Este documento contiene tres chistes malos. El primero trata sobre un hombre que entra en un bar de pinchos y grita de dolor. El segundo pregunta dónde se coloca un árbitro para pitar un penalti, a lo que responde "detrás del pito". El tercero consiste en un semáforo que le dice a otro que no lo mire porque se pondrá rojo.