Este documento describe la naturaleza amorosa y protectora de Dios hacia sus hijos. Afirma que Dios cuida tiernamente a sus hijos y los guía con amor, protegiéndolos en su seno. También sostiene que Dios provee para sus hijos tanto en la pobreza como en la abundancia, y les consuela y fortalece durante las tribulaciones. Concluye diciendo que el amor constante de Dios por sus hijos es más fuerte que la vida o la muerte, y que Dios sustenta a sus hijos con más cuidado