Este documento defiende la tesis de que los hombres necesitan tener dos mujeres, una esposa en el hogar y otra amante fuera del hogar. Argumenta que la esposa se encarga de las tareas del hogar y los problemas diarios, mientras que la amante satisface emocionalmente al hombre. También cita a un jurista que argumenta que el adulterio del hombre son meros "caprichos pasajeros" y no afectan su amor por su esposa, mientras que el adulterio de la mujer sí compromete la estabilidad del hogar