Este documento narra la historia de Mefiboseth, un niño que provino de una familia real pero que perdió todo tras un accidente en su infancia. Vivió solo y ocultándose de su realidad hasta que el rey David, representando a Dios, le ofreció su bendición y protección. El documento insta al lector a dejar atrás su pasado doloroso y entregar su vida a Jesús para disfrutar de la paz y el gozo que Él provee.