Manuel Rodríguez Erdoyza fue un patriota y político chileno que jugó un papel importante en la independencia de Chile. Tuvo conflictos con Bernardo O'Higgins y sus partidarios debido a su apoyo a los hermanos Carrera. Finalmente fue asesinado por órdenes de O'Higgins, aunque las investigaciones sobre su muerte nunca han llevado a una conclusión definitiva ni a castigos. Rodríguez sigue siendo una figura popular en la historia de Chile.

1. Gerardo Figueroa

2. Manuel rodríguez Erdoyza nació el 27 de febrero de
1785, Abogado, político y guerrillero, fue un patriota libertador chileno a
quien se le atribuyen un gran número de acciones, las cuales ayudaron a
la independencia de nuestro país.

3. Desde muy joven presento actitudes intelectuales y una
personalidad vivaz, lo que sin duda se vio reflejado en sus cargos
políticos.
Ya en la patria nueva, Rodríguez Erdoyza se había convertido en
personaje de mucha popularidad, todos hablaban de sus
hazañas, además de ser un fiel seguidor de la visión carrerista, lo
que provoco muchas molestias por parte de O’Higgins y sus
partidarios. Para evitar conflictos, se decidió alejarlo de Chile, así
le entregaron misiones diplomáticas en Estados Unidos, misiones
las cuales rechazo.

4. Así rodríguez continuo en conflictos con O’Higgins y
sus súbditos lo que lo llevo a estar en prisión en
dos oportunidades, ambas de muy corto plazo. Las
consecuencias de estos envíos fueron el apoyo
continuo a los Carrera por parte Manuel, lo que
provocaban acidas relaciones con el bando de
O’Higgins quienes se consideraban la oposición a
los Carreras.
San Martin jugo un rol de mediador al nombrarlo
auditor de guerra del Ejército en 1817.
Un año más tarde se le vio involucrado en conflictos
de guerrillas apoyando a los Carrera como
siempre, los que finalmente fueron derrotados y
fusilados. Este hecho marco una gran etapa en la
vida de Rodríguez, ya que en base al fusilamientos
de sus secuaces hizo una propuesta publica en
contra O’Higgins, lo que gatillo nuevamente a
encerrarlo, esta vez en el cuartel San Pablo.

5. Ya apresado, el 26 de mayo de 1818
fue trasladado a Valparaíso, pero
precisamente en Til Til, por una
cuadrilla que integraban los oficiales
Antonio Navarro, Rudecindo Alvarado
y los soldados Parra y Gómez. Un
balazo por la espalda seria la causa de
muerte de Rodríguez, un balazo por la
espalda que marco la muerte de uno
de los personajes más
trascendentales y populares de
nuestra historia.

6. El 30 de mayo un agricultor de Til
Til, llamado Hilario Cortés, descubrió el
cadáver del Rodríguez, por lo que aviso de
forma inmediata a autoridades del lugar. El
subdelegado Tomas Valle con la ayuda del
mismo agricultor Cortes, sepultaron
secretamente el cuerpo en la parroquia del
lugar.
El gobierno de O’Higgins se hizo el
desentendido y puso un proceso de
investigación, el cual fue llevado con
mucha lentitud y con escasa seriedad, y
aunque parezca una parodia el fiscal a
cargo de la investigación fue el propio
Alvarado uno de los oficiales responsable
de su muerte, este culpo de todo crimen a
uno de sus acompañantes el oficial
Navarro, por años ambos se culparon los
unos a los otros de la muerte de
Rodríguez, pero ambos fueron enviados a
cargos al extranjeros, lo que vuelve a
reflejar la ayuda de autoridades.

7. Finalmente ya terminado el mandato de O’Higgins, se reabrió el caso
Rodríguez, culpando así a Bernardo Monteagudo, mano derecha de
O’Higgins, pero nunca se le arresto ni castigo. Monteagudo al igual
que los demás oficiales se le otorgo un cargo en el extranjero.
Las investigaciones sobre la muerte de rodríguez se han abierto, una y
otra vez, con resultados parecidos, autoridades que nunca pagaron su
responsabilidad en el caso. Un ejemplo de las últimas investigaciones
es la de Juan Pablo Buono-Core, de la Unidad de Robos de la Fiscalía
Sur, quien investigó el caso durante tres años y medio, llegando a la
conclusión de que fue un secuestro con homicidio, y lo califica como
la primera muerte política de nuestro país, también en su expediente
culpo directamente a Bernardo O’Higgins y a la Logia Lautarina por
asignar el derecho de asesinato a los oficiales, así dejando como
asesino material al comandante argentino Rudecindo Alvarado.

8. "En Tiltil lo mataron los
asesinos, su espalda está
sangrando sobre el camino…".
Así lo describe Pablo Neruda en
un verso. Sin duda Rodríguez es
una de las grandes leyendas
populares de nuestro país, lo que
hasta el día de hoy trae
repercusiones sobre su
asesinato, su ideología
democrática liberal y su
patriotismo marco dejo una
huella en nuestro legado, y no
cabe la menor duda que “Aún
tenemos patria ciudadanos”.