El documento habla sobre el encuentro de alguien con un jardín silencioso donde sólo se expresan las fragancias de las flores. La persona siente la tentación de acariciar los pétalos de una flor en particular y disfrutar de su aroma, lozanía y flexibilidad. Más tarde, cuando llega el otoño, la persona se va llevándose los pétalos de la flor bajo su almohada para seguir teniéndola cerca.