Steven Jobs dio un discurso a los estudiantes de la Universidad de Stanford en 2005 donde compartió tres historias personales. La primera historia fue sobre cómo abandonó sus estudios en la universidad después de seis meses. La segunda historia fue sobre cómo sus padres adoptivos lo enviaron a la universidad aunque no quería estudiar allí. La tercera historia fue sobre cómo Jobs reflexionaba sobre su propia mortalidad hasta que fue diagnosticado con cáncer hace casi un año.