2. Había una vez una bonita estrella llamada Auriazul, a
la que encanta jugar pero mucho más dar luz.
Ella era coqueta y de las más curiosas, le encantaba
bailar pero por sobre todo descubrir muchas cosas.
Sus mejores amigos eran el sol garabato y la nube
rayuela, con los que siempre salía para visitar a la
abuela.
Compartían juegos, dibujos y canciones, en la casita
de garabato que tenia sillones.
Las meriendas eran divertidas en la casa de rayuela
porque todos preparaban sus mantelitos de telas.
A la noche cuando tenía que ir a cenar, volvía a casa
para sus manitos lavar.
Cuando la comida terminaba y era hora de dormir,
ella preparaba el cuento que quería oír.
Cuando la historia había finalizado juntas repetían el
colorín colorado este cuento a terminado.