para matar a 100 personas. Su veneno puede causar vómitos y hace que se detenga la respiración. Afortunadamente, la taipán es muy tímida y es un reptil poco agresivo. Serpiente taipán de interior
5. Se encuentran en aguas oceánicas de Asia y Australia. Esta peligrosa medusa trata de eludir a otras criaturas. Un golpe accidental contra sus tentáculos y sus potentes aguijones te perforarán. Su veneno puede paralizar el corazón o los pulmones, y también disolver la piel. Avispas del mar
6. Pulpo de anillos azules El mordisco de este pulpo no duele, pero las neurotoxinas presentes en su saliva empiezan enseguida su temible trabajo. En cuestión de minutos, la persona que recibió el mordisco experimenta entumecimiento, debilidad muscular y poco después, la víctima deja de respirar y muere.
7. Escorpión dorado israelí Se le encuentra en el norte de África y en Oriente Medio. También llamado “escorpión de aguijón mortífero” por lo que su nombre lo dice todo. Aunque su aguijón no es particularmente largo o fuerte, un pinchazo de este escorpión (el más exótico del mundo) causa un dolor insoportable, fiebre, coma, convulsiones, parálisis y muerte.
8. Araña de tela en embudo de Sydney Australia es el hogar de muchas criaturas venenosas, y este arácnido es uno de los peores. Grande y agresivo, produce una de las peores toxinas que alguna araña pueda generar. Sitúa su tela cruzando la entrada de su madriguera. Sus colmillos inoculan una neurotoxina que causa un gran dolor y puede matar a una persona en 15 minutos. Su veneno no afecta a la mayor parte de los mamíferos solo a los humanos.
9. Caracol de concha marmórea Este caracol lento de movimientos, vive en los arrecifes de todo el mundo. Emplea el veneno para capturar a sus presas. Reposando en el interior de la concha, el caracol asoma una especie de nariz, llamada probóscide. Un diente afilado en su extremo actúa como un arpón. El veneno, una neurotoxina, viaja a través del diente hacia el interior de la víctima, paralizándola casi de inmediato.