El mantenimiento de un PC incluye rutinas periódicas como limpieza, diagnóstico y desfragmentación para mantener un óptimo rendimiento y prevenir fallas. Existen dos tipos de mantenimiento: preventivo, para evitar problemas mediante limpieza y corrección de errores; y correctivo, para diagnosticar y reparar problemas técnicos. Las herramientas básicas incluyen destornilladores, pulsera antiestática y alcohol isopropílico.