Al Gore, ex vicepresidente de EE.UU., presenta en su documental "Una verdad incómoda" evidencia científica del calentamiento global causado por la actividad humana y sus consecuencias, como el derretimiento de los glaciares y eventos climáticos extremos. El documental crea conciencia sobre la necesidad de acciones individuales y colectivas para mitigar este problema y proteger a las generaciones futuras. Aunque el cambio climático ya afecta al planeta de forma alarmante, todavía es posible tomar medidas para evitar mayores
1. UNA VERDAD INCOMODA
Resulta algo inverosímil el hecho de que Al Gore ex vicepresidente de los Estados Unidos y ex
candidato a la presidencia sea ahora un activista de primera línea y quien nos muestra de una
manera extraordinariamente clara un problema hacia el cual gran parte por no decir la mayoría de
la humanidad ha vuelto sus ojos, definitivamente después de haber visto este documental en
donde de una manera tan clara y precisa Gore deja sentado un precedente en cada uno de los
espectadores acerca de la importancia del papel que cada uno debería llevar a cabo como un
aparentemente insignificante aporte a la conservación del medio ambiente y sobre todo
propender a tomar medidas orientadas a evitar el calentamiento global.
Es desagradablemente sorprendente el hecho de cómo este terrible fenómeno causado por la
misma humanidad que en su afán de progreso desmedido ha permitido que se haya elevado la
temperatura en nuestro planeta, de 1 grado en el Ecuador (refiriéndonos a la línea ecuatorial) y
hasta 4 grados en la Antártida, lo que ha hecho que los glaciares tan importantes para todo el
planeta se hayan derretido de forma extraordinariamente acelerada lo que ha generado una
influencia de incalculables consecuencias en fenómenos meteorológicos como el huracán Katrina,
que azotó “coincidencialmente” al mayor causante de la contaminación en la tierra, los mismos
Estados Unidos de Norteamérica. La incidencia del calentamiento global es un fenómeno sin
límites ni distinciones que lamentablemente ha llegado hacia países como el nuestro, en los
cambios climatológicos, y en la proliferación de enfermedades contagiosas que son generados por
la migración a zonas más altas de insectos que otrora pertenecían a otras zonas geográficas de
mayor humedad y calor, caso específico del dengue (registró casos en la ciudad del Puyo, provincia
de Pastaza), es en esos momentos en el que uno se pregunta: ¿hasta dónde va a llegar esto?, ¿qué
especies más tendrán que desaparecer o mutar?, ¿seremos nosotros una de ellas?. Al Gore nos
presenta de forma muy clara y basada en simulaciones y estudios científicos de muy alto nivel una
realidad que en verdad asusta y que crea una conciencia que quizá aún no es tardía, pues nos hace
ver que si seguimos como hasta hoy, o quizá hasta hace poco, nosotros la misma humanidad nos
estamos llevando paso a paso a la autodestrucción.
Finalmente nos permite ver y sobre todo pensar que todavía podemos hacer algo individualmente
y en conjunto, al pensar no solo en nosotros sino en las generaciones que están por venir, la serie
de sugerencias del final de la película nos induce a creer en nosotros mismos y que lo que
hacemos lo podemos hacer de una manera distinta o mejor en bien de todos, de igual forma surge
la inquietud de replicar esta película entre las personas cercanas a nosotros y si no es posible al
menos transmitir los principios básicos de sostenibilidad, pues si cada uno de nosotros hacemos
una pequeña parte esta será multiplicada por millones de personas conscientes de esta “verdad
incómoda e inconveniente, y por la cual hemos decidido cambiar nuestra forma de vida.