La democracia ateniense permitía solo a los varones adultos de origen ateniense tener plenos derechos políticos y votar. Los esclavos, extranjeros, niños y mujeres estaban excluidos del poder político, aunque Platón propuso que las mujeres deberían recibir la misma educación y tener la oportunidad de ocupar cargos políticos.
1. La democracia ateniense era, no obstante, una democracia restringida, pues en ella sólo alcanzaban
el título de ciudadanos con plenos derechos y deberes los varones adultos de origen ateniense.
Estaban, pues, excluidos del poder político los esclavos, los extranjeros, los niños, e incluso las
mujeres, que no podían elegir ni ser elegidas magistradas, aunque Platón (427-347 a. C.) en su
República (Politeia) propuso que las mujeres pudieran recibir la misma educación y alcanzar altos
cargos políticos, como los varones, según su talento, capacidad de trabajo y amor a la verdad.