REFLEXIONES

1. (611)

2. SEÑOR, ¡CUÁNTO AMO TU LEY! PIENSO EN ELLA EL
DÍA ENTERO.
SALMO 119:97
TU LEY, QUE SIEMPRE ME ACOMPAÑA, ME HA HECHO
MÁS PRUDENTE QUE MIS ENEMIGOS.
SALMO 119:98

3. SOY MÁS SABIO QUE TODOS MIS MAESTROS, PORQUE
MEDITO TU ENSEÑANZA.
SALMO 119:99
POR CUMPLIR TUS ÓRDENES, AVENTAJO EN
INTELIGENCIA A LOS ANCIANOS.
SALMO 119:100

4. APARTO MIS PIES DEL MAL PASO, PARA GUARDAR
FIELMENTE TUS PALABRAS.
SALMO 119:101
JAMÁS ME DESVÍO DE TUS SENTENCIAS, PORQUE TÚ
ME HAS ENSEÑADO.
SALMO 119:102