1. Tres claves para tener éxito y felicidad en la vida
En la universidad de la vida cursamos muchas colegiaturas, aprendemos muchos oficios, y nos preparamos para
cumplir nuestra profesión a cabalidad. El éxito está en saber cuál es esa profesión, ser capaces de sacarla
adelante a base de convicción, esfuerzo, fe y sacrificio, y obtener los resultados o frutos esperados.
Cada persona debe ir entendiendo el sentido trascendente de su profesión u oficio, es decir, la visión y la
motivación con la cual la ejerce; algunos lo hacen con una motivación extrínseca, lo hacen por la paga, por la
recompensa, se aseguran primero de que van a recibir a cambio de su trabajo.
Otros los hacen con una motivación intrínseca, ya no tanto por la paga, o la plata, o porque van a recibir, sino
porque les gusta, les nace hacerlo, se sienten felices ocupándose en esa labor, independiente de cual sea su
salario o remuneración. Por supuesto, que la vida es justa, y en toda labor hay un fruto, es un principio
elemental.
Pero esta quienes están dispuestos a ir mas allá; aquellos que han entendido que su labor cobra mucho mas
sentido y significado, cuando la hacen no solo por la paga o por que les gusta; sino porque ese es su sueño, su
proyecto de vida, porque es su sentido misional de vida, porque han llegado a convencerse, que de esa manera,
dejan huella y trascienden a su tiempo y a su generación, para eso han nacido y han venido a este mundo.
La mayoría de los padres quieren que sus hijos tengan aquello que ellos no tuvieron o de lo cual fueron privados;
anhelan que sus hijos progresen, logren sus metas, sus objetivos, hagan realidad sus sueños, siempre que, todo
esto signifique que van a estar bien y que serán felices. Y luchan y se sacrifican por ello; los hijos le imprimen
sentido y significado a la vida de sus padres.
Hay cientos de profesiones de las cuales uno puede aprender, porque si de algo podemos estar seguros es que
todo tiene su ciencia, su arte, su estilo, y le corresponde a cada persona imprimir en lo que hace su sello
personal. No hay una sola persona, que no tenga algo que enseñarnos, o al menos, de quien podamos aprender
algo. Por supuesto si somos humildes y tenemos ese interés.
En una de sus cartas, Pablo le escribe a Timoteo y le recomienda, que para tener éxito y felicidad en la vida, él
debe comportarse como un soldado, como un atleta y como un labrador; tres profesiones muy distintas la una
con la otra, pero en conjunto, reúnen el perfil indicado que una persona requiere para el éxito en la vida.
La obediencia a las normas y principios que debe caracterizar al soldado; la disciplina y buenas condiciones
físicas y emocionales que destacan a un atleta; la paciencia y constancia con que un labrador prepara sus
siembras, creyendo que a su tiempo disfrutara de la cosecha. Tres acciones claves, que nos permiten tener la
satisfacción del deber cumplido, el reconocimiento al logro y la provisión.
Pablo no solo se queda en el plano de la motivación, sino que el mismo se coloca como ejemplo para su
discípulo, desafiándolo y retándolo con su propia vida a seguir su ejemplo, “he peleado la buena batalla (como
soldado), he acabado la carrera (como atleta), he guardado la fe (como labrador) y solo esperaba recibir la
recompensa de aquel que aprecia cada esfuerzo que hacemos y premiaba nuestra labor.

2. Aquel de quien un día recibiremos el parte de victoria: “bien, buen siervo fiel, en lo poco fuiste fiel, en lo mucho
te pondré, entra en el gozo de tu Señor”.