El documento explica el origen de varias expresiones que incluyen la palabra "carajo", las cuales se derivan del pequeño canastillo ubicado en lo alto del mástil de las antiguas naves. El carajo era un lugar inestable donde los marineros eran enviados como castigo o cuando estaban mareados, dando origen a frases como "vete al carajo", "no sirves para un carajo", y "está tan lejos como el carajo". El documento también indica que decir "me importa un carajo" se refiere a no tener interés