Un tren que transportaba solo famosos y sus conocidos salió de Londres con destino a Liverpool, pero los frenos fueron cortados accidentalmente. El tren pasó varias estaciones sin poder detenerse, causando pánico entre los pasajeros. Otro tren intentó ayudarlos sin éxito. Finalmente, el tren se detuvo al quedarse sin combustible, pero permaneció el misterio sobre quién cortó los frenos, hasta que 8 meses después se descubrió que la causa fue un fantasma que habitaba el tren.